Valero, en Salamanca, nombrado 'Municipio Leonés' del mes de agosto
La web sobre el turismo de la Región Leonesa www.turismoreinodeleon.com destaca el patrimonio y la naturaleza de la localidad salmantina de Valero como suficientes para que este pueblo sea destacado como 'Municipio Leonés de Agosto'.
Los impulsores de esta iniciativa, que se repite cada mes resaltando alguna localidad del Reino de León, es decir, de las actuales provincias de León, Zamora o Salamanca, ha querido este mes poner el acento en este municipio salmantino de la Sierra de Francia y en la subcomarca de Las Quilamas.
Su nombre podría provenir del nombre romano Valerio, que daría nombre al lugar en la época de dominación romana. Posteriormente, en época visigoda, la mítica batalla de Segoyuela, entre los musulmanes y el rey godo Rodrigo, habría tenido lugar en las cercanías del municipio, habiendo dado origen a la leyenda de la reina Quilama.
Ya en la Edad Media, Valero fue repoblado por los reyes leoneses, dando lugar a la localidad actual, que quedó integrada en el Reino de León, dentro de la jurisdicción salmantina del cuarto de Peña del Rey. La historiografía reciente apunta la posibilidad de que la construcción del Castillo Viejo de Valero se enmarcase dentro de estos procesos repobladores de la monarquía leonesa.
Entre sus principales valores patrimoniales y destaca la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Su fábrica actual data del siglo XV, aunque posee importantes elementos del XVI y XVII, como el artesonado mudéjar del presbiterio o el retablo mayor, que tiene como titular a la Asunción de la Virgen. Destaca asimismo el Cristo de la Agonía o de los Difuntos, talla gótica de influencia bizantina y que constituye la pieza más antigua que alberga el templo. Asimismo hay que destacar la imagen de Nuestra Señora del Rosario, imagen datada en 1595 y que se sitúa en un retablo medieval de la época de repoblación.
También destaca igualmente la piscina natural, construida en 1.985 en el cauce del río Quilamas, es conocida también como “Charco el Pozo”. Se asienta en una antigua presa realizada para la fábrica de luz que se construyó en 1920.
El castillo viejo se sitúa en lo alto de la sierra a casi 1.400 metros de altitud, a 2 kilómetros de Valero en línea recta. César Morán situaba su construcción en la Edad del Bronce, aunque autores más recientes, como Santonja o Cerrillo, sitúan en la Alta Edad Media su construcción.
