Hace casi ocho meses, el Ayuntamiento de León acordó por mayoría recuperar como propiedad pública un solar situado junto a la muralla y el Obispado de León, muy cerca de la Catedral, para tratar de impedir que se construya un edificio destinado a apartamentos turísticos, dejando libre y a la vista ese tramo inicial de muralla.
Sin embargo, esta iniciativa, que tenía la forma de una moción aprobada en el Pleno del Consistorio, salió adelante con la reticencia del equipo de Gobierno del PSOE, que se abstuvo, y tuvo que conseguir unir los votos de toda la oposición, Partido Popular (PP), Unión del Pueblo Leonés (UPL) y Vox. El texto aprobado a principios de abril instaba a negociar y si hiciera falta expropiar esa propiedad privada que antaño ocupaba el Restaurante Luisón en la esquina de la Plaza Puerta Obispo y que una empresa adquirió para levantar los apartamentos turísticos. Y eso fue al segundo intento, porque otro previo el 28 de diciembre, por una serie de carambolas, había conseguido al alcalde librarse de la presión gracias al apoyo del grupo municipal de extrema derecha.
Ante la ofensiva de la oposición por este asunto, el Grupo Socialista que gobierna en minoría en León y por boca del alcalde, José Antonio Diez, que poner en práctica ese intento de recuperación del solar resultaría no sólo difícil en términos administrativos y judiciales sino muy costoso en la parte económica. Ese sería, a su juicio, el alto coste municipal de que “de repente, en veinte días, les ha entrado una vena proteccionista”.
Se refería el regidor a que el Ayuntamiento ya había otorgado la licencia a la empresa promotora y en primer aquel momento sin oposición alguna en la Corporación. Incluso Patrimonio de la Junta había otorgado su parabién, con la única petición de que el nuevo edificio respetara la vieja fachada y no se construyera sobre lo que parecía la muralla de origen romano pero que en realidad era un lateral del Palacio Episcopal, sino que se buscara una solución para dejar el muro a la vista, aunque no sea desde el exterior.
El caso es que ocho meses después, el mandato plenario impuesto por la oposición no se está cumpliendo. La empresa continúa a buen ritmo todos los trabajos en el terreno, habiendo ya consolidado el solar tras las excavaciones iniciales y comenzando a levantar ya bien a la vista las vigas estructurales del nuevo edificio. Los obreros no han detenido las labores en ningún momento, ni siquiera en verano.
El texto aprobado por mayoría reclamaba literalmente “la creación de una comisión conformada por un concejal de cada grupo político y por el jefe del Subárea de Urbanismo –o su delegación- para iniciar de inmediato una negociación con la propiedad del solar de la Plaza de Puerta Obispo 15, con el fin de llegar a un acuerdo para revertir ese solar a titularidad pública”.
ILEÓN ha podido confirmar que, al menos en el seno del Ayuntamiento, no ha habido ni creación de la comisión ni siquiera conversación alguna con los grupos por parte del equipo de Gobierno, que tampoco da una explicación pública reclamada por este medio. Por el mantenimiento de las obras, tampoco parece haberse producido ninguna negociación con la empresa promotora, de manera que el acuerdo municipal ha quedado definitiva en papel mojado.