Los edificios institucionales de Villablino recuperan esplendor, y color, tras años de decadencia
El Ayuntamiento de Villablino ha conseguido mejorar y remozar, en estos últimos cuatro años, los tres principales edificios públicos de propiedad de la entidad municipal ubicados en Villablino, el Polideportivo cubierto, la Casa de la Cultura y la propia Casa Consistorial. Con una inversión algo superior a 1,7 millones de euros, procedentes en su mayoría de subvenciones del Gobierno central, la Junta de Castilla y León y fondos europeos. Con ellos se han renovado tras años de cierta decadencia, en los que la situación económica del consistorio lacianiego no posibilitó grandes inversiones en ellos.
Las obras comenzaron en 2021 con el proyecto denominado 'Plan de optimización y diversificación energética en edificaciones públicas municipales'. Fue el proyecto con mayor dotación económica 1.320.582 euros, aportados por el Instituto para la Transición Justa (990.466,50 euros) dependiente del MITECO y la Consejería de Economía y Hacienda (330.115,50 euros) de la Junta de Castilla y León.
Con estas obras, que se ejecutaron de 2021 a 2023, se procedió a la mejora de las carpinterías exteriores e iluminación en el Ayuntamiento (inaugurado en el año 1965), la Casa de Cultura (del año 1987) y el Polideportivo cubierto (que data del 1984), . Se realizaron renovación de la entrada, ventanas y huecos de las tres edificaciones, realizándose también mejoras en las cubiertas más deterioradas.
A finales de 2022 y principios de 2023, la Junta de Castilla y León invirtió 50.000 euros en la instalación de un ascensor en la Casa Consistorial aprovechando el hueco de las escaleras, para facilitar el acceso a personas con dificultades de movilidad, que solo disponían de una plataforma elevadora desde 1994, que nunca funcionó con normalidad. Lo que impedía por lo tanto el acceso a la primera y segunda plantas del edificio a esas personas, con sillas de ruedas o dificultades de movilidad.
En 2023, se acometió la reparación y mejora de la fachada de la Casa de la Cultura con una cofinanciación entre la Junta (117.309,50 euros) y el Ayuntamiento, aunque los carteles indicadores colocados en el exterior de las obras no recogen el importe de la misma.
El cambio de apariencia fue notable dándole al edificio una envoltura color crema, eliminando la pérgola de la terraza superior, y dejando atrás los colores amarillo y granate de la envoltura anterior. A la nueva apariencia general se añadió con posterioridad en el verano por parte del colectivo LacianArt, una mosca de hierro en homenaje a Eduardo Arroyo sobre la fachada principal, y en la fachada norte de la sala de exposiciones un colorido mural a ambos lados de la puerta con escenas de mujeres ataviadas con indumentaria tradicional interpretando música y pasos de danza.
El propio consistorio renovó con sus medios económicos el mobiliario del salón de plenos municipal. Y el ultimo gran paquete de obras se acometió esta primavera y verano para mejorar el entorno del Parque del Minero, entre el edificio consistorial y la Casa de la Cultura.
Cambio de luminarias, suelos y pisos de parte de las calles del parque y en la plaza de Luis Mateo, escaleras de acceso entre esta plaza y las inmediaciones del Ayuntamiento y las que desde la plaza comunican con la calle Serafín Morales, con una inversión de casi ochenta mil euros financiados por la Junta a través de los Fondos de Cooperación Local, con una inversión de 80.000 euros.
Lo último ha sido la mejora y pintura de las fachadas exteriores del Ayuntamiento, con la misma tonalidad que la inmediata Casa de la Cultura, dando una apariencia de unificación al entorno. Con algunas pequeñas dudas en la finalización puesto que inicialmente se pintó una leyenda sobre la parte más alta de la fachada norte principal, que rezaba 'Valle de Laciana' seguido de la imagen del logotipo municipal del urogallo de varios colores.
Finalmente se descartó esta leyenda repintando sobre ella y se pidió al colectivo de LacianArt pintar un gran mural sobre la fachada oeste del edificio, en el mayor espacio sin huecos de todo él. El encargo lo realizaron Miguel Ángel Uría y María del Roxio, pintando sobre la pared una pareja ataviada con trajes tradicionales acompañados de dos ejemplares de mastín leonés.
Las remodelaciones han finalizado tan solo hace unos días, a finales del mes de agosto, con la pintura y mejora de las fachadas del Ayuntamiento, con financiación por la Consejería de Presidencia con 80.767,50 euros.
Para completar la mejora solo queda pedirle, u obligar, a la compañía Telefónica, a que quite el cableado tendido sobre las fachadas. Que son reminiscencias antiguas de un pasado de 100 años, que concedió esos privilegios a la compañía telefónica de tender sus cables donde considerase oportuno permitiéndole ejercer de dominador de fachadas, edificaciones e instalación de postes. Algo hoy ya totalmente anacrónico e innecesario, para la buena gestión económica de la empresa, que declara abundantes beneficios en cada ejercicio económico.
