UPL cierra el año homenajeando al escritor salmantino José Sánchez Rojas, firme defensor de la regionalidad leonesa
La UPL homenajea al escritor salmantino José Sánchez Rojas en el último día del año 2025, coincidiendo con el aniversario del fallecimiento del intelectual de Alba de Tormes “y en el año en que se cierra el 140 aniversario de su nacimiento”. Desde Unión del Pueblo Leonés han querido así “rendir un homenaje a este ilustre escritor albense, mediante la publicación de un hilo sobre su vida y algunas de sus citas en las redes sociales de la formación leonesista”.
“Y es que, cabe destacar que Sánchez Rojas, jurista de formación pero afamado como escritor, fue una de las figuras contemporáneas más relevantes en la defensa de la regionalidad leonesa, habiéndose formado en la Universidad de Salamanca, donde conoció a Miguel de Unamuno, con quien entabló una gran amistad hasta el final de su vida”, explica el partido leonesista en una nota de prensa que se reproduce a continuación.
En esta época, la realización de los Juegos Florales de Salamanca, al iniciarse el siglo XX, marcó la ruptura con la estigmatización negativa de las señas identitarias salmantinas y leonesas, dándose un resurgimiento del estudio de lo leonés. Así, Unamuno empezó a recopilar vocabulario del leonés conservado en la provincia, comenzando a interesarse por la propia identidad regional leonesa, apuntando en 1920 en Andanzas y visiones españolas esta sentencia: “Esta ciudad y región en que vivo, Salamanca, perteneció al Reino de León, y leonesas son las particularidades de su habla popular”.
En la misma línea, Unamuno llegó a afirmar también que “castellanos les llaman los demás a los hijos de esta tierra salmantina en que vivo, y eso que ni por geografía histórica ni por la lengua les compete en rigor técnico ese apelativo. Esto fue, cuando aún la unidad española no había fraguado políticamente, Reino de León”.
De este modo, en este ambiente de resurgimiento identitario leonés en Salamanca, en el que también participaron figuras como Luis Maldonado, Federico de Onís, José Lamano y Beneite o Luis Getino, entre otros, el albense José Sánchez Rojas acabó destacando en sus escritos por su férrea defensa de la regionalidad leonesa, amenazada por la corriente pancastellanista surgida en los círculos burgueses y culturales de Valladolid.
Las diferencias entre León y Castilla
En esta coyuntura, Sánchez Rojas apuntaba en 1919 a las “diferencias, más reales que aparentes, que separan los dos viejos reinos de León y Castilla”, afirmando asimismo que “Salamanca, León y Zamora participan, en su espíritu y en sus piedras, de la gracia gallega, de la sutileza astur, de la mansedumbre lusa y de la sequedad de la meseta. Estos cuatro factores integran el sentido leonés dentro de la historia nacional”.
Del mismo modo, al escribir sobre la Catedral Vieja de Salamanca, Sánchez Rojas señalaba: “Estas piedras nos hablan de las turbulencias de la Edad Media, del gracioso balbuceo del romance, de la formación lenta, segura, del espíritu leonés.” No obstante, este ilustre escritor natural de Alba de Tormes lamentaba que “Salamanca, lentamente, por incuria, por dejadez, va encerrando sus recuerdos, haciéndose avara de ellos, ignorando acaso que los tiene.”
Previamente, en 1914, Sánchez Rojas ya afirmaba que “el espíritu leonés es una fusión de los elementos étnicos que revuelven su periferia: Portugal, Galicia, Asturias y Extremadura”, apuntando en su artículo ‘Zamora, entraña de León’ en 1927 que “León es, ante todo y sobre todo, Zamora”, señalando asimismo: “He tenido en Zamora la sensación de lo que era el Reino de León, de lo que todavía es y de las diferencias que le separan de la región castellana. León no es una mera nomenclatura geográfica. León es un pueblo intermedio entre astur, gallego, extremeño y castellano”.
Por otro lado, dado su espíritu crítico, durante la Dictadura de Primo de Rivera, Sánchez Rojas fue ‘desterrado’ de su entorno a Huesca, siendo privado de la plaza de cronista de la Diputación de Salamanca a la que aspiraba y que finalmente ocupó Luis Getino. A pesar de sus diferencias ideológicas, Getino coincidía con Rojas en ensalzar lo leonés, describiendo en 1927 en ‘Anales salmantinos’ a Salamanca como “el florón más preciado de la Región Leonesa” y “la capital espiritual de la Región Leonesa desde los tiempos de Alfonso IX”.
Por su parte, Sánchez Rojas afirmaba en La casa salmantina (1917) que “Salamanca no es Castilla: es León. Y León tiene la blandura de Galicia, la zorrería lusitana y la sequedad, ya un poco apagada, del suelo de Castilla. Y León en lo urbano produce al salmantino y en el campo al charro.”
Tras el fin de la Dictadura de Primo de Rivera, Sánchez Rojas apuntó que sin la ayuda de amigos “hubiera perecido, sencillamente, de hambre. Tengo el orgullo de decir que he llevado los tacones rotos durante los seis años y pico que ha durado la Dictadura”. Tras esta, retomó una importante actividad, encontrándose en su apogeo en 1931, cuando se organizó en Salamanca un homenaje de desagravio a su figura, al que iba a asistir Unamuno.
Sin embargo, horas antes del homenaje, José Sánchez Rojas fallecía en el Hotel Términus de Salamanca, el 31 de diciembre de 1931. El fallecimiento de Sánchez Rojas fue un duro golpe para la cultura salmantina, que perdía a una de sus mejores plumas. Para despedirle, toda la élite cultural e intelectual salmantina acudió a su funeral, entre ellos su amigo Miguel de Unamuno, siendo numerosas las personas que se acercaron a su querida Alba de Tormes a mostrarle sus respetos ante su capilla ardiente.
“Con el fallecimiento de Don José Sánchez Rojas, cuando contaba apenas 46 años, Alba de Tormes, la provincia de Salamanca y la Región Leonesa perdían a uno de sus hijos más ilustres y firmes defensores. Luchador y crítico con las injusticias, Sánchez Rojas se demostró un verdadero enamorado de su Alba de Tormes natal, de Salamanca, la Región Leonesa y España”, termina su nota de prensa sobre este homenaje la Unión del Pueblo Leonés.
