La Junta de Castilla y León ya ha iniciado los trámites legales para la rescisión del contrato con la constructora del nuevo Conservatorio de León por los retrasos acumulados de casi un año en la obra y ha puesto de nuevo en marcha la licitación del 51 por ciento del proyecto que resta por hacer. Todo cuando, según las propias promesas de la administración autonómica, el centro tendría que estar ya inaugurado y en pleno funcionamiento.
Así lo ha avanzado este martes en las Cortes la consejera de Educación, Rocío Lucas, que ha detallado que la Junta ha desembolsado ya cuatro de los diez millones en los que está valorada la obra, que ha sufrido este retraso por “motivos ajenos a la administración”, ha excusado.
En este sentido, Lucas ha explicado que “ante los retrasos adquiridos” por la empresa, en una obra que ha llegado a estar totalmente parada, la Junta inició en el mes de agosto los pasos para rescindir el contrato con la constructora, paso previo para poder licitar “cuanto antes” el nuevo contrato.
Así ha respondido la titular de Educación a una cuestión planteada en el Pleno de las Cortes por el Grupo Socialista, al que ha subrayado que, al contrario que su formación, para la Junta “la ley es importante y por eso siempre la cumple”.