Quiñones, ante la petición masiva de dimisión: “Mi responsabilidad es el trabajo, no el abandono ni la huida”

El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, respondió hoy rompiendo un silencio de 28 días en las Cortes de Castilla y León a las durísimas críticas de la oposición por su gestión al frente político del operativo de los incendios forestales que este verano han devastado amplias zonas sobre todo de la Región Leonesa, dentro de Castilla y León.

Quiñones aseguró que “mi responsabilidad es el trabajo, no el abandono ni la huida y señaló que su responsabilidad es afrontar las tareas de recuperación y restauración forestal de las zonas afectadas por los incendios. ”Hay mucho trabajo por delante en el que estaré al máximo“, zanjó, resaltando que la Junta ”ya está trabajando en los planes de restauración“.

El consejero puso en la sesión de control por delante “el sentimiento de consternación, de dolor y de frustración mío y de todo el equipo de la Consejería por las personas fallecidas en colegación de estos terribles incendios”. E insistiendo hasta la saciedad en que “las decenas de incendios que hubo estuvieron en muchas ocasiones fuera de la capacidad de extinción, de este operativo y de cualquier operativo: inextinguibles, inabordables, imposibles”. Por eso, sólo llegó a reconocer algunos “errores e insuficiencias” que “nos obliga a todos a trabajar en la forma de ser más eficaces”.

Esa fue su principal respuesta a una tromba de críticas, muy duras todas ellas, de todos los grupos de oposición, exigiéndole muchos de ellos que Suárez-Quiñones dimitiera o que Alfonso Fernánde Mañueco, le cese. Algo que el presidente de la Junta rechazó de plano con un rotundo “sí, le apoyo”.

“El Ventorro de Gijón”

La primera en intervenir fue la procuradora socialista leonesa Nuria Rubio, quien acusó al consejero de ser “responsable de que los incendios en León alcanzaran una magnitud devastadora” debido a su “incompetencia, negligencia y soberbia”. Denunció que hubo fuegos que permanecieron sin recursos durante días, como en Anllares, lo que permitió que las llamas se extendieran sin control. También criticó que, mientras se pedían más medios al Gobierno de España, brigadas y bomberos permanecían inactivos en Castilla y León, y señaló que en plena emergencia se “retiró un bulldozer de un incendio activo para montar un puesto de mando en un municipio gobernado por el PP con fines propagandísticos”.

La procuradora recriminó además al consejero no haber visitado las zonas arrasadas ni a los vecinos afectados, acusándole de esconderse “28 días en silencio”, escondiéndose, dijo, “de forma ruin y miserable” en “el Ventorro de Gijón”, en referencia a la polémica comida institucional en Asturias cuando los incendios ya causaban los primeros estragos y ante la que Quiñones contestó que “tenemos la mala costumbre de comer”. “Dimita ya, si le queda un mínimo de decencia”, sentenció Rubio.

Grandes cifras del desastre y el operativo

En todas sus réplicas, Suárez-Quiñones, con un guión perfectamente estructurado para no contestar directamente a lo que se le preguntaba sino para rebatir las principales críticas de las últimas semanas con todo tipo de datos, defendió que se desplegó “un operativo sin precedentes en España” con más de 1.500 profesionales, 92 medios aéreos, más de 60 autobombas y 57 bulldozers, además de la participación de la UME, bomberos urbanos, brigadas forestales y hasta medios europeos.

Para dar una visión de la magnitud total en agosto, señaló que en solo 23 días se produjeron 64 incendios en León y 348 en toda Castilla y León, con hasta 15 focos simultáneos en la provincia, y extremas circunstancias meteorológicas: ola de calor, vientos de hasta 90 kilómetros por hora y tormentas secas.

El consejero insistió también en la intencionalidad de muchos de los fuegos, recordando que este año se han registrado más de 840 incendios en la Comunidad, la mitad provocados. “Es su responsabilidad denunciarlo públicamente. Silenciarlo es no luchar contra ello”, reprochó a la oposición intentando centrar en la intencionalidad el foco.

Finalmente, Suárez-Quiñones habló de que “se revisará al alza” el operativo antiincendios de cara al futuro inmediato, apuntalando a lo defendido ya por Mañueco, y rechazó las acusaciones de abandono y electoralismo: “He estado en el centro de mando de León, trabajando con los técnicos y compartiendo con el delegado del Gobierno las estrategias. Su visión es simplista y electoralista. La verdad es mucho más compleja”.

UPL censura que la Junta hable de “generosidad y paciencia”

Por Unión del Pueblo Leonés (UPL), la procuradora y secretaria general, Alicia Gallego, recriminó a la Junta que vaya a pedir “generosidad y paciencia” a la gente que ha perdido sus proyectos de vida por los incendios forestales de este verano. Gallego lamentó “el abandono” al que tienen sometido a la gente que sufrió los graves incendios forestales y ahora tienen que aguantar como la vicepresidenta de la Junta, Isabel Blanco, vaya a pedirles “generosidad y paciencia”. “¿Cómo se puede ser generoso cuando has perdido tu medio de vida o tu proyecto de vida?”, denunció, tildando además a Quiñones de “déspota y prepotente” en sus primeras declaraciones públicas en 28 días.

Por esa situación de negligencia que hemos vivido “deben asumir responsabilidades” y, especialmente, deben tomar la gestión forestal como una prioridad con unos recursos y presupuestos realmente verdaderos. “Nosotros no somos los culpables, podríamos ayudarles si se dejaran, empezando por esta modificación en la gestión forestal que va ciertamente a la deriva con su funesto modelo”, sentenció.

Finalmente, también por UPL, el procurador berciano José Ramón García exigió a a la Junta de Castilla y León anticiparse y actuar “a lo que va a venir” porque si no tras los incendios forestales vamos a tener que añadir el caos del agua y eso “no lo vamos a permitir”.

Podemos: “Negligente y criminal”

El portavoz de Podemos en las Cortes, Pablo Fernández, lanzó este viernes una durísima crítica contra el consejero, al que acusó de ser responsable de una “negligente y criminal gestión que pasará a la historia de la infamia de esta comunidad”, recordando que los incendios han calcinado más de 125.000 hectáreas, arrasado patrimonio natural como Las Médulas y obligado a miles de personas a abandonar sus casas, entre otras muchas graves consecuencias.

Fernández calificó de “la mayor vergüenza que he visto yo en estas Cortes” que el consejero no haya dimitido pese a la magnitud de la catástrofe, denunciando además que Vox se haya sumado a “cubrirle y protegerle, impidiendo la creación de la comisión de investigación”. El dirigente de Podemos subrayó que el operativo de prevención y extinción de incendios ha sido “privatizado a mayor gloria y lucro de 35 empresas privadas, entre ellas Eulen y Acciona”, lo que ha condenado a los trabajadores a la precariedad. “Usted es un cadáver político que va a arrastrar al Partido Popular, muy especialmente en la provincia de León”, sentenció Fernández, quien anunció que su formación ya ha denunciado al consejero ante la Fiscalía para que rinda cuentas en los tribunales.