El Reale Ademar llegaba a Cuenca directamente desde tierras nórdicas después de jugar el partido correspondiente a la Champions League contra el AG Kobenhavn, muchos días fuera de casa que preocupaban al técnico Isidoro Martínez, que además contaba con las bajas de Rafa Baena, Ángel Montoro y Denis Krivoshlykov.
No iba a ser un partido fácil, aunque las muchas bajas de los conquenses, sobre todo las de sus cubanos Guillermo Corzo y Rafael Da Costa, invitaban a ver un equipo con problemas en el ataque posicional y muy cansado en la segunda parte. Momentos antes de comenzar el encuentro se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento del padre del entrenador local Zupo Equisoain.
En la primera lo que se vio es un equipo local muy metido en el partido, con las cosas claras y una defensa de 4:2 que hizo muchísimo daño al ataque leonés. Mientras que el Ademar salió poco metido en el partido y con un bajísimo acierto en sus lanzamientos, lo que supuso llegar al descanso con 13-13. La segunda mitad no fue muy diferente hasta que las fuerzas se les acabaron a los locales que perdieron el partido en los últimos 15 minutos, aunque disputaron los jugadores de Zupo con superioridad los últimos tres minutos de partido. Al final el 24-27 fue justo y los dos puntos suponen poner pie y medio en la XXII Copa Asobal que se disputará en León.
Los primeros minutos, como suele ser habitual, el equipo local llevaba la iniciativa, sobre todo por las ganas de ganar a un grande del balonmano nacional. Rápidamente el Ciudad Encantada se puso 3-1 a pesar de sufrir una exclusión de Mendoza y dos lanzamientos leoneses de Stranovsky y Antonio García a la madera.
El Cuenca rozaba siempre el pasivo en todos sus ataques pero poco a poco iba ampliando la ventaja frente a un Reale Ademar poco acertado de cara a portería y muy fallón tanto en defensa como en ataque. Los locales a los 10 minutos y medio se colocaban 5-2 tras un gol de Sabonis e Isidoro Martínez se veía obligado a pedir tiempo muerto para pagar la sangría.
Consiguió cortar la racha el equipo leonés pero pronto volvieron a la diferencia de tres los locales (7-4), merced a la exclusión de Álvaro Ferrer y los múltiples errores en ataque.
De la mano de Dipanda y Stranovsky el Reale Ademar consiguió un 2-6 de parcial que le puso por delante con el 7-8 a los 18 minutos de partido. El francés estaba en un nivel muy alto y llevaba la manija en defensa con robos de balón e incluso en ataque con un importante tres de tres en lanzamientos para alguien que llegó a la plantilla ademarista con la vitola exclusiva de defensor.
Las pérdidas en ataque provocaban continuos contragolpes de los conquenses que les permitía estar más que dentro del partido. Además, la defensa 4:2 planteada por el técnico local Zupo Equisoain hizo mucho daño al ataque ademarista. Y la diferencia positiva para el Ciudad Encantada volvía al marcador, a los 23 minutos 11-9 tras un gol de Inestrosa.
Kappelin pasó unos minutos como un muro y detuvo varios lanzamientos a Álvaro Cabanas incidiendo aún más en la mente de los leoneses que veían que el partido se les ponía mucho más cuesta arriba de lo que pudiera parecer al principio, sobre todo teniendo en cuenta las bajas locales de Dacosta y Corzo. Venio Losert no se quedaba atrás y era la pesadilla de Paván que concluyó la primera parte con un desastroso dos de siete.
La poca efectividad de los dos equipos provocó que se llegara al descanso con un cortito 13-13 en el marcador gracias a un gol de Carlos Ruesga con el reloj prácticamente a cero. El jugador local Inestrosa realizó unos 30 primeros minutos sensacionales al conseguir seis goles (6/8), además de que su portero Richard Kappelin firmó un gran 38% de efectividad.
Por parte de los leoneses destacaron en la primera parte el francés Adrien Dipanda con tres goles y su mayor intensidad en defensa, así como Venio Losert con paradas de mérito en momentos importantes.
Segundos 30 minutos
La falta de acierto de los dos equipos continuó en la segunda parte y tan solo dos goles para cada equipo se vieron en los primeros ocho minutos, 15-15.Un parcial de 0-2 para los ademaristas de la mano de Dipanda y Carou tras asistencia de Cutura colocaba el 15-17, que a pesar de la insistencia del Ciudad Encantada conseguía mantener 17-19 a los 10 minutos.
Los aficionados locales se quejaban continuamente de las decisiones arbitrales y no les faltaba razón en algunas de ellas, pudo tener algo de ayuda el equipo de Isidoro Martínez, pero nada que supusiera el desequilibrio del encuentro.
La calidad de los leoneses empezaba ha hacerse notar, así como el cansancio de los locales y el Reale Ademar conseguía poner tres arriba (18-21) a los 16 minutos de la segunda mitad. Zupo Equisoain no se lo pensaba dos veces y pedía tiempo muerto para evitar que el equipo de Isidoro Martínez se fuera.
Funcionó solo a medias y León mantenía la ventaja pese a sufrir un 2-0 por medio de los locales, colocándose 21-25 (parcial de 3-4 tras el tiempo muerto) y aportando tranquilidad a un choque que se había puesto muy difícil.
Los últimos minutos el Reale Ademar supo administrar la ventaja conseguida y aunque pasó momentos de tensión (minuto 27 y 22-25) y dificultades (un cambio ataque-defensa desastroso que provocó una exclusión de dos minutos de Antonio García) consiguió llevarse el partido por 24-27 en unos dos últimos minutos caóticos a pesar de la diferencia en el marcador.
Ademar gracias a unos minutos de inspiración y pundonor consiguió llevarse un encuentro que se le puso muy difícil tras una primera parte poco efectiva de cara a puerta. Los aficionados al término del partido se quejaron insistentemente a los colegiados por su actuación durante el choque y lanzaron al pivote del Ademar Juan Andreu una botella y una bocina, además de escupirle, así como a compañeros de medios de comunicación leoneses. Una cancha muy difícil en la que conseguir los dos puntos suena a 'triunfo' no solo por el partido.
El mejor del partido fue el francés Adrien Dipanda que consiguió un magnífico seis de seis en lanzamientos y aportó la intensidad defensiva necesaria en momentos muy complicados. También el joven Álvaro Cabanas ralló a buen nivel al conseguir cuatro goles (4/9). La portería no consiguió un porcentaje espectacular (33% en conjunto entre Losert y Álamo, aunque este último solo participó en dos lanzamientos de siete metros) pero estuvo cuando se la necesitó.
Por parte de los locales destacaron Inestrosa con ocho tantos (solo dos en la segunda parte) y Sabonis con cuatro goles (4/5). Mientras que Kappelin llegó hasta el 36% de efectividad en la portería, buenos números para el guardameta del Ciudad Encantada de Cuenca. La parte negativa la puso Paván que aunque consiguió cinco goles falló siete lanzamientos (al descanso iba 2/7, por lo que en la segunda firmó un más correcto 3/5).
Sietes iniciales
BM Ciudad Encantada: Richard Kappelin (portero), Aurelijus Sabonis, David Mendoza, Luís Paván, Juan José Fernández, Ionut Stefan Georgescu y Ángel Pérez de Inestrosa.
Reale Ademar: Venio Loser (portero), Álvaro Cabanas, Álvaro Ferrer, Antonio García, Adrien Dipanda, Gonzalo Carou y Martin Stranovsky.
Árbitros: Ion Bustamante López y Javier Álvarez Mata.
Estadio: Pabellón Municipal El Salga