“Las obras avanzan a buen ritmo y se prevé que el supermercado esté abierto antes de final de año”. Esta es la contestación del Gabinete de Prensa de Lidl al respecto de su nuevo centro en Eras de Renueva, justo en la glorieta en la que Padre Isla termina y se convierte en Carretera de Carbajal.
El nuevo centro de suministro de alimentación contará con una sala de ventas de más de 1.400 metros cuadrados, dentro de una parcela de 3.944 metros cuadrados, de los cuales 2.366 son edificables. Además la compañía deberá urbanizar el área, incluyendo más de cien plazas de aparcamiento con acceso desde la carretera de Carbajal de la Legua, en el extremo sureste de la parcela, conforme a los requisitos establecidos por el Ayuntamiento de León en el concurso para la concesión.
En 2011, el primer interesado en la parcela de suelo público de Eras de Renueva, situada junto al aparcamiento del centro deportivo y de ocio del barrio, fue Burger King. Sin embargo, finalmente será Lidl —tras una competición con Gadis y Alimerka– quien desarrollará el proyecto en ese terreno. La multinacional alemana comenzó en febrero de este año las obras para construir su cuarto hipermercado en León. Lidl obtuvo la concesión demanial de este suelo municipal a cambio de un canon anual de 210.000 euros, ajustable en un 2% cada año, hasta un máximo de 40 años. La concesión finalizará en 2065, cuando la ciudad habrá recaudado más de 12 millones de euros.
Este nuevo hipermercado en Eras de Renueva generará unos treinta empleos, que se sumarán a los más de 60 empleados que Lidl ya tiene en León y su área metropolitana, donde opera tres tiendas: en Trobajo del Camino, en la prolongación de la avenida Sáenz de Miera, y La Serna, al lado del Pabellón de La Torre. Además, la compañía alemana construirá una plataforma logística en Villadangos con la previsión de trescientos más directos y 2.400 indirectos.
Con este nuevo establecimiento en Eras de Renueva, Lidl se posiciona estratégicamente en las principales entradas a León. Su oferta en el concurso, que triplicó el canon inicial de 70.944 euros propuesto por el Ayuntamiento, dejó atrás las ofertas de 120.000 euros de Gadis y 75.110 euros de Alimerka, asegurando así la concesión del terreno.