Marino, aviador y aventurero leonés con 20 años

“Queridos padres, hace lo menos un mes que no tengo carta vuestra y no sé si llegaranlas mias. acabamos de llegar hoy de la mar, y os escribo, despues de que han cantado las cartas. ayer me ocurrióun percance serio al subir al telemetro cuando ibamos navegando. me pillé el dedo meñique de la manoizquierda entre la puerta y se me fracturó, la falangeta. me dieron puntos. hoy ya estoy bien aunque me duele.estoy rebajado”.

Ésta es una de las cartas de un joven de 18 años a su familia fechada el 30 de enero de 1939, confaltas de ortografía y puntuación, desde su destino en el minador 'Vulcano' durante la Guerra Civil Española.

El autor es José Pallarés Torres, apodado 'Pepín', hijo de José Pallarés Berjón, uno de los dueños de Comercial Pallarés y nieto de Ramón Pallarés Nondedeu (“el médico de los pobres”, muy afamado en la provincia).

Éstos eran una familia republicana desde el siglo XIX que hizo dinero e historia en la capital leonesa hasta el punto de que el emblemático edificio donde tenía los grandes almacenes leoneses se ha convertido en el Museo de León.

18 años. Justo cuando los cumplió, y pese a haber estado su padre y todos sus tíos encerrados en San Marcos, se alistó como marino voluntario en la Armada Nacional.

Fue destinado en Mallorca en el rol de un navíominador reconvertido en una especie de destructor por las prisas de la contienda fratricida, en el quecomenzaría su corta pero intensa vida de aventurero rodeado de la tecnología más moderna. Tras terminar laguerra se alistó en la Escuela Pre-Militar de San Javier (Murcia) para formarse como aviador de la marina,volviendo a la misma base naval en que fue marino (Pollensa, en Baleares) para pilotar hidroaviones como elhermano desaparecido en misión de guerra del dictador Francisco Franco, el héroe del 'Plus Ultra', Ramón.

El joven aventurero leonés murió ocho años después, dejando un intenso sentimiento de dolor en el PallarésBerjón. Pero 65 años más tarde, con el descubrimiento de su álbum de fotos, sus agendas y sus decenas decartas, consigue la gloria y el reconocimiento que quizás buscaba en su intensa vida.

Un niño que sale de casa para convertirse en un héroe

18 años y alistado en la marina de guerra. Los padres estaban inquietos, pero no disgustados: 'Pepín' “hacía loque quería hacer”.

Aficionado al dibujo y la fotografía, reunió en un álbum multitud de insignias, fotos deperiódicos, de sus aviadores favoritos de la Primera Guerra Mundial (el Barón Rojo entre ellos) y Ases de la Aviación Nacional durante la Guerra (Joaquín García Morato, el mejor de toda la historia española con 40 abatimientos confirmados y 12 probables durante ese conflicto, y Werner Mölders, de la Legión Cóndor, con 14 en ella y uno de los mayores ases de la Luftwaffe en la Segunda Guerra Mundial, que participó en la Batallade Inglaterra en 1940, con 115 aviones derribados, el primero en llegar al centenar en la Historia).

Sus dos héroes morirían jóvenes como él, al sufrir un accidente aéreo en 1947 cuando aterrizaba en el aeródromo de El Palmar (Murcia): Mölders a los 28 años en 1941 y García Morato, justo tras terminar la Guerra Civil, con 36 años. Ambos en accidentes aéreos, lo que le unió a sus admirados aviadores en la muerte. 18 años.

Y para la mar. Y en guerra. La familia lo debió pasar mal, pero él era feliz al ser destinado al telémetro del'Vulcano', un puesto muy especial porque con ese aparato (cedido por los alemanes a la Armada 'Nacional') secalculaba la precisión de los disparos de la artillería naval de su buque de guerra. Alta tecnología de la época. Participó en varios combates. El más famoso el del embarrancamiento en Gibraltar del 'José Luis Díez', que describe minuciosamente en una carta. Fue de los primeros en divisar los restos del hidroavión de Ramón Franco;estuvo en las caídas Tarragona y Barcelona donde comentaba en una de sus misivas “que la gente se muere dehambre” y tras la guerra no quiso volver a la vida de comerciante de su familia. Así que decidió ser piloto.

Con 20 años, aviador

A la veintena, José Pallarés Torres, que durante su periplo como marino sacaba fotos de combates aéreos y los contaba con pasión en sus cartas, consiguió sus alas de vuelo para la aviación de la marina. Su experiencia encombate naval, la telemetría y su título de aviador le llevaron a volver a la misma base naval en la que estuvo,Pollensa (Mallorca) pero esta vez en el Grupo de Hidros, Escuadrilla 52.

Durante los años de la Segunda GuerraMundial pilotó los cielos españoles en misiones de vigilancia aérea y pudo visitar así muchos de los aeropuertos en los que estaban no sólo los aviones de Stalin, sino los que dejó la Legión Cóndor o vendió la Alemania nazi a España en aquellos tiempos.

24 años. En su álbum y sus cartas hay dibujos de alta calidad. Los datos son minuciosos. Las agendas de vuelo indican que pilotó toda clase de aviones (Bucker Bu 131 y 133, Hispano E-30, Gotha Go-145, Heinkel He-45,Curtiss I-15, Savoia Sa-81, Junkers Ju-52, Caproni Ca-310 y Heinkel He-111, en diciembre del 44). Visitómultitud de aeródromos donde pudo fotografiar los aparatos de Stalin: 'Chatos' en Villanubla, Valladolid;'Katiuska' ('Katiusca', como escribía él), en los Llanos (Albacete); 'Ratas' (llamados 'Moscas' por losrepublicanos y de esa forma despectiva por los 'nacionales') en el aeródromo de Tablada en Sevilla. 26 años. Voló, voló y voló. Viajó, viajó y viajó. Fotografió, fotografió y fotografió. Rellenó varias agendas consus datos de vuelo. Dibujó y dibujó, dejando alguna preciosidad en su álbum de fotos. Recolectó emblemas delas escuadrillas de vuelo de sus compañeros.

Apuntó, apuntó y apuntó. Escribió cartas y contó cómo se sentía de feliz siendo un chaval rodeado de tecnología punta. Y un 2 de abril de 1947, pocos días antes de sucumpleaños... su avión, en un día tormentoso y peligroso para volar, se deslizó en el momento de aterrizar. Era alférez piloto de aviación. Muy querido por sus compañeros. Un mal golpe dentro de la cabina y falleció en un accidente considerado “tonto” para la época y para el día de hoy. 26 años. Su familia destrozada. Durante años recordaron a 'Pepín', que les informaba en las cartas de los encuentros con sus amigos durante la guerra con apellidos tan ilustres para León como Sáenz de Miera.

Durante años le lloró su padre. Pero él vivió ocho años intensos, muy intensos, llenando sus ansias deaventura e ímpetu juvenil. Dejando el ejemplo prototípico de un aventurero español burgués de los años 30 y 40. Si hubiera sido estadounidense tendría museos, libros, documentales y películas. Aunque es hora de que ese camino se inicie aprovechando lo que nos cuenta 'Pepín' Pallarés Torres sobre sus increíbles peripecias.

Un conjunto de documentos valorado en miles de euros

Hace pocos días el diario El País publicaba un reportaje sobre un maletín con 1.400 negativos, la mayoría imágenes de la Guerra Civil realizadas por un fotógrafo anónimo recuperado en el sur deFrancia, que salió a subasta. El lote, con un precio de 25.000 euros, no fue adquirido por nadie, pero La Comisión de la Dignidad, asociación que litiga por el regreso a Cataluña de los papeles de Salamanca,explicó que los había adquirido por 7.500 euros en una subasta por Internet.

Los documentos de 'Pepín' son todavía más importantes: decenas de cartas, con el sello de la CensuraMilitar, minuciosas agendas de vuelo, dibujos de su propia mano, negativos, fotografías suyas yrecogidas de la época, tanto de su paso por la Armada del bando 'nacional' como las de los aviones de Stalin con las insignias del recién creado Ejército del Aire; instantáneas con sus compañeros navales yaeronavales, fotos de sus héroes y con pies explicativos de cada lugar y aparato, tanto soviéticos comoalemanes y de todas las nacionalidades (hay hasta un caza polaco).

Más de un centenar de positivos y negativos agrupados en un conjunto de documentos que pueden cambiar la Historia de aquellos años.Todos ellos propiedad de la familia Pallarés y en depósito en el Archivo de la Banca Fernández-Llamazares, queestá en León. Su conservador, Francisco Javier González Fernández-Llamazares -que acaba de publicar el libro'Crónicas de la Burguesía Leonesa. Sobre un episodio de la Guerra Civil en León'-, asegura que “es uno de losconjuntos de documentos de más valor histórico que se ha encontrado sobre la Armada Española durante laGuerra Civil y de la aviación franquista de los primeros años cuarenta.

Que esté todo reunido y con talminuciosidad es algo muy poco habitual, sobre todo más de setenta años después“. Un álbum olvidado en un armario que, al ser reconocido por él y el divulgador de Historia Militar Jesús María López de Uribe, se hace protagonista 65 años después de la muerte de José Pallarés Torres. Y que hace protagonista de la Historia de España a ese joven aventurero que murió con 26 años y que seguro que quería marcar un hito en la misma, pero no lo vio en vida. Es lo que tienen las vueltas de la Historia. 'Pepín', si estuviera hoy con nosotros, lo confirmaría.