Una red de farmacias detectará potenciales errores de medicación en Castilla y León

DiCyt

Castilla y León dispondrá en 2014 de una red de farmacias centinela que se encargarán de detectar potenciales problemas con la medicación. Este conjunto de farmacias distribuidas por toda la comunidad adquirirán a partir del próximo año un papel de vigilancia. Su objetivo será detectar posibles errores que puedan incluir los prospectos, detectar indicaciones dificultosas de las dosis que puedan derivar en un mal consumo de los medicamentos y hallar errores en la forma de administración, incluidos tanto en prospectos como en cartonajes.

Además, estas farmacias centinela confirmarán desabastecimientos y detectarán dificultades que se les presentan a los pacientes en su relación con ciertos fármacos: por ejemplo, errores en la comprensión de la duración de un tratamiento o dificultad en la manipulación por parte del paciente de formas galénicas de uso complejo. También se buscará detectar confusiones entre medicamentos con similitudes fonéticas o caligráficas o de aspecto similar. Asimismo, las farmacias centinela de Castilla y León potenciarán las actividades de farmacovigilancia y comunicación de reacciones adversas a medicamentos.

Este nuevo programa autonómico impulsado desde el Consejo de Farmacéuticos de Castilla y León (Concyl) y presentado hoy en el VIII Congreso Farmacéutico de Castilla y León se pondrá en marcha a partir de 2014. Todas las farmacias que finalmente integren esta red trabajarán en estrecha colaboración con la Dirección General de Salud Pública y el Centro Autonómico de Farmacovigilancia.

Personalización del tratamiento de crónicos polimedicados y ancianos

Este programa no es el único proyecto del Concyl que ha visto la luz en esta segunda jornada de debates del VIII Congreso Farmacéutico de Castilla y León. Se ha presentado también un nuevo servicio que ofrecerán las oficinas de farmacia de la comunidad a partir del próximo año. El objetivo, prolongar la atención y el cuidado del paciente más allá de la dispensación. Para ello se va a poner en marcha el Sistema de Dosificación Personalizada (SDP) que facilitará la toma de medicación a muchos pacientes.

Esto significará que a partir de 2014 los farmacéuticos ofrecerán 'pastilleros' personalizados a sus pacientes crónicos polimedicados o a personas de edad avanzada que dispondrán así de las dosis exactas que deben tomar en cada momento del día.

El nuevo servicio tiene su razón de ser en el amplio envejecimiento de la población de Castilla y León y en los problemas que existen de cumplimiento de los tratamientos. En concreto, la comunidad cuenta con un 22% de población mayor de 65 años. De ellos, el 20% viven solos. La edad avanzada guarda además una relación directamente proporcional con la polimedicación y con los incumplimientos terapéuticos. De hecho, dicho incumplimiento puede cifrarse en un 40% en grupos terapéuticos tan importantes como antihipertensivos y antibióticos.

Participación en el cribado del cáncer de colon

Por otro lado, el Concyl ha puesto sobre la mesa un nuevo proyecto del que podrían formar parte activa las farmacias de Castilla y León. Se trata de participar en el Plan de Cribado del Cáncer de Colon que incluyó el Consejo Interterritorial de Salud en la cartera de servicios del Ministerio de Sanidad el pasado julio. A este respecto, los farmacéuticos de Castilla y León han decidido poner sus farmacias a disposición de este plan de cribado. La propuesta que los farmacéuticos hacen a Sanidad radica en que la población diana que se someterá a este cribado pueda retirar y entregar en cualquier farmacia de Castilla y León su kit (que es una prueba de detección de sangre oculta en heces) para proceder a su posterior análisis.

El cáncer colorrectal es la segunda causa de muerte por procesos oncológicos tanto en mujeres como en hombres. La evolución de la enfermedad hace posible detectarla en este cribado y actuar sobre ella. Si el resultado de la prueba es positivo, sería necesario realizar una posterior colonoscopia en Atención Especializada para diagnosticar la enfermedad.

La prueba de determinación de sangre oculta en heces no necesita restricción dietética ni supresión de ningún tratamiento farmacológico los días previos a la recogida de la muestra. La participación del farmacéutico en este plan sanitario sería clave a la hora de incentivar a la población diana, informarles y garantizar así su participación en el proceso, haciéndolo más accesible. De hecho, la incorporación de farmacéuticos en programas de este tipo en otras Comunidades ha incrementado la adherencia de los pacientes en más de un 40%.