La matriculación de turismos cae un 7,25% hasta las 3.327 en el primer semestre en León

La matriculación de turismos disminuyó un 9,4 por ciento en Castilla y León hasta alcanzarse las 17.679 entre enero y junio. Un porcentaje que es casi el doble de la caída de ventas en España, donde acumulan un descenso del 5,7 por ciento en el primer semestre del año, según los datos de la Asociación nacional de Fabricantes (Anfac), Faconauto y Ganvam. En el sexto mes del año, se consolidó la debilidad de las ventas de turismos con una caída del 9,3 por ciento con respecto al mismo periodo de 2018 y 3.180 unidades en Castilla y León.

Por provincias, las matriculaciones en el mes de junio descendieron de forma generalizada, salvo en la provincia de Segovia, donde crecieron un 6,09 por ciento hasta las 209. En el resto de la Comunidad, el mayor descenso se dio en Zamora, con un 27,5 por ciento (158 matriculaciones), seguida de Soria, con un 18,6 por ciento (105); seguida de Palencia, con un 16,7 por ciento (189); Salamanca, en un 14,7 por ciento (388); y Burgos, un 11,3 por ciento (509). en Ávila cayó un 8,9 por ciento (213); un 6,4 en Valladolid (759) y un 1,8 por ciento en León (650 matriculaciones).

En el primer semestre del año, el descenso en las matriculaciones sí fue generalizado en todas las provincias de Castilla y León, con especial incidencia en Burgos, donde se redujo un 14,9 por ciento hasta las 2.950 matriculacinoes), un dato muy parecido al registrado en Soria, con un descenso del 14,5 por ciento hasta las 645 matriculaciones. En Salamanca descendieron un 13,3 por ciento (2.048 matriculaciones); un 10,5 por ciento en Palencia, hasta las 1.064; un nueve por ciento en Zamora (1.005); o un 7,25 en León (3.327). Las caídas más ligeras del primer semestre del año en Castilla y León se dieron en Valladolid, con un descenso del 6,6 por ciento (4.355); del cinco por ciento en Segovia (1.140) y del 4,2 por ciento en Ávila (1.145).

En cuanto al tipo de combustible, las matriculaciones de turismos de gasolina en Castilla y León aumentaron un uno por ciento entre enero y junio frente a la abrupta caída del 33,4 por ciento de los diésel, frente al 29,3 por ciento de descenso a nivel nacional. En cuanto al resto de combustibles, subieron un 33,8 por ciento hasta las 2.018 unidades.

Anfac apuntó que las ventas de vehículos encadenan ya tres trimestres de caídas, con lo que se puede hablar de “crisis” en la automoción, cuando no hay ningún indicador económico que sustente este descenso más allá de la incertidumbre de los consumidores. Sin embargo, Mario Armero aseguró que esta tendencia es reversible. “Tenemos una salida. Tenemos que

trabajar en positivo con todos los agentes sociales, con un plan de achatarramiento, coordinación entre las leyes de cambio climático e impulso a la compra de los vehículos alternativos, en línea con la política marcada por la ministra Reyes Maroto“.

Automatriculaciones

La vicepresidenta ejecutiva de Faconauto, Marta Blázquez, afirmó que en los dos últimos días del mes se ha vuelto a acumular el grueso de las matriculaciones, en concreto unos 35.000 vehículos, muchas de ellas automatriculaciones de concesionarios. “No se puede solucionar la caída del mercado, sobre todo de particulares, maquillando los datos con un aluvión de operaciones que hace el propio sector para frenar la caída”, expuso. De ahí, que reclamó la formación de un Gobierno estable, “cuantos antes”, para tomar la iniciativa, trabaje con el sector, y que lance medidas y mensajes que devuelvan la tranquilidad al comprador.

Ganvan consideró que los datos evidencian que el sector automoción atraviesa una situación delicada, fruto de la inestabilidad política y la incertidumbre que envuelve al consumidor. Noe en vano, recordó que el canal de empresa, que venía sosteniendo el mercado, registra ya cifras negativas, mientras que el canal particular presenta ya el décimo mes consecutivo a la baja, con previsión de que siga retrocediendo en los próximos meses si no se toman medidas urgentes y estructurales.