El disputado voto leonesista
Para cualquier observador sería un hecho indiscutible que el sentimiento leonesista trasciende la identidad con los diferentes partidos. Reducirlo (como he visto en algún medio) a UPL y al alcalde de León es de una ceguera preocupante. Las mociones demandando una autonomía leonesa en los diferentes Ayuntamientos han tenido el apoyo de concejales del PP, del PSOE, de VOX, de Podemos, de Ciudadanos, de IU, de UPL y de concejales que se presentaban como independientes. Eso son hechos objetivos y constatables.
Por eso cuando se apela a que los leonesistas voten “al PP o al PSOE” no sabemos si apelan a que los concejales, afiliados y simpatizantes no se les desmanden y les sigan apoyando, o buscan quitar votos a UPL.
Pero claro es una apelación que es carente de argumentos. Es un vótenme que necesito sus votos. Como mucho se dice “vótenme para que no gane el contrario”. Diría que en el fondo se deja ver un cierto desprecio por los propios votantes. Se alude “a lo que yo o mi partido necesita” y no a lo que la ciudadanía pueda necesitar.
Cuando la confianza en el medio político esta por los suelos, el voto se fundamenta más en lo que la ciudadanía considera que cada partido ha hecho en los años anteriores y no tanto en lo que dicen que van a hacer. En ese sentido: ¿Qué han hecho esos partidos para merecer el voto leonesista? Que cada lector responda a esa pregunta, pero sinceramente creo que la respuesta sería bastante unánime y contundente. Tampoco en otros ámbitos territoriales creo que se incentive la identificación con los distintos partidos. Sería mucho más fácil decir “lo que no nos gusta” de cada uno de ellos, que identificar “lo que nos gusta”.
Por eso creo que sería más factible el trasvase de votantes leonesistas que han optado en otras elecciones por otros partidos hacia UPL que desde votantes de UPL a PP o PSOE.
¿PP y PSOE benefician a a León?
Para un leonesista es inadmisible que el actual presidente de la Junta reduzca León como una provincia más de las que se incluyen en este marco autonómico. Eso es un atentado grave no sólo a la historia de León, también a la historia de España.
Pero claro en cuestiones que dependen del Gobierno Central tampoco nos luce demasiado el pelo. Torneros, Teatro Emperador, Azucarera de La Bañeza…
Uno tiende a pensar que entre el PP y el PSOE la razón la suele tener aquel partido que no ocupa el poder. El PP es muy crítico con el gobierno de Sánchez pero se olvida lo que hace la Junta que ellos gobiernan. Lo mismo hace el PSOE muy crítico con Mañueco pero apenas referencias a lo que se está haciendo desde el Gobierno Central.
Hoy parece que el debate ha dejado de estar en el campo de las ideologías y los proyectos para centrarse en los tribunales. Diría que hace falta un saneamiento social y que eso sólo vendrá de la mano de partidos que no se hayan envueltos en todas esas acusaciones. El riesgo es que el hartazgo lleve a impulsar opciones radicales (algo que viene sucediendo a nivel mundial). Tampoco eso parece que vaya a solucionar nada.
UPL, por lo menos hasta el momento, puede presumir de una hoja de servicios limpia. Con sus aciertos y errores no ha estado en ningún momento vinculada a casos de corrupción (lo que en el panorama actual no es poco). No es una opción radical y asume con claridad los principios democráticos. Por todo ello la puedo ver más capacitada para recoger ese voto leonesista que en otras ocasiones ha optado por otros partidos.
Leonesismo transversal
Desde el convencimiento de que el leonesismo va mucho más lejos que el voto a un partido, damos la bienvenida a que Podemos cree una secretaría para la Autonomía Leonesa. Es verdad que cuando estos pronunciamientos se producen en momentos cercanos a una convocatoria electoral la ciudanía tiende a desconfiar. También lo es que este pronunciamiento no es del todo nuevo ya que anteriormente hubo círculos que ya habían defendido ese pronunciamiento. En demasiadas ocasiones tanto en este partido como en el PP o en el PSOE ha habido líderes que han sustentado su ascenso personal en sus partidos en detrimento de su condición de representantes de aquellos que los han votado. Es un poco la línea de Martin Villa cuando decía que la opinión de los leoneses es respetable pero no servía para alterar el mapa autonómico que él había diseñado.
El movimiento se demuestra andando y hay muchos partidos que tienen mucho que andar para actuar como representantes de aquellos que les han votado y para captar o retener el voto leonesista.
David Díez Llamas es sociólogo