La Reforma Laboral abarata el despido
El Gobierno ha aprobado este viernes una reforma laboral con la que quieren atajar el nivel de paro histórico alcanzado, con 5,3 millones de desempleados. Lo han hecho a través de decreto ley, por lo que entrará en vigor a partir de este sábado y después tendrá que ser convalidada por el Parlamento.
Entre los cambios de este texto, la indemnización en caso de despido improcedente baja de 45 días por año trabajado que se extendía hasta los 42 meses y se queda en una indemnización de 33 días por año trabajado con un máximo de 24 meses. Esta novedad no implica cambios para los derechos ya adquiridos, por lo que solo se aplicará, sin carácter retroactivo, a los nuevos contratos.
Si el despido es procedente por causas objetivas, la indemnización será de 20 días y se podrá aplicar cuando la empresa registre una pérdida “de los ingresos o ventas” durante tres trimestres consecutivos.
El decreto ley pone en marcha un nuevo contrato indefinido para las Pymes de hasta 50 empleados. En él se establece una rebaja en los costes laborales de 3.000 euros al contratar al primer empleado menor de 30 años que esté en paro. Ese trabajador seguirá cobrando el 25% del paro al que tenía derecho mientras, el empleador, podrá dejar de pagar el 50% de lo que le correspondía de la prestación a la que tenía derecho el empleado durante un máximo de un año. Precisamente un año es el nuevo periodo de prueba que contempla este contrato.
Otra de las novedades, es que se incluye una ayuda de 4.000 euros para quienes den trabajo a los parados de larga duración y se regula que las agencias de empresas de trabajo temporal puedan funcionar como agencias de colocación.
Se hace hincapié también en la formación de los empleados, igual que se hace en Alemania, por lo que el empleado tendrá derecho a 20 horas de formación pagadas por la empresa. La edad máxima para optar a un contrato de aprendizaje se eleva a los 25 años.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado que la reforma “fomenta la contratación”, “potencia los contratos indefinidos”, busca “flexibilizar” las condiciones laborales de las empresas para evitar el despido y “lucha” contra la economía sumergida. Por su parte, la ministra de Trabajo, Fátima Báñez, ha manifestado que la reforma se ha diseñado “pensando en los ciudadanos que están en el paro y sobre todo en los jóvenes, que ahora no tienen oportunidades”.
