Un ranking suspende la actividad investigadora de la Universidad de León
La Universidad de León no sale bien parada del último ranking de la Fundación Conocimiento y Desarrollo, desvelado este lunes, y especialmente en materia de investigación y transferencia del conocimiento.
En Castilla y León sólo la Universidad de Salamanca (Usal) se acerca a las universidades españolas con mayor rendimiento, según el Ranking elaborado por la Fundación Conocimiento y Desarrollo (CYD) a partir del análisis de una treintena de parámetros y con calificaciones de alto, intermedio y reducido rendimiento. Pues bien, Salamanca tiene calificación de alto rendimiento en once variables, mientras que Burgos tiene seis y León y Valladolid, sólo dos.
Según el citado Ranking, de las 60 universidades analizadas sólo dos (Autónoma de Barcelona y Pompeu Fabra) tienen alto rendimiento en más de 15 variables, en concreto, en 21 y 18 de los 31 evaluados. Mientras, hay un grupo de 17 universidades que tiene entre once y 15 indicadores en alto rendimiento, entre ellas Salamanca; otro grupo entre seis y diez (entre ellas Burgos), mientras que 25 universidades españolas sólo cuentan con entre uno y cinco (entre ellas León y Valladolid).
Además la Universidad de León obtiene seis calificaciones de 'bajo rendimiento' en seis de los 31 aspectos analizados, sobre todo en materia de investigación y transferencia del conocimiento a la sociedad. Así se valora negativamente el impacto normalizado de sus publicaciones, las publicaciones altamente citadas, en PDI funcionario sin tramos, en patentes con empresa y en patentes concedidas por PDI. Los únicos aspectos positivos en los que la ULE destaca son los académicos 'tasa de graduación de máster' y 'graduación normativa' también de máster.
Castilla y León en el Ranking CyD
En concreto, en las universidades públicas de la Comunidad, Salamanca tiene buenas calificaciones en aspectos como la atracción nacional de alumnos, la tasa de graduación, las publicaciones interdisciplinarias, el PDI funcionario, los ingresos por licencias o las patentes concedidas o las publicaciones citadas en patentes, así como la movilidad de estudiantes o las tesis doctorales internacionales.
Mientras, Burgos saca buena nota en la graduación de sus alumnos, las publicaciones interdisciplinares, la producción artística, los post-doctorados o los ingresos regionales. Por su parte, León sólo obtiene la calificación de alto rendimiento en su tasa de graduación y la graduación normativa; y Valladolid en la atracción nacional.
Entre los puntos de bajo rendimiento, Burgos lo tiene en hasta 18 variables entre las que se encuentran, por ejemplo, los fondos externos de investigación, el PDI funcionario, las 'spin-offs', las publicaciones con empresas o los fondos privados, así como en las publicaciones citadas en patentes, las titulaciones ofrecidas en un idioma extranjero o la movilidad de estudiantes.
Por su parte, Salamanca tiene siete variables con esta consideración, entre las que se encuentran el impacto de sus publicaciones, las patentes concedidas por PDI o las solicitudes de patentes con empresas privadas o también en el análisis de las titulaciones en un idioma extranjero, los ingresos o las publicaciones regionales.
Aspecto en el que también falla Valladolid, que también añade entre las que le sitúan con bajo rendimiento el personal internacional, las publicaciones con empresas o las publicaciones interdisciplinarias, mientras que León suspende en publicaciones con empresas, patentes concedidas o impacto de sus publicaciones
No obstante, las universidades de la Comunidad tienen variables en el punto intermedio publicaciones internacionales, en las que todas, menos León coinciden en situarse en un punto intermedio en publicaciones internacionales.
El Ranking CYD, mediante el cálculo de una serie de indicadores por institución y por ámbito de conocimiento, permite comparar la situación de las universidades y de sus ámbitos de conocimiento para una serie de dimensiones: enseñanza y aprendizaje, investigación, transferencia de conocimiento, orientación internacional y contribución al desarrollo regional. Los indicadores se basan, en general, en datos que cubren varios años de referencia, obteniendo así indicadores más fiables y estables en el tiempo. El Ranking CYD se construye con indicadores relativos, no absolutos, lo que permite hacer un análisis comparativo de la eficiencia de las universidades.
Cobertura territorial
En la segunda edición del Ranking CYD han participado 60 universidades, lo que significa el 72 por ciento de las universidades españolas, 15 más que en la primera edición. Las 60 universidades españolas participantes están presentes en la práctica totalidad de las comunidades autónomas españolas, de ellas 42 son públicas, 18 privadas y tres son universidades a distancia (una pública y dos privadas).
En esta segunda edición también ha aumentado la participación de las universidades en los rankings de ámbito: en la primera edición el ámbito en el que participaron un mayor número de universidades fue el de empresariales (27 universidades); en la segunda edición, en cambio, han participado 38 universidades en informática, 23 en psicología y otras 23 en medicina.
Valoración y conclusiones
El Ranking CYD es una herramienta única para comparar la calidad de la enseñanza y aprendizaje así como para detectar los puntos fuertes y débiles de cada universidad: permite identificar las universidades más eficientes y aquellas que tienen un mayor potencial de mejora.
De este modo el Ranking CYD muestra que no hay una única dimensión de excelencia universitaria sino tantas como criterios utilizados y que el concepto de “mejor universidad” depende de lo que se está buscando. Como muestra de ello, en el Ranking CYD 2015 no hay ninguna universidad que sea “buena en todo”. Solo hay dos universidades con más de 15 indicadores de alto rendimiento y 22 con diez o más indicadores de estas características; asimismo no hay ninguna universidad que no tenga como mínimo dos indicadores en el grupo de alto rendimiento.
Es una herramienta que permite ofrecer a los nuevos estudiantes información más detallada sobre los resultados obtenidos por las universidades y sus ámbitos de conocimiento; y ofrece a los responsables universitarios e institucionales un instrumento para evaluar el rendimiento de la universidad y de sus respectivos ámbitos de conocimiento. Se trata, en cualquier caso, de una herramienta en constante evolución, incorporando nuevas universidades y nuevos ámbitos de conocimiento, y mejorando la definición del sistema de indicadores. Tarea en la que ha sido fundamental la colaboración de las propias universidades, de los estudiantes y de los responsables institucionales de educación y universidades del gobierno español y autonómico.
