Una de las macroplantas solares que la empresa Naturgy impulsa al norte del alfoz de León capital, en concreto la llamada Pradera, en los municipios de de Cuadros, Carrocera y Sariegos, trae además un proyecto aledaño que ha soliviantado a no pocos vecinos de la zona: la construcción de una gran rotonda en la carretera CL-623, a la altura del santuario de Camposagrado.
Se trata de una infraestructura que la compañía proyecta y defiende porque la considera esencial para dar acceso de tráfico rodado, durante la construcción y también después, a la planta fotovoltaica que en más de 170 hectáreas de terreno prevé instalar prácticamente 300.000 paneles fotovoltaicos para producir una potencia de 159 megavatios, datos que constan en los trámites ya pasados, como la evaluación de impacto ambiental favorable y el visto bueno administrativo del Ministerio.
El proyecto aledaño de la glorieta se recoge exactamente para el punto kilométrico 19,300 de la carretera de propiedad autonómica, punto elegido estratégicamente porque pretende dar acceso amplio al camino rural por el que se iría su propia macroplanta solar, pero ejecutando también un acceso más directo al santuario de Samposagrado y otro al actual helipuerto que utiliza la Consejería de Medio Ambiente para la operatividad de un helicóptero de las brigadas antiincendios en época estival. El presupuesto que consigna la empresa sería de 367.045 euros, según consta en la documentación.
El tiempo se acaba, ya que el período de exposición pública de este diseño de glorieta se publicó en el Boletín Oficial de Castilla y León (BOCyL) el 3 de diciembre, en plenas fechas navideñas, y el último día es este miércoles 31 de enero.
Hasta esa fecha, incluida, todavía se pueden presentar alegaciones al mismo, y una asociación contraria a esta obra, Luna Verde, ha impulsado una campaña para que se presenten el mayor número de objeciones posible, tanto particulares como de colectivos. Por eso, hay creado incluso una instancia tipo (disponible aquí) para presentar ante los Ayuntamientos de Carrocera y Rioseco, para que tengan en cuenta una oposición lo m,áslasiva posible.
Entre las muchas razones que esgrimen, destacan las del valor patrimonial y cultural de la ermita, un monumento del siglo VIII erigido sobre una antigua ermita y con gran arraigo tanto histórico como etnográfico, por las muchas fiestas tradicionales que allí tienen lugar.
También es Cañada Real Leonesa
Otro de los motivos es que “ahora el promotor pide las autorizaciones de uso excepcional y las licencias urbanísticas” para un “acceso que es nuevo y que no ha formado parte de la tramitación seguida por el proyecto hasta la fecha”, es decir, ni fue informado favorablemente por la DIA, ni aprobado por el Ministerio en la autorización del proyecto en febrero de 2023. Por eso creen que “no cabe autorizar a efectos urbanísticos un elemento que no consta en los proyectos aprobados hasta la fecha y que es esencial para la viabilidad” de la planta.
Por otro lado, el propio documento oficial de Naturgy admite que, aunque creen que no se debería someter a evaluación de impacto ambiental propia, la carretera CL-623 en sí es una vía pecuaria, en particular la Cañada Real Leonesa Occidental, “por lo que para realizar las obras proyectadas será necesario solicitar las pertinentes autorizaciones a Consejería de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León”, reza textualmente, aunque ambas consejerías llevan tiempo separadas.