Triana pide entre lágrimas su libertad y se declara inocente
La Audiencia Provincial de León ha acogido este lunes un nuevo capítulo en el caso del crimen de Isabel Carrasco. Cuando están a punto de cumplirse los dos años de prisión provisional de Montserrat González, autora confesa de la muerte de la que fuera presidenta de la Diputación de León, y de su hija Triana Martínez, se ha celebrado una nueva vista para decidir sobre su puesta en libertad provisional a espera de sentencia firme. Ambas ya han sido condenadas en primera instancia por un delito de asesinato en concurso con atentado y otro de tenencia ilícita de armas por los que están condenadas a 22 años de prisión, la madre, y a 20 la hija. No obstante, la sentencia está recurrida.
El Ministerio Fiscal ha explicado que no cabe posibilidad de poner en libertad a ninguna de las dos condenadas y ha insistido en la necesidad de prorrogar la prisión provisional para ambas porque existe una sentencia condenatoria, aunque no sea firme, y se cumplen todos los requisitos procesales para mantenerlas en prisión, entre los que ha destacado la gravedad de los delitos por los que han sido condenadas y las penas de cárcel a las que están condenadas lo que evidencia un importantísimo riesgo de fuga. La prórroga de la prisión provisional es, para la Fiscalía, “una medida necesaria y proporcionada”.
Así, ha recordado que la prisión provisional para cualquier reo se fija en la mitad de la pena a la que hayan sido condenados, por lo que en este caso Montserrat podría estar en prisión preventiva 11 años, hasta mayo de 2022; y Triana 10 años, hasta mayo de 2021. A esta tesis de la Fiscal se han sumado los abogados de las acusaciones particulares, Beatriz Llamas, en representación de Loreto, hija de la víctima; Carlos Rivera, en representación de la pareja de Isabel Carrasco, y también la representación del PP que se personó en la causa.
En cuanto a la defensa de madre e hija, que ha sido ejercida por Ángel Martínez García, en sustitución de José Ramón García, se ha opuesto a la puesta en libertad de Montserrat González, pero no de Triana Martínez. No obstante, ha precisado que se ha recurrido la sentencia condenatoria en relación a madre porque existen “graves errores en el jurado sobre la valoración de informes forenses” que, además, se realizaron en condiciones “poco idóneos”.
En lo que se refiere a Triana Martínez, su defensa ha asegurado que existen “graves contradicciones” y “un ilógico razonamiento” por parte del jurado y que el recurso presentado para que se la absuleva por considerarla autora de un delito de encubrimiento, que quedaría impune por tratarse de su madre, tiene muchas opciones de prosperar porque “tiene que ser absuelta”.
“Hay requisitos” y “un fin legítimo” para la libertad de Triana, ha asegurado Martínez García, que ha insistido en que “no existe riesgo de fuga” debido a la especial vinculación de Triana con su madre. Además, tampoco existe riesgo de destrucción de pruebas porque la instrucción finalizó y tampoco hay “reiteridad delictiva” ya que ella no fue la autora del asesinato ni tuvo participación en el crimen, que se produjo en “unas circunstancias especiales”.
El letrado de la defensa ha reiterado que la prisión provisional es una medida “excepcional” y ha instado al Tribunal a que no tenga miedo de poner en libertad a Triana, aunque se trate de un caso de gran transcendencia mediática y que tenga “la valentía” que tuvo en el caso de Raquel Gago para decretar la libertad provisional. “Que no ocurra como en otros casos, que se da una sentencia absolutoria y Triana tenga que pasar más tiempo en prisión de forma injustificada”.
Piden la libertad de Triana entre lágrimas
Madre e hija han pedido su libertad entre lágrimas. Ambas han seguido la vista desde la prisión de Villahierro, en Mansilla de las Mulas, donde cumplen condena, y han intervenido al final de la misma. Montserrat, a la que le costaba hablar por la emoción, ha pedido llorando “que den a mi hija la libertad”.
También con la voz entrecortada y ahogada por el llanto, Triana ha “rogado” que escuchen a su abogado sobre su petición de libertad porque ella “no se entera”. “Yo no sé cómo han podidio inventar tantas mentiras contra mí siendo inocente. Ya llevo dos años aquí y no entiendo nada”.
