Piden 12 años de cárcel a una mujer que apuñaló a su pareja en el cuello mientras dormía

La Audiencia Provincial de León acoge los próximos días 11 y 12 de diciembre un procedimiento contra una mujer acusada de un delito de asesinato en grado de tentativa por el que la Fiscalía pide para ella 12 años de cárcel. La defensa, no obstante, alega que la mujer había sido víctima de malos tratos y que en el momento de los hechos se encontraba inmersa en una enajenación mental grave y tipifica lo sucedido como un delito de lesiones.

Según las calificaciones provisionales de la Fiscalía a las que ha tenido acceso este periódico, los hechos se remontan a la madrugada del 2 de agosto de 2015. La acusada se encontraba en su domicilio, situado en León, con su pareja sentimental y tras haber discutido con él, cuando éste se encontraba dormido en la habitación, se dirigió hacia él con un cuchillo y con intención de causarle la muerte y sin que pudiera defenderse se lo clavó en el cuello.

La víctima se despertó e intentó zafarse del ataque sufriendo otras dos cuchilladas en la misma zona. La agresión afectó a partes de su cuerpo que contienen estructuras vitales lo que implica un riesgo y peligro evidentes para la vida.

Como consecuencia de la agresión, la víctima sufrió heridas importante en cuello, cara y manos que tardaron en curar 100 días, todos ellos impeditivos para sus ocupaciones habituales. Además sufre como secuelas agravación de otros trastornos metales y depresión previa y cicatrices en cara, manos y cuelo que suponen un perjuicio estético ligero.

La Fiscalía también recoge en sus calificaciones provisionales que la acusada, para evitar que su víctima pidiera ayuda, arrojó su teléfono móvil por una ventana hacia el tejado, donde posteriormente fue localizado por la Policía.

El hombre herido fue localizado por la Agentes de la Autoridad que tuvieron acceder al domicilio forzando la puerta al no abrirles la acusada y tampoco poder hacerlo la víctima.

Según la Fiscalía, los hechos son constitutivos de un delito de asesinato en grado de tentativa por los que solicita para ella una pena de 12 años de prisión. También la prohibición de acercarse a la víctima a una distancia inferior a 500 metros y comunicarse con él por cualquier medio durante 15 años.

La defensa alega enajenación mental

La defensa de la acusada niega los hechos y se muestra disconforme con el relato efectuado por la Fiscalía. Así, asegura que la acusada fue pareja sentimental de la víctima y convivió con él 4 años y 9 meses, tiempo en el que la mujer había sido víctima de constantes vejaciones, insultos, coacciones y amenazas.

La mujer, relata el escrito de defensa, había sido separada de su familia y estaba diagnosticada de ansiedad y depresión grave. Así, precisa que tras varios meses de acumulación de tensión y discusiones constantes, y después de producirse un episodio violento, la mujer consume una dosis ingente de pastillas, y realiza la agresión “adueñada de los efectos farmacológicos e inmersa en una enajenación mental grave”.

Para la defensa los hechos constituyen un delito de lesiones y, en caso subsidiario, un delito de homicidio en grado de tentativa.