Respuesta de la familia Correa sobre los escudos de Cembranos

Gerardo Diego Revuelta García, hijo de Maria Dolores García Correa

“Ante las informaciones aparecidas en el medio que usted dirige sobre el tema de los escudos de Cembranos, conteniendo alusiones directas de carácter ofensivo hacia nuestra familia, y acogiéndonos al derecho de rectificación y de protección del honor recogidos en la Ley Orgánica 2/1984, de 26 de marzo, reguladora del derecho de rectificación y en la Ley Orgánica 1/1982, de 5 de mayo, sobre protección civil del derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen, la familia García Correa desea manifestar:

Los escudos estaban situados en la fachada de la casa llamada Palacio de los Escobar situada al lado de la iglesia de Cembranos. Nuestra familia ha sido propietaria de esta casa y otros bienes en Cembranos desde el último tercio del siglo XIX. Al fallecimiento de Diego García y Lucía Correa, últimos habitantes de la casa, sus herederos pusimos a la venta la propiedad, reservándonos los escudos. Todo este patrimonio rústico y urbano era, evidentemente, de propiedad privada.

Años antes de la venta de la casa y terrenos, el alcalde de Chozas de Abajo, Roberto López Luna, derribó una tapia del corral de la casa y un edificio de dos plantas situado en dicho corral para abrir una calle (hoy calle Balanzategui) sin pedir autorización ni comunicarlo a la familia. Creemos que esto sí constituye “expolio patrimonial”. Desde entonces, la política del alcalde con la familia ha sido la de hechos consumados, arrogancia y negativa al diálogo.

Cuando se realizó la venta en 2004 los herederos excluímos los escudos, quedando así expresado en el contrato de compraventa. Inmediatamente la casa fue derruida por el comprador sin que éste pusiera a disposición nuestra los citados escudos. Los escudos desaparecieron y se tuvo que reclamar su devolución por acta notarial sin resultado. Ni la compradora ni el Ayuntamiento de Chozas de Abajo daban razón ni explicaciones. No sabemos porqué se derribó la casa por la noche, y quizás la oscuridad favoreció la desaparición de las dichosas piedras, pero está claro que el negocio estaba en una finca incluida en la venta de 65.000 m2 que el Ayuntamiento no declaró urbana hasta después de la venta, pese a haberlo hablado la familia con el alcalde varias veces antes de la venta.

En 2006 se inaugura una plaza en el antiguo solar de la casa palacio de los Escobar que incorpora un monumento con los escudos. Después de tres años de repetidos intentos de dialogar con el alcalde y al comprobar su actitud evasiva, arrogante y contraria al diálogo, en marzo de 2009 presentamos demanda ante el juzgado de 1ª Instancia nº 1 de León, fallando sentencia este juzgado dándonos la razón en marzo de 2011. Tras ser desestimados los sucesivos recursos del Ayuntamiento de Chozas, la sentencia se hace firme en 2012. La familia recupera lo que es suyo.

Ni la casa palacio ni los escudos disfrutaban de ninguna protección especial por parte de la Administración o Patrimonio, al no estar catalogados como bienes de interés cultural (BIC), a pesar de las solicitudes ante la Junta de Castilla y León en ese sentido. Si realmente el señor López Luna hubiera querido proteger el legado de la familia Escobar, habría empezado por conservar el Palacio, cuya rehabilitación hubiera sido de verdad algo positivo en ese sentido; y habría iniciado conversaciones con los propietarios. En lugar de eso, prefirió legarnos una plaza de ladrillo y cemento -modelo “pelotazo”- con el único interés de los escudos desaparecidos para nosotros y “recuperados” por el alcalde.

En las informaciones aparecidas en este medio el alcalde afirma que la junta vecinal nos ha declarado personas no gratas. Dichas afirmaciones sabemos que no son ciertas y legales al conocer que no ha sido convocada formalmente sesión extraordinaria de la Junta Vecinal, como así afirma el alcalde. También tenemos constancia de que ni siquiera han sido convocados en ningún momento los habitantes de Cembranos, por lo que pedimos al alcalde que rectifique y retire publicamente dichas afirmaciones, que falsean la verdad y el único valor que les damos es ser una opinión personal del alcalde hacia nuestra familia, otra maniobra para intentar lavar su imágen y escurrir el bulto una vez más. También nos gustaría saber qué significa, en el siglo XXI, dicho estatuto; en qué consiste, a qué hay que atenerse, consecuencias jurídico-administrativas, si incapacita para la inversión en la localidad, si se expide certificado, seguridad personal, etc. Ironías a parte, si es cierto que se ha celebrado dicha reunión con esa declaración, rogamos a la junta vecinal que la retire pues la consideramos fuera de lugar, teniendo en cuenta la realidad de los hechos y la amistad que nos une con Cembranos y su gente.

Lamentamos este desenlace que nunca hemos deseado y creemos que ha sido la actitud del alcalde, confundiendo al pueblo e involucrando a la junta vecinal en un despropósito inexplicable para nosotros, lo que ha hecho imposible que los escudos permanezcan en Cembranos. Somos conscientes que el alcalde no simpatiza con nuestra causa, por no haberse salido con la suya, por lo cual trata de confundir a los vecinos de Cembranos, gente de la cual guardamos muy gratos recuerdos , gente con la que a pesar del tiempo, seguimos teniendo muchísima relación y amistad, y gente que constantemente nos muestran sus simpatias hacia nuestra familia y a la que siempre agradeceremos el apoyo y simpatía mostrados“.

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