Los jóvenes que han estado en León desde el pasado día 12 asistiendo a las jornadas en la diócesis previas a la Jornada Mundial de la Juventud se han despedido esta mañana de León para poner rumbo a Madrid, donde hasta el día 21 de agosto se celebra el encuentro católico. El obispo de León, Julián Lopez, ha oficiado hoy la misa de despedida a los 1.300 jóvenes de 29 países que han participado en el encuentro.
Julián López ha estado acompañado durante la eucaristía por varios obispos colombianos, alemanes y franceses, así como por sacerdotes de varias de las nacionalidades que han permanecido en León durante estas jornadas previas a la visita del Papa Benedicto XVI en Madrid.
Bajo un intenso calor, y con el apoyo de la Policía Local y de voluntarios de Protección Civil, los jóvenes parten esta tarde hacia la capital de España con un “buen recuerdo” de la “hospitalidad de los leoneses”, una ciudad “a la que es preciso regresar”.
Asimismo, ha señalado que la experiencia ha sido “inolvidable”, a pesar de que aún queda por celebrarse el encuentro con el Santo Padre en Madrid, a donde estos jóvenes parte con la “expectativa” de poder convivir con todos los peregrinos del resto del mundo para “rezar por solucionar los problemas del mundo”, ha comentado.