León se prepara para convertirse en el año 2026 en un referente internacional para “hacer justicia” pero “sin beatificar a nadie del pasado”, y promover la revisión histórica de Urraca I de León, la primera mujer que reinó en la Europa Occidental cristiana en solitario y por derecho propio. Coincidiendo con el 900.º aniversario de su fallecimiento, en el en el año 1126, que se cumplirá en marzo del próximo año, la ciudad acogerá un amplio programa de actividades concebido para recuperar, actualizar y proyectar la figura de una monarca clave del medievo, aunque durante siglos injustamente relegada a un segundo plano en los relatos históricos.
El núcleo de esta conmemoración será la exposición ‘Reina ella: Urraca I de León’, que se celebrará en el Museo de León entre el 6 de marzo, fecha de su muerte, y el 7 de junio de 2026. La muestra promete ser extraordinaria y ha sido presentada hoy: reunirá alrededor de 60 piezas vinculadas al reinado de Urraca I, actualmente dispersas por colecciones públicas y privadas de todo el mundo, y permitirá ofrecer una visión inédita del alcance político, artístico y simbólico de su soberanía.
El proyecto expositivo está comisariado por los historiadores del arte Gerardo Boto Varela y José Alberto Moráis Morán, especialistas en el periodo medieval y en el patrimonio del Reino de León. Han anunciado ya que entre los préstamos confirmados figuran obras procedentes del Metropolitan Museum of Art de Nueva York, el Art Institute of Chicago, el Victoria and Albert Museum de Londres o el Louvre de París, junto a fondos del Museo del Prado, el Museo Arqueológico Nacional y la Biblioteca Nacional, hasta sumar una veintena de museos e instituciones participantes.
Un león del Louvre, de vuelta (temporal)
Marfiles leoneses del siglo XII, piezas de orfebrería y objetos litúrgicos permitirán contextualizar un reinado que consolidó la unidad del reino y desplegó un destacado patronazgo cultural en diálogo con la Europa medieval. Entre ellos, muy simbólico, el 'regreso' a León, aunque temporal, de la escultura del león expoliado de la basílica románica y que ha descubierto en el Louvre de París el historiador del Arte Francisco Prado-Vilar, forzando al museo francés a identificar ese origen.
Como explicaron Boto Varela y Moráis Morán, junto al alcalde de León, José Antonio Diez, y el consejero de Presidencia de la Junta de Castilla y León, Luis Miguel González Gago, a esta gran cita expositiva se sumará en mayo un congreso internacional que reunirá en León a expertos nacionales e internacionales para analizar la figura de Urraca I –titular de la Corona Leonesa que englobaba el reino principal de León y, los dependientes y por importancia protocolaria en orden Galicia y Castilla, ya que el segundo se creó a la vez que el legionense y el castellano siglo y medio después, y la propia monarca tendía a no citarlo en sus diplomas– desde una perspectiva histórica y artística. El encuentro abordará su reinado, los contextos geopolíticos en los que ejerció su soberanía y el patrimonio monumental generado bajo su mandato, situando al Reino de León en los grandes procesos políticos y culturales del siglo XII europeo.
Urraca Alfonsez (hija de Alfonso VI y nieta de Sancha I de León, que fue la primera heredera del Regnum Legionensis, pero que 70 años antes tuvo que ejercer el gobierno bajo el mando de su consorte Fernando I) reunió como Urraca I de León de forma ejecutiva todo el poder civil y militar dos décadas antes que lo empezaran a intentar las Lobas de Inglaterra, que son popularmente conocidas como las primeras en todo el mundo de forma errónea como ocurre con la Carta Magna de Juan Sin Tierra; aunque León se adelantara varios años a las circunstancias inglesas.
La programación se completará con diversos actos conmemorativos a lo largo del año, entre ellos un “gran concierto” de músicas medievales el 17 de abril en la Catedral de León o el responso en el Panteón de los Reyes de la Basílica de San Isidoro, estrechamente vinculado a la memoria de la monarquía leonesa, con un primer homenaje previsto para el próximo 2 de enero, que tiene lugar todos los años pero esta vez la situará como especial protagonista.
El dinero y los argumentos identitarios
El alcalde socialista de León y el consejero de la Presidencia de la Junta de Castilla y León escenificaron un acuerdo por el cual la nueva y polémica Fundación para la Promoción de los Valores y la Identidad de Castilla y León aportará 300.000 euros para estos fastos, que en total, según Diez, tendrán un presupuesto total de cerca de 800.000 euros para todo el año, contando con otras contribuciones como la Cámara de Comercio de León o Caja Rural, entre otras.
El consejero matizó a la noticia de la aprobación de la partida la semana pasada, que se refirió en realidad a 500.000 euros, que si bien una mayoría del dinero sufragará parte de los eventos, otros 100.000 se destinarán al noveno centenario de la coronación de Alfonso VII, hijo de la reina Urraca I de León, Galicia y Castilla; y 100.000 euros más para posibles contingencias y necesidades sobrevenidas. González Gago también defendió que la Junta resalte estos fastos como relevantes para “identidad histórica de Castilla y León”, a pesar de que como tal la autonomía con ese nombre apenas tenga 43 años: “Cualquier referencia dentro de la actual Comunidad de Castilla y León no deja de ser una referencia histórica y nos sirve como referente para la sociedad actual y para nuestros jóvenes”, afirmó.