Trabadelo: un municipio solo 'popular'

César Sánchez / ICAL Francisco González, votante del PP y vecino de la localidad de San Fiz do Seo perteneciente a la localidad de Trabadelo (León), en el que todos sus concejales son del PP.

V. Silván / Ical

Trabadelo es un pequeño municipio del Bierzo, con apenas 412 habitantes y enclavado en el Camino de Santiago, donde cada día se ve el continuo trasiego de peregrinos, cuyas voces se mezclan de fondo con el gallego que familiarmente hablan sus vecinos. Pero otra de sus peculiaridades es que en este rincón berciano el PP gobierna sin oposición, tras arrasar las pasadas elecciones y conseguir los siete concejales que estaban en liza con el 87 por ciento de los votos -288 votos frente a los escasos 24 votos del MASS y los 18 del PSOE-.

Con ese abultado resultado renovaba la confianza de sus vecinos el alcalde del PP, Ricardo Fernández, que confía en repetirlo en la próxima cita, con el candidato de Coalición por el Bierzo, Carlos Gómez, y la cabeza de lista del PSOE, Melisa González, como rivales. Aunque “nunca llueve a gusto de todos” y “para algunos lo hará mejor que para otros”, según reconocen sus habitantes, la realidad es que la mayoría de los vecinos que “a cuentagotas” pasan por su calles, reconocen ser votantes de Fernández y afirman que lo volverán a hacer el 24 de mayo.

Ese es el caso de Lucía, que conversa con otra vecina a la puerta de casa. “Para mi toda persona que no se mete conmigo es buena y le seguiré votando”, asegura, aunque reconoce que el sentido de su voto no es el mismo cuando se trata de las elecciones generales porque “los de lejos a mi no me importan”. “Yo soy de aquí y llevo toda la vida viviendo en Trabadelo, le voté siempre y le voy a seguir votando”, apostilla.

Unos metros más adelante está Maruja, una gallega de 87 años y que lleva viviendo en este pueblo desde que se casó, que también valora como buena la gestión del PP. “Hay que votarle, es buena persona y me llevé siempre bien”, asegura esta anciana, para quien Fernández, “es muy formal y le cae muy bien”. Aún así, también ve con buenos ojos al candidato de Coalición por el Bierzo. “Carlos es muy buen rapaz, de aquí del pueblo y le tienen aprecio”, asegura Maruja, que estima que tal vez este año el PP si encuentre oposición y que, en ese caso, “conviene que no haya mayorías porque así se solucionan más cosas”.

El argumento de “buena persona” también sirve para justificar su voto al PP a la trabajadora del albergue municipal, Esperanza González. “Yo voto al alcalde, es muy conocido y es una persona que hace lo que puede y si no hace más es porque no le dan lo que él pide”, añade Esperanza, que destaca que Ricardo Rodríguez se preocupa mucho por los pueblos. Y es que en este municipio, el PP es candidatura única en seis de las ocho pedanías con la que cuenta Trabadelo.

“Si gana es por algo”

Pero no todos los habitantes hablan abiertamente de política, es un municipio pequeño y los que tienen negocio prefieren no pronunciarse ni en un sentido ni en otro. No es el caso de Remedios, que regenta el albergue parroquial de Trabadelo y que con claridad asegura su voto al candidato popular. “Yo estoy muy contenta con él, aunque imagino que entre otros vecinos no tendrá tanto éxito”, añade Remedios, ante la atenta mirada de su madre, que también deposita su voto a favor de Ricardo Fernández, conocido de la familia de toda la vida. “Para mi es muy buena persona, la conocemos de siempre y sus padres siempre se llevaron bien con nosotros. Si gana es por algo”, dice la madre.

Esa familiaridad también le garantiza el voto de otro vecino de una de las pedanías, San Fiz do Seo, que ese día se ha acercado hasta Trabadelo para acudir a consulta médica. “Desde que se puso yo siempre le he votado, somos conocidos de toda la vida, el es de un pueblo muy cerquita del mio y, como dice el refrán, más vale malo conocido que bueno por conocer”, explica Francisco González, que destaca que ha hecho “muchísimas cosas” por el municipio y sus pueblos. “Si no cambia, le voto como siempre”, recalca.

Este vecino puntualiza que en estas elecciones se vota a la persona y que no importan tanto las siglas bajo las que se presenta. “Se ve quien vale para esto y quien hace cosas”, insiste González, que reconoce también que en las elecciones generales ya cambia el voto porque “yo no soy fanático, me da igual ocho que ochenta y que gane el mejor”. “No entiendo mucho de política pero veo que a este paso habrá muchos más políticos que gente trabajando”, remató.

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