Sentimientos encontrados entre los leoneses tras recibir la noticia de la muerte de Isabel Carrasco

M.C. / C.G.

Muchos eran quienes criticaban sus actuaciones políticas, sus decisiones, sus 'sobresueldos', y sus escándalos. Unos pocos la adoraban sin límite, otros la respetaban y algunos más se la oponían rotundamente. Pero todos, absolutamente todos, la conocían y todos, sin excepción, repulsan el hecho. 24 horas después del brutal asesinato, que con tres disparos de pistola ayer acabó con la vida de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, la población sigue conmocionada. Isabel era un personaje público bastante controvertido entre los ciudadanos. Algunos la dedican unas últimas palabras.

La noticia corrió como la pólvora

“Me enteré en el barrio, estaba en una frutería y la gente lo empezó a hablar. A cualquier sitio que iba se hablaba de esto. Es algo muy impactante que no suele pasar en León” apunta un joven de 30 años. “Sobre ella tengo una opinión pública, la conocía de los medios de comunicación, y también porque mi hermana trabajaba en la Diputación. No tenía muy buena opinión, pero nunca tuve contacto directo con ella”, añade sin querer dar su nombre.

Otra ciudadana de unos 40 años de edad -que también evita dar su nombre de pila- asegura que se enteró en el trabajo al acceder a internet. “Conocía su trayectoria política pero como la de una política más. No la conocía personalmente. Según dice la gente de este mundo, era una muy buena política. El hecho es injustificable a todas luces. Nadie es dueño de la vida de nadie”, apostilla la mujer.

Todos, incluidos sus 'no simpatizantes' denuncian y repulsan el asesinato de la presidenta

María -nombre fictício- de 53 años, cuenta que se enteró por internet. “Hice click en las últimas noticias y me apareció este suceso. Yo no soy de León ni de la provincia pero lo que tengo entendido es que era una persona que había dejado 'bastantes cadáveres', por lo tanto no tengo un buen concepto. Es lo que he oído, lo que se comenta. Sin embargo, no se justifica la muerte de una persona con lo que haga ella en su vida laboral, por muy tremenda que haya sido. No hay perdón para las personas que lo han hecho pero, para mí, que están enfermas”, concluye.

Otro hombre joven, de unos 40 años, conoció la noticia de la muerte de Isabel Carrasco por medio de su hijo. “Me llamó mi chaval que pasaba por allí y había oído unos disparos y me contó la noticia. Me parece algo horrendo, que no tiene justificación y que es un asesinato que nos tiene a todos confusos. En una ciudad como ésta tan tranquila no me lo esperaba”. En cuanto a Isabel, el leonés comenta que “era una mujer con mucho carácter y que tenía las opiniones divididas porque ella 'era como era' pero, no se justifica para nada este hecho. Yo no me meto mucho en política pero esto no se lo deseo a nadie”.

“Me enteré de la noticia por la radio mientras iba en mi coche. Se quién es Isabel Carrasco, ¿quién que sea leonés no conoce a Isabel Carrasco?, se pregunta otro señor. ”La política es bastante parcial e impetuosa“, se contesta. ”En cuanto a la persona pues la veía por ahí, una persona normal con mucho carácter y sin más. De todas maneras no hay justificación alguna, de ningún modo, ni de ninguna forma. Es injustificable que se zanjen las diferencias ni con una muerte ni con una bofetada, quiero decir“.

El testimonio de un amigo de Isabel

“Me avisó un amigo que lo vio casi en directo. Me llamó porque sabe que yo tenía amistad personal con ella. La última vez que estuve con Isabel, también con Pedro, el alcalde de Puebla de Lillo, estábamos viendo a Manolo Tena. Tenemos amigos comunes, es muy amiga de mi hermana y tenía amistad con ella. Pienso que hay mucho loco por el mundo, que hay gente que está muy quemada. Son cosas que se hacen sin pensar. Por que tengas un problema con una persona, los seres humanos nos diferenciamos de los animales en que podemos dialogar, tenemos raciocinio e inteligencia. Por desgracia algunos esto no lo tienen”, se desahoga un amigo de Isabel Carrasco.

“Lo que ha dicho todo el mundo es cierto, tenía un carácter fuerte cosa que yo no considero como algo malo, es más, lo veo bien. Ella se creó muchas enemistades como cualquier persona que tiene un cargo político con amigos y enemigos. Y personalmente era una persona muy agradable, simpática, y te reías muchísimo con ella. Era capaz de desconectar de su trabajo, yo nunca hablé de política estando con ella. Es una lástima”, finaliza muy afectado.

Otra mujer entrada en la cincuentena asegura que se quedó “impactada”. “Lo primero que pensé fue que por mucho dinero que tengas, por un bolso de miles de euros que estaba a su lado, al final, somos todos iguales, la muerte nos llega a todos. Me hizo pensar en la brevedad de la vida. La conocí y me pareció una persona con un gran problema psicológico, incluso un complejo de inferioridad y de inseguridad, porque si no, no podría tener un estilo tan prepotente y tan bipolar. Pero jamás se desea la muerte a nadie, es algo injustificable, a pesar de ello tenía muchos enemigos”.

Una leonesa que se encontraba con su padre en el momento del asesinato, relata que estaban en una finca en la montaña. “Nos avisaron desde el salón gritando. Y cuando vimos la televisión nos pareció algo terrible”, comenta. “Sobre el suceso en sí, pienso que no era una persona como para merecer eso, en realidad nadie merece algo así. Sabía que tenía un temperamento fuerte, pero asesinar a alguien jamás está justificado”.