Nieves González Barrio nació en 1884 en Riotinto, Huelva. Su infancia transcurrió en Vegacervera, pequeño pueblo de León, la referencia familiar. Falleció en Madrid el 24 de agosto de 1961. Se trasladaron sus restos al panteón familiar, en Vegacervera.
Su madre, Bernarda, era maestra; su padre, Marcelo, tenía un comercio modesto. Era la mayor de nueve hermanos. En palabras de González Barrio: “He tenido la gran fortuna de nacer pobre”.
Esta situación condicionó los primeros años de su infancia y adolescencia con la discriminación cultural y laboral de la mujer de entonces. Tuvo que ayudar en algunas tareas escolares de su madre, también en las domésticas y en las del pequeño comercio. Realizó estudios de Enseñanza Secundaria en Oviedo (1904-1905) y Palencia (1905-1907), donde completó el grado de Bachiller con calificación de sobresaliente y premio extraordinario en la sección de Ciencias. Hizo el primer curso de dos del grado superior de Magisterio en Oviedo, si bien lo que ella quería era ser médico.
Fue pionera en los viajes al extranjero, en la enseñanza, en la divulgación, en el laboratorio, fundó la pediatría y de organizar el servicio de enfermeras visitadoras y niñeras.
Vida académica y primeros años profesionales
El 8 de marzo de 1910, se publicó la Real Orden de acceso libre de la mujer a estudios superiores, ese mismo año se matriculó en la Universidad de Salamanca. En 1911 consiguió una beca para estudiar como alumna interna. Obtuvo un brillante expediente académico, con predominio de menciones de honor, sobresalientes y premios.
Compartió con su hermano Salvador los estudios en Palencia y Salamanca. Compaginó sus estudios con los de Químicas, Inglés y Alemán en el Instituto General y Técnico de Salamanca. Consiguió el Título en Medicina en la Universidad de Salamanca con examen el 12 de junio de 1914, a la edad de 30 años.
Una vez finalizada la carrera de medicina, se trasladó a Madrid, donde se introdujo rápidamente en el ambiente universitario, científico, cultural e institucional. Es de las primeras en residir en la Escuela de Señoritas.Tiene relaciones con el Instituto Internacional de Señoritas, de origen norteamericano y también con el Lyceum Club femenino de Francia.
Infatigable labor docente e investigadora en Madrid
Desplegó una infatigable labor docente en tanto que completaba su formación académica. Enseñó física, química y fisiología en 1916-1918 en el Instituto Internacional de Señoritas.
En 1914 fue nombrada ayudante del laboratorio de Gustavo Pittaluga Fattorini (1876-1956) en la Facultad de Medicina de Madrid: en 1915 era auxiliar honoraria de la cátedra de Pittaluga, de Parasitología y Medicina Tropical. En 1915 Nieves Glez, aprobó los cursos de doctorado, y presentó la tesis doctoral, con sobresaliente, sobre: 'Algunas observaciones de anatomía patológica del Kala-Azar infantil'.
Colaboró en 1917-1918 en la Sección de Ciencias Naturales, Fisiología, Higiene y Agricultura del Instituto Escuela. Siguió su actividad formativa en diversas áreas de Ciencias, y en Magisterio secundario.
Viajes al extranjero: conocimiento de idiomas
Recibió cursos de alemán en la Escuela Central de Idiomas, cuando ya hablaba perfectamente inglés y francés. La Junta de Ampliación de Estudios (JAE) desde su creación comenzó a organizar becas y pensiones para estancias formativas en el extranjero para profesores y alumnos.
Doña Nieves González Barrio, de conocida personalidad y gran determinación, fue médica pionera en los viajes formativos en el extranjero; ya tenía sus intereses puestos en la Medicina de Laboratorio, comenzó a perfilarse además hacia la Pediatría, y emprenderá su entrada en este campo. De hecho, inmediatamente antes de ir a Norteamérica, en 1921, la pediatra había acudido “varios meses” a París, visitando el Instituto Pasteur, los hospitales y asilos de niños y otras obras de protección a la infancia pues en Paris, en ese año, Adolphe Pinard, había inaugurado la Escuela de Puericultura de la Facultad de Medicina, siendo uno de sus fines formar enfermeras visitadoras.
En 1921, tras tres intentos, la JAE le concedió una beca para viajar a Norteamérica y estudiar la poliomielitis con Noguchi; recibió después una beca “para residir en el College of Saint Theresa de Winona, centro católico, y para la Mayo Foundation, Rochester”, ambos en Minnesota. A ella le interesaba la pediatría, pero no le otorgaron beca alguna, que les concedieron a hombres.
Al no poder trabajar con problemas relacionados con la infancia, decidió solicitar, sin autorización de la JAE, una estancia en el Babies Hospital de Nueva York, se lo concedieron a regañadientes y por influencias de Suñer. Esto le permitió conocer el funcionamiento de las enfermeras visitadoras en Boston, Baltimore, Newbedford, Washington y Filadelfia.
Igualmente, fue esencial su colaboración, tanto a nivel de escribir libros como de laboratorio, con José García del Diestro que fue cofundador, en 1913, de la Sociedad de Pediatría de Madrid y codirector de la revista Archivos Españoles de Pediatría.
Entre la medicina de laboratorio, la medicina social y la pediatría-puericultura.
Nieves González Barrio fue una mujer pionera en Pediatría-Puericultura en España, en Medicina de Laboratorio, en la cultura de viajes de estudios, en educación y también en reivindicar una formación reglada para la profesión de enfermería, sobre todo en Salud Pública. Su colaboración con Enrique Suñer Ordóñez, catedrático de enfermedades de la infancia, fue fundamental para ella, pues la apoyó decididamente, habiendo sido nombrada, en 1922 auxiliar honoraria por el profesor Suñer, sin retribución, encargada del Laboratorio de Enfermedades de Infancia de San Carlos, en la cátedra de Pediatría. En ese cargo estuvo nueve años. Por iniciativa del catedrático se tomó la decisión de crear en Madrid la Escuela Nacional de Puericultura ( ENP) adscrita al Consejo Superior de la Infancia. Los cursos se pusieron en marcha em 1926, pero antes, en 1925 se nombró profesora de este centro a doña Nieves, con retribución, encargada del laboratorio y de organizar el servicio de enfermeras visitadoras y niñeras, por su experiencia en EE. UU.
La ENP, durante muchos años (antes y después de la guerra civil) fue esencial en la investigación y en formación de especialistas en Pediatría y otro personal sanitario, como, médicos, maestras, odontólogos, otorrinolaringólogos, visitadoras, niñeras, matronas y alumnos de Medicina.
La vida profesional de Nieves González, en su relación con la docencia y formación de médicos puericultores y enfermería, se vio truncada por los vaivenes de la política española y de la Sanidad en esta época de los años treinta del siglo XX. Alguna autora ha citado que podría ser estimada como “una madre de la pediatría española” y “madrina de la enfermería”. También en ocasiones tuvo que ayudar económicamente a su familia y hacerse cargo de ella en los tiempos difíciles de la posguerra. Su figura, su determinación personal, su legado, su gran capacidad polifacética y su labor profesional, docente y divulgativa como mujer científica merecen ser tenidas en consideración.
Suñer fue suspendido en 1931 de empleo en la cátedra y cesado en la dirección de la ENP, lo que conllevó “el de doña Nieves y otros responsables de las secciones”. Reclamaron judicialmente la decisión y oficialmente fueron repuestos en 1935. El cese de Nieves González Barrio no parece tener otra causa que los vaivenes políticos. No se le conoce actividad política explícita ninguna. Participó en una asociación católica, la Asociación de la Escuela del Hogar de Segovia, y en su publicación, Nuestros Hogares, fue vicepresidenta primera en 1935 y dimitió en enero de 1936. Tras su cese al inicio de la República, ya no tuvo actividad de responsabilidad de laboratorio o investigación científica.
Nieves González Barrio perteneció a diversas redes, asociaciones e instituciones médicas y educadoras y de promoción de la mujer, así como de asociaciones científicas y colaborativas, como: Residencia de Señoritas ; Lyceum Club femenino, dirigido por María de Maeztu; Liga Española de Higiene Escolar, fundada y dirigida por Amador Pereira; Junta de Damas de Protección Médica, presidida por la doctora Aleixandre (institución para destinar fondos para acciones sociales a médicos colegiados y su entorno; Colegiada en el Colegio Oficial de Médicos de Madrid.
Premios e injusto olvido
Los de estudios de pregrado y los de organización y reglamentación del Cuerpo e Institución de enfermeras visitadoras. Premio Roel. Sociedad Española de Higiene. Madrid.
No hay galardones honoríficos oficiales, a pesar de su labor, sin duda por ser mujer. En la revista Blanco y Negro en 1935, escribe: “¿Mi opinión sobre el feminismo? Creo que la mujer tiene tanto derecho como el hombre a ser feliz y la felicidad puede encontrarse en el trabajo y la salud, que viene a ser su consecuencia”.
Solo tiene su nombre en una calle en su pueblo, Vegacervera.
De una y otra cuestiones, deberíamos en León hacerle justicia.
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