Piden dos años y tres meses de cárcel a los autores de una estafa informática por valor de 10.000 euros

El Juzgado de lo Penal número 2 de León acoge el próximo 8 de mayo un procedimiento contra tres acusados, dos mujeres y un hombre, de un delito estafa informática por el que la Fiscalía solicita para cada uno de ellos 9 meses de cárcel, en total dos años y tres meses de prisión.

Según las calificaciones provisionales de la Fiscalía, los tres acusados recibieron un correo electrónico con una supuesta oferta de trabajo de 'Virgin Finance', que aceptaron sin hacer ninguna comprobación, pese a sospechar que podía tratarse de una trama ilegal que se dedicaba a blanqueamiento de capitales a través de artificios informáticos por los que accedían a cuentas bancarias particulares.

Los procesados, puestos de común acuerdo y guiados por un propósito de obtener un beneficio patrimonial ilícito, recibían en sus cuentas varios cargos por valor de 3.330 euros, 3.300 y 3.300 de personas que no habían dado su consentimiento para ello. Después, tras quedarse una comisión, enviaban ese dinero a través de Western Union a un destinatario en San Petersburgo. En total, hicieron transferencias por valor de casi 10.000 euros de dos cuentas de las que eran titulares dos personas que no habían dado su consentimiento para ello.

La Fiscalía considera estos hechos constitutivos de un delito de estafa informática y, de forma subsidiaria, de un delito de blanqueo de capitales por imprudencia grave de los que son autores los tres procesados.

De este modo, solicita para cada uno de ellos 9 meses de prisión si son condenados por el delito de estafa informática. Por otro lado, si son condenados por el delito de blanqueo de capitales por imprudencia grave, la Fiscalía reclama que cumplan 7 meses de cárcel y abonen una multa de 6.000 euros.

Además, en concepto de responsabilidad civil deberán abonar las cantidades sustraídas de las cuentas corrientes de las dos víctimas, unos 10.000 euros.

Las defensas de los acusados lo niegan

Las defensas de los tres acusados niegan los hechos que se les imputan y consideran erróneo el relato de los hechos efectuado por la Fiscalía.

Así, afirman que los acusados recibían órdenes de la empresa 'Virgin Finance' y que nada les hizo suponer que fuera ilegal o que supusiera una estafa o implicara colaborar en el blanqueo de capitales.

Según las defensas, los acusados respondieron a una oferta de trabajo en una empresa internacional y lo aceptaron, sin sospechar que podría tratarse de algo ilícito.