El vietnamita Lê Quang Liêm arrebata la corona del Magistral Ciudad de León a Anand
El Gran Maestro vietnamita Lê Quang Liêm se impuso este domingo en la final del XXXVIII Magistral Ciudad de León al pentacampeón mundial indio Viswanathan Anand por 3-1 y le arrebató la corona que conquistó en 2024.
Liêm, primer jugador de Vietnam que participaba en el torneo decano en España, se mostró siempre muy sólido, sabiendo aprovechar sus oportunidades con gran solvencia, para impedir al 'Rápido de Madrás' que engrandeciera aún más su leyenda en un torneo en el que ha conseguido diez victorias en las quince finales disputadas.
Antes de iniciarse la partida oficial se guardó un minuto de silencio en recuerdo del GM Zenón Franco, fallecido en 2024 y estrechamente vinculado al torneo desde sus inicios, y también hubo un recuerdo especial en memoria de Manuel García Cob, presidente de la Federación de Ajedrez de Castilla y León, recientemente fallecido.
En la primera partida de la final el GM vietnamita utilizó la misma defensa contra la Apertura Española con la que derrotó el sábado a Jaime Santos en el desempate de la semifinal ante un Anand que intentó ganar espacio en ambos flancos sin obtener nada tangible. Finalmente se conformó con el cambio de damas que condujo a un final en que las tablas no se podían evitar.
En la segunda partida llegó la primera victoria de la fase regular de todo el torneo, después de que en las ocho partidas de las dos semifinales acabaran en tablas, obligando al desempate en las partidas rápidas.
Lê Quang Liêm se adelantó en el marcador tras superar a Anand en una impecable partida posicional en la que empleó la Apertura Catalana, llamada así por haberse practicado por primera vez en el Torneo Internacional de Barcelona de 1929.
La tercera daba una nueva victoria al que fue campeón del mundo de partidas rápidas en 2013, lo que le dio matemáticamente el título a falta de la última partida, en la que solo le quedaba al indio la oportunidad de despedirse con un triunfo que endulzara su adiós a uno de sus torneos fetiche que, sin embargo, acabaron convirtiéndose en unas tablas sin demasiada historia.