La Junta destina ayudas europeas para instalar un muladar en la vertiente leonesa de Picos de Europa
La Junta de Castilla y León anuncia que ha licitado la construcción de un nuevo muladar en el Parque Nacional de los Picos de Europa, en la vertiente de la provincia leonesa y en concreto en el valle de Valdeón, por un importe de 63.318 euros, dinero que procede de los fondos Next Generation de la Unión Europea.
La idea es que esta nueva infraestructura que dispone restos animales para que sean aprovechados por algunas especies, muchas de ellas carroñeras, sirva para favorecer la gestión de residuos animales y contribuir también a la conservación de algunas especies catalogadas en peligro de extinción, como es el caso del quebrantahuesos.
Será crucial para que se terminen de asentar los quebrantahuesos que han sido reintroducidos en el Parque Nacional de Picos de Europa en los últimos años con un proyecto pionero y que ha conseguido que permanezcan en la zona hasta 45 ejemplares, situándose casi a medio camino de los 100 o 120 que se estiman necesarios para que la especie sea autosostenible.
Según informa la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, esta infraestructura se ubicará estratégicamente en un punto que no detalla dentro del municipio de Posada de Valdeón. Aseguran además que el muladar ya cuenta con autorización y su construcción se enmarca dentro de un plan de gestión y conservación de la biodiversidad.
Dentro de ese plan la Junta menciona la futura la licitación y puesta en marcha de un observatorio de aves pero de este otro proyecto no se detallan ni plazos ni presupuesto. Lo que sí explican es que ese observatorio de aves permitirá estudiar, fotografiar y disfrutar de las diversas especies de aves necrófagas que posee el Parque Nacional, “consolidando así su posición como referente en el turismo de naturaleza” y dinamizando la vertiente leonesa y en general el espacio protegido.
La Consejería afirma que la gestión de esta infraestructura ser privatizará, adjudicándose la gestión del observatorio a empresas de turismo de naturaleza que prioricen entre sus fines el ecoturismo y la educación ambiental. Aseguran las mismas fuentes que así se generarán “ingresos que repercutirán en los propietarios de los terrenos” donde se construyan las instalaciones, y a la postre también indirectamente generará de empleo y oportunidades de negocio para las empresas de avistamiento de avifauna.
Según la Consejería, la puesta en marcha del muladar está prevista para el primer semestre del año 2025 y “generará numerosos beneficios tanto para el entorno natural como para la economía local”. Entre ellos, destaca la mejora de la gestión de residuos ganaderos, que reducirá los costes de gestión para las explotaciones, y la conservación y protección de la avifauna necrófaga del parque, que se verá beneficiada por el aporte de alimento, fundamentalmente en épocas desfavorables en las que pueda escasear el mismo en el medio natural.
También el fomento del turismo ornitológico, que se verá incrementado por la presencia de un punto fijo de observación de especies tan emblemáticas y difíciles de observar como el quebrantahuesos.