Claudia Arias, la leonesa que triunfa en el mundo el deporte de patín en línea

El maillot con el que la leonesa y lacianiega Claudia Arias obtuvo el pasado verano en Villablino los títulos de campeona de Europa individual y subcampeona por equipos con la Selección Española de patín en línea ya lucen en las escaleras de acceso a la primera planta en el edificio del Ayuntamiento de Villablino, después de que hace días ella hiciese entrega del mismo al alcalde, Mario Rivas.

A esta joven le gusta compartir esos logros con sus convecinos y amigos, por eso ha decidido ceder el maillot con el que obtuvo los últimos títulos al Ayuntamiento de Villablino. Ropa deportiva que guarda como un tesoro, lo mismo que cualquier deportista, que este tipo de prendas de primeras veces o de títulos suelen convertirlas casi en fetiche.

Su desprendimiento le ha llevado a en un sencillo acto, al recreo del instituto para no perder tiempo, hacerle entrega al Ayuntamiento en la persona del alcalde de la prenda ya enmarcada, para que la institución municipal decida colocarla en un lugar visible.

Claudia Arias, es una joven lacianiega que cumple a la perfección con sus obligaciones de estudiante. Y en su tiempo libre, además de ayudar a sus padres Nuria y Jose en el negocio familiar, practica el esquí desde hace ya 13 años, y empezó con la modalidad de patín en línea hace algo más de seis años.

Lo mismo que lo del estudio y lo de los patines no se le da del todo mal, tampoco lo del esquí. Y como prueba de esta afirmación ella puede poner sobre la mesa los títulos que ha ido obteniendo en estas modalidades deportivas con el Club Deportivo Leitariegos.

Sobre los estudios, cursa en este año primero de Bachillerato y su expediente académico es de una media de notable alto, acercándose a sobresaliente. Actitud exigente para sus pretensiones académicas futuras, que confiesa pasan por estudiar medicina, algo que “me gustaría y lo deseo”.

Lo del expediente deportivo en la modalidad de patín en línea aún mejora el académico. Sus últimos logros del pasado año así lo atestiguan: campeona de Europa individual y subcampeona por equipos con la Selección Española, varios años campeona de la Copa de España y de Castilla y León, cuatro años seguidos como integrante de la Selección Española.

La verdad es que algunos de los datos de su palmarés se le escapan, no los tiene en un listado para enseñarlos, habla de memoria y quedan algunos en el olvido. Algo que no quiere que le pase con una de sus aficiones favoritas, viajar, lo cual le gusta disfrutar distendida, para conocer sitios, sin otra cosa que hacer“.

Cuando viaja a competir, “también, pero es distinto”. Por eso lo disfruta y reconoce que de todos los sitios que ha visitado compitiendo, Varsovia, “es el que más me ha impactado”, aunque del resto no se queja y tiene muy buenos recuerdos de Desmon, Tuttlingen, Bad-Kolzting en Alemania, Metzibori y Jirkov en la República Checa, o Bramberg en Austria, “son todos lugares preciosos”. Por España, también ha completado un amplio circuito donde su modalidad deportiva tiene aceptación.

No es oro todo lo que reluce, como reza el dicho, pues en algo de esto han tenido parte de culpa sus padres, y en muchas de las competiciones a las que ha acudido ellos sufragaron sus gastos. Otra cosa es cuando ya va con la selección a competiciones oficiales.

Estos son algunos de los motivos que la impulsan a asegurar que “seguiré compitiendo mientras pueda y mis otras obligaciones no me lo impidan”. No se fija fecha de caducidad. Y es normal, porque con una juventud tan arroladora, apenas 16 años, esta joven del nuevo milenio se desenvuelve con el smartphone con una agilidad tal que a los de el siglo pasado nos hace sentir analfabetos digitales.

Así es Claudia, con unas ambiciones y unas condiciones de vida similares a las de cualquier joven de su edad, pero con unos objetivos claros en su vida, que la obligan a que se desarrolle con algunos condicionantes. Por ejemplo de amores, para los que “no tengo tiempo de momento”, no le han llegado. Los amigos si, “tengo un buen grupo de amigos, pero es difícil compaginar todo, una cosa que me gusta hacer con ellos es ir a conciertos”. Y aún saca tiempo para ayudar a sus padres en el negocio familiar, cuando las circunstancias lo requieren.

No quiere dejar la conversación sin admitir que su palmarés de éxitos “sería imposible sin la ayuda de mis compañeros, entrenadores y el Club Deportivo Leitariegos”. “No te olvides de mencionar mi agradecimiento”, concluye. Y no lo hacemos.