La calidad del agua de consumo humano en León mantiene 'el tipo' a pesar de la sequía
A medida que ha descendido la cantidad de agua que almacena el pantano de Los Barrios de Luna, hasta alcanzar mínimos históricos que han rozado el 4% de su capacidad, en inversa proporción han crecido los bulos sobre la calidad del agua de consumo humano que sale por los grifos y las fuentes de la capital leonesa.
Un bulo que ha disparado en un nada desdeñable porcentaje la compra de agua embotellada entre quienes han considerado razonable que el escasísimo líquido que aún conserva Luna incrementa los sedimentos y elementos mucho menos saludables del agua que beben cada día.
Sin embargo, nada parece estar más lejos de la realidad Objetivamente es demostrable que la calidad del agua de León, considerada una de las mejores de España, se ha mantenido todo este año hidrológico tan adverso en iguales condiciones que en otros años de lluvias abundantes, acuíferos llenos y pantanos a rebosar.
La evolución de las analíticas oficiales en los últimos meses no ha variado y a pesar del descenso alarmante del caudal del embalse de Luna, en ningún momento los informes han determinado que el agua haya dejado de ser 'apta' ni siquiera por unas horas.
Imagen del pantano de Selga, del que se extrae buena parte del agua de consumo de la capital leonesa. / Cuatro Valles
Resultado cristalino
Su resultado es público, cristalino. Basta entrar en este apartado de la web oficial de la sociedad pública Aguas de León para consultar de manera constante los informes de analíticas en las dos estaciones depuradoras existentes (una para el agua de Luna, otra para la del río Porma), todos los depósitos (en la ciudad, los de Cantamilanos y la Carretera Asturias), y los puntos de la red de conducción situados en La Asunción, Centro de Salud de La Palomera, el caño de la Plaza de Riaño (Barrio Húmedo), Santa Margarita, la fuente pública de la Calle Natharet y el colegio Maristas San José. Pinchando en cada uno de ellos se accede a todos los datos del tratamiento y situación del agua.
A lo largo del año, se realizan 26 análisis completos en las depuradoras, depósitos y la propia red, otros 454 análisis de control y 1.200 exámenes complementarios. También se realizan un total de cien análisis en grifo del consumidor y hasta 10.080 análisis de cloro residual.
La sequía sí ha causado efectos
¿Eso quiere decir que la sequía galopante no ha causado ningún efecto? No, porque sí lo ha causado. Por ejemplo, un “incremento de los sedimentos sólidos”. Pero nada que no se pueda solventar con “más tratamiento en las estaciones depuradoras, someter el agua a más filtrados y si es necesario aplicar más hipoclorito”, explica el concejal de Infraestructuras y responsable de Aguas de León, José María López Benito. Pero en resumidas cuentas, el edil garantiza que por el grifo el agua no difiere de la que saliera, por ejemplo, el año pasado por estas fechas.
Además, hay que tener en cuenta algunos detalles no muy conocidos. Por ejemplo, que el líquido del que León se suministra de agua potable no procede tanto del embalse de Barrios de Luna, sino del embalse de Selga, aguas abajo de aquel. E iLeon.com tiene constancia de que la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) mantiene en éste de Selga un acopio de agua cercana al 90% de su capacidad. Un buen colchón para que León no pase sed tan fácilmente, vamos.
De Selga viaja el agua por el Canal del Páramo y sale hacia la depuradora de Oteruelo viajando por casi 30 kilómetros por tuberías desde aproximadamente Cimanes del Tejar. Allí se tratan en torno a 400 metros por segundo de líquido.
Pero otro detalle es que parte del agua también llega a los grifos leoneses desde el río Porma, a través de Candanedo (a unos 33 kilómetros) y a una capacidad mínima de 425 metros por segundo, ampliable si es necesario. En este caso, en la estación de tratamiento del Portillín donde se 'limpia' el agua.
Esta captación del Porma, tan grande como la del Luna, es la que CHD y la Comisión de Sequía que este año ha vigilado más que nunca las alertas por sequía ha recomendado al Ayuntamiento de León que active de manera prioritaria. Como así se está haciendo, remarca López Benito, que recuerda que por mucha agua potable que consuma León, supone “una ínfima cantidad, casi imperceptible” de cualquiera de los dos pantanos. Porque el grueso (en torno a un 90% de lo que se almacena en Barrios de Luna) se lo 'bebe' el regadío.
Pero hay otro detalle que evidencia, según el Ayuntamiento de León, la excelente salud del agua leonesa, incluso en plena sequía brutal. Y este detalle es que ninguna de las siete fuentes públicas de la ciudad que no se alimentan de la red general sino de acuíferos subterráneos propios, a través de pozos artesianos, tampoco han sufrido en la calidad de su composición, como tampoco se han secado. Lo remarca Pedro Llamas, concejal de Consumo y Fiestas, bajo el que recae la responsabilidad de 'Salubridad pública'.
Las siete fuentes artesianas son dos en Trobajo, otros dos en Armunia, una más en Oteruelo, otra en Puente Castro y la más conocida de todas: la de la fuente del Espolón, en Puerta Castillo, en el que también decenas de personas hacen cola a diario para provisionarse de agua de calidad. La versión barata, pero más esforzada, de comprar agua embotellada en el supermercado.
En este VÍDEO se condensa toda la información de dónde procede y cómo se trata el agua que bebemos a diario en León capital: