La Guardia Civil ha investigado por espacio de casi dos horas, a partir de cerca de las dos de la tarde de hoy domingo, el aviso de bomba que se ha producido a primera hora de esta tarde desde una cabina telefónica al 112 de la Comunidad Valenciana, que a su vez alertó al 112 de Castilla y León, así como a la Guardia Civil. La llamada al parecer fue realizada desde Valencia, cerca de Gandía según fuentes de la investigación, y en ella un hombre alertaba de la existencia de un explosivo en una gasolinera de la autovía A-231 entre León y Burgos a la altura de la localidad de Sahagún. Se trata de la estación de servicio La Veguilla I, de Cepsa.
Según informaron a iLeon.com fuentes de la Guardia Civil, en cuanto se tuvo noticia del aviso se puso en marcha el habitual operativo para este tipo de casos, que se producen con cierta regularidad en la provincia. En primer lugar, se cortó el acceso a la gasolinera desde la propia autovía, pasándose después a una minuciosa inspeccion ocular de todo el lugar. Incluso llegó a participar en el rastro un perro preparado para la detección de explosivos. El resultado de todo ello fue negativo.
Sobre dos horas después de iniciarse los trabajos de rastreo, se decidió que se trataba de una falsa alarma, por lo que de nuevo se reabrió el acceso rodado a la estación de servicio, que recobró la normalidad en torno a las cinco de la tarde.