La polémica de la extraña composición de la lista de ayuntamientos de la provincia de León incluidos en el millonario plan inversor específico para la comarca de Tierra de Campos parece ir camino de resolverse, aunque sin explicarse muy bien por qué tanto la Diputación leonesa como la Junta 'expulsaron' inicialmente a ciertos municipios de esta comarca natural, todos ellos gobernados por alcaldes del PSOE, mientras se han incluido a otros distantes en más de 50 kilómetros o lindando con la Montaña.
Esa vía de solución, desencadenada tras publicar ILEÓN el malestar de los municipios excluidos de la lista inicial de 23 ayuntamientos de León, ha sido reforzada hoy por el principal artífice de este llamado Programa Territorial de Fomento para la zona de Tierra de Campos 2024-2031, el consejero de Economía, el palentino Carlos Fernández Carriedo.
En su doble calidad de portavoz del Gobierno autonómico de PP y Vox, Carriedo confirmó que ayer se reunió con algunos alcaldes de los municipios de Tierra de Campos no incorporados durante los dos años de trabajo previo y aseguró que “nuestra vocación es incorporarles y atender estas solicitudes”, algo que por un lado tildó de “muy positivo” pero que acabó dejando en manos de la propia Diputación leonesa: “Si nos lo pueden certificar y justificar desde el punto de vista técnico, los incorporaremos”, quiso zanjar.
Unos que sí, dudosos, y otros que no
Hay que recordar que, tras aprobar en el último Pleno la lista inicial de 23 municipios leoneses incorporados al Plan de inversión de más de 61 millones en industrialización, algunos muy ajenos geográficamente a Tierra de Campos (como Almanza, al norte, o Valderas, Matanza de los Oteros, Valdemora, Villabraz o Valverde-Enrique, al sureste), la misma Corporación reculó pocos días después al conocer el descontento, incluso malestar, de algunos alcaldes excluidos. Por eso, la nueva Corporación, aunque a toro pasado, defendió que su propia lista inicial se ampliase para incorporar esos casos. En concreto, se trata de los ayuntamientos de El Burgo Ranero, Santa Cristina de Valmadrigal o Santa María del Monte de Cea.
El consejero de la Junta, al igual que la semana pasada, se quiso enrocar en minimizar la polémica e incluso darle la vuelta para apuntarse un tanto de éxito por las nuevas peticiones, pero negó que fuera el cariz socialista el que justificara que hasta ahora, en más de dos años, no se hubiera ni contado ni hablado con ellos: “Yo no sé ni quien gobierna ni tampoco hemos preguntado”.
Es más, Carriedo trató de deslizar la culpa de ello a la propia Diputación, que en todo este tiempo paradógicamente ha estado gobernada por el Partido Socialista, el mismo signo político que los tres ayuntamientos excluidos. Fue cuando aseguró que la exclusión no dependía del Gobierno autonómico sino que “el listado que había hasta ahora se pactó con las diputaciones provinciales, también con la Diputación de León, que estaba de acuerdo con el listado vigente”.
61,5 millones y, de momento, 23 beneficiarios leoneses
Si finalmente se materializan al menos estas tres nuevas incorporaciones, el Plan de Tierra de Campos superará los 188 ayuntamientos seleccionados hasta ahora en las cuatro provincias que comparten esta comarca, como son las de León, Zamora, Palencia y Valladolid. Las diputaciones de las dos primeras incorporarán 3 millones cada una, las dos últimas 4,4 millones, y la Junta presupuestará el resto hasta los 61,5 millones totales de inversión prevista hasta el año 2031.
Pero en espera de esta ampliación leonesa, los 23 municipios que ya están dentro son los de Almanza, Bercianos del Real Camino, Calzada del Coto, Campazas, Castilfalé, Castrotierra de Valmadrigal, Cea, Escobar de Campos, Fuentes de Carbajal, Gordaliza del Pino, Gordoncillo, Grajal de Campos, Izagre, Joarilla de las Matas, Matanza de los Oteros, Sahagún, Valderas, Valdemora, Vallecillo, Valverde-Enrique, Villabraz, Villamol y Villazanzo de Valderaduey.