Ansiada para muchos e inoportuna para otros, después de semanas de cielos despejados, la lluvia ha hecho acto de presencia este lunes obligando a cancelar la procesión de La Pasión, la primera suspendida este Semana Santa.
Miles de personas han esperado esperanzadas a las puertas de la iglesia de Santa Nonia, punto de partida de esta procesión organizada por las tres cofradías más antiguas de la ciudad, la cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad, Dulce Nombre o 'los papones de Jesús' y la Real Cofradía del Santísismo Sacramento de Minerva y vera Cruz.
La Virgen de Angustias, la Piedad de Minerva y el Nazareno del Dulce Nombre de Jesús, que tendrían que haber recorrido el paseo de San Francisco, Zapaterías y M. D Berrueta hasta llegar a la Catedral para regresar de nuevo a Santa Nonia por la Calle Ancha y Santo Domingo, se han quedado este lunes a resguardo de la lluvia, que ha comenzado a caer pasadas las 19.00 horas.
A las 20.00 horas, momento en el que tenían que salir los pasos, los cofrades se han reunido en el interior de la iglesia de Santa Nonia para tomar una decisión y a los 20 minutos han comunicado a la multitud lo ya esperado, ya que la lluvia no ha cesado en ningún momento.
El año pasado la lluvia obligó a cancelar numerosas procesiones, entre ellas una de las aclamadas, el Encuentro, que comienza la madrugada del Viernes Santo.
La misma decisión ha tomado la la Hermandad de Santa Marta y de la Sagrada Cena que también ha decidio a última hora cancelar la procesión del Rosario de la Pasión y limitarlo a un breve acto en San Marcelo. El Rosario de la Pasión, que tendría que haber salido a las 20.45 horas de la Plaza de San Marcelo, ha rescatado tallas de gran valor de antiguas iglesias de la provincia.