Doy por cierto que la cuestión numérica presupuestaria la hacen técnicos a sueldo, cuadrando los oportunos asentamiento emanados de los profesores economistas, también en nómina, quienes, sabiendo los intereses partidistas del Grupo que manda, marcan directrices, los elaboran. Luego la salsa viene de mano de los políticos ejercientes que la incorporan a conveniencia para que empiece a llegar a los administrados el mensaje que al gerifalte le interesa.
Encajaremos como no menos cierto, que la oposición, los partidos ejercientes en la autonomía que nos amarra a los leoneses, tienen sus profesores y profesionales para el estudio del reparto y dedicación dineraria autonómica. Claro está, contemplado desde el posicionamiento ideológico que marcan los procederes políticos, de distribución y acople de los dominantes PP y PSOE, con sus discrepancias, pero siempre al alimón para perpetuar el amarre leonés.
Se nota que voy caminando por lo elemental, no puedo otra cosa, y además tirando de memoria y raciocinio para lo ya experimentado. Y como se podrá seguir observando camino sobre lo prometido en voz y letra por él, aludo al gerifalte, para el presente que nos ocupa. No invento nada, reflexiono.
Me gustaría conocer si el movimiento político leonesista ejerciente en lo autonómico, UPL, en este caso, dispone de personas y medios suficientes para, no sólo el estudio oportuno de cifras datos y destinos del que Mañueco presenta, sino una elaboración paralela, al menos en las grandes parcelas, con otros intereses, otras cifras, no discriminatorias, tal como en la faceta socioeconómica de IAL (Iniciativa Autonómica Leonesa), valga como ejemplo, se explica de modo general, cual si de comunidad paralela se tratara.
Luego entramos en juego la ciudadanía, casi como pueblo, los leoneses, personalmente “demasiado entremetidos”, como señalaba siempre Victoriano Crémer, significando así nuestro carácter, no propiamente introspectivo, más bien silente y acomodaticio. Personalmente yo, en otra medida, nivel y distancia, añado lo del “ser leonés”, que a fuer de considerarlo en cada cual inamovible, por interiorizado, en lo autonómico nos está aportando un estatus de dejación altamente perjudicial al no “saber hacerlo valer”
“Castilla y León hacia el futuro”
Tal cosa, arranca a decir Mañueco, cual mortificador eslogan, para anunciar que tiene listo el anteproyecto de Presupuestos de la Comunidad de Castilla y León para 2025. Ya le han hecho la labor “los suyos”, y “los nuestros” a su lado político asumirán con pasividad redomada lo que proponga.
Pide diálogo y entendimiento entre las fuerzas políticas, para que le sean aprobados no sé hasta cuándo y en qué está dispuesto a transigir y negociar, incluso con Vox, o especialmente con ellos, para sacarlos adelante. Y sigue una larga retahíla de halagos, o promesas de diálogos con el sector agrario, los empresarios, los trabajadores (con sus fuerzas sindicales).
Cita con decisión a las Universidades, seguro que pretenderá vendernos los Grados que ha repartido, y hemos de asumir, sin pelea, como dádiva. Diálogo con los ayuntamientos –¿Díganos cuántos y de qué nivel?– u con las diputaciones, no sé si otras, pero al menos la nuestra debería tener toda clase de prevenciones, y presentar un estudio serio de lo que se nos escamotea una y otra vez.
La oposición PSOE, discrepará como siempre, parece de rigor este posicionamiento, mas, para nada se van a acordar de los leoneses. No sé si nuestro regidor legionense le soplará algo al oído de Tudanca (·Tú a Valladolid, y yo a León“…, si es que sigue en la brecha socialista) y todo respecto a la definición territorial, dos regiones, y la recuperación socioeconómica que nunca debimos perder. De manera que esperanzas pocas.
Habla Mañueco, esbozando su plan presupuestario, de la Educación, de la Sanidad, de la Vivienda, una clara venta del anteproyecto, tan favorable en todo que asusta. Un crecimiento de la producción industrial en la Comunidad, apabullante, sin especificar dónde y cómo, naturalmente. De modo que toca no creerle nada, o casi nada de lo que dice proforma o a modo de salvas reales.
Se le llena la boca hablando de una Comunidad que promueve el bienestar social. Energía verde para todos los polígonos, y para los que se abandonan insidiosamente en beneficio de otros, como el de Torneros. ¿Qué pasa con él?
Llega a la innovación y sitúa a la Comunidad “entre las cinco con mayor esfuerzo tecnológico”. Esto es tan contestable, que espero a alguien que se lo demande respecto a León. Si algún polígono como el de Villadangos, lleva buenos visos no es por su empuje, otros particulares lo han conseguido; ellos, el ente autonómico, son comparsas aprovechados. ¡Y ya les vale!. Pues tan sólo el posicionamiento político para el avance , el mando y poder, les ha dado cancha.
Cifras y cifras, no veo reparto claro en cuanto a provincialización, detalle éste que debiera cumplirse con especial delicadeza y atención cuidada para lo regional leonés, maltratado de siempre.
De modo que de medallas nada. ¡Vamos a seguir en el engaño!