Caja España-Duero analiza alternativas

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Milena Pasetti

En dos semanas, Caja España tendrá que definir su estrategia de futuro, con acuerdo del consejo de administración incluido. Es el plazo dispuesto por el Banco de España para que las entidades informen cómo conseguirán los fondos requeridos, que en el caso de la caja castellanoleonesa asciende a los 463 millones de euros.

Aunque en los últimos días en el seno de la caja se analizaba la integración con Mare Nostrum prácticamente como la única opción posible, el nuevo escenario dibujado por la publicación de las cifras generales del Banco de España podría cambiar el curso de las decisiones. Resulta que, por un lado, a la SIP conformada por Caixa Penedés, Sa Nostra, Cajamurcia y Caja Granada le faltan 637 millones de euros. Por otro, Ibercaja y Unicaja (las otras dos entidades con las que hubo conversaciones) no necesitan captar fondos porque ya cumplen con el 10% de core capital.

Y además, la opción de recurrir al FROB vuelve a considerarse como posible. Entre otras razones, porque captar capital privado no será sencillo en un contexto de mucha demanda, en el que ya se están anticipando bajas valoraciones para las cajas (incluso por debajo de su valor contable). Entrar al FROB otorga dos años más para negociar el ingreso de capital, y la opción de que el Banco de España participe en los consejos de administración ya no parece tan insensata.

Finalmente, las cajas pueden optar por salir a captar capital privado mediante la emisión de participaciones, o desprenderse de parte de sus activos industriales o inmobiliarios.

Caja España-Duero todavía no ha dado ningún indicio firme sobre cuál será el camino que elegirá. Tampoco se descarta que pueda utilizar un mix de acciones para conformar su estrategia.

Todas las expectativas están puestas en la convocatoria al Consejo de Administración, que tendría que producirse en los próximos días. Ayer, luego de la publicación del informe la caja emitió un comunicado en el que se limitó a decir que seguirá trabajando en las fórmulas “mas idóneas” sin que ello afecte a la actividad diaria de la entidad.

Una buena noticia

Más allá de la situación particular de Caja España-Duero, el informe del Banco Central contempla una necesidad total de capitalización de 15.152 millones de euros para 12 entidades (ocho cajas de ahorro, dos bancos españoles y dos filiales de bancos extranjeros)

“Es una cifra sorprendentemente baja, inferior incluso a los 20.000 millones que estimaba el propio Gobierno en el mes de enero. Eso significa que se reduce la necesidad de fondos públicos necesarios para el saneamiento del sistema financiero”, indicó ex decano del Colegio de Economistas de León, Roberto Escudero.

“Es una buena noticia, sobre todo en un contexto de bajas expectativas de crecimiento, alta morosidad”, indicó, al tiempo que remarcó que por lo general las previsiones del Banco de España poseen “una factura técnica impecable, porque tienen acceso a absolutamente toda la información de las entidades financieras”.

Finalmente, reiteró la sorpresa que causó que esta mañana la agencia de calificación Moodys bajara la nota a la deuda española, sin conocer el contenido de estas estimaciones publicadas por el Banco de España, que son las más bajas de todas las cifras anticipadas por los analistas.

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