Todo lo que se necesita saber para ser donante de órganos, tejidos y médula

España es líder mundial en trasplantes desde hace tres décadas. La Ley 30/1979 establece que todos somos potenciales donantes tras el fallecimiento, salvo que hayamos expresado lo contrario. A esto se le llama consentimiento presunto. No obstante, la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) recuerda que la decisión final muchas veces recae en la familia. Por eso, la mejor manera de asegurarte de que tu deseo se cumple es dejarlo por escrito o comunicárselo a tus seres queridos.

Se puede hacer registrando las voluntades anticipadas en el Registro de Instrucciones Previas de tu Comunidad Autónoma. En Castilla y León existe una plataforma interconectada con el resto del país. Además, existe una tarjeta de donante que, aunque no tiene valor legal, puede ser útil como prueba simbólica de tu decisión.

Detalles de las donaciones

  • Órganos: corazón, pulmones, hígado, riñones, páncreas, estómago e intestinos.
  • Tejidos: córneas, huesos, piel, válvulas cardíacas, vasos sanguíneos, tendones, cartílago, placenta, membrana amniótica e incluso células cultivadas.
  • Médula ósea y sangre del cordón umbilical: fuente vital de células madre para tratar leucemias y otras enfermedades hematológicas. La médula ósea, que no hay que confundir con la espinal, es una fábrica de células madre. Estas células son capaces de regenerar la sangre y el sistema inmunológico, lo que las hace imprescindibles para personas con leucemia, linfoma o aplasia medular. Para donar médula hay que: tener entre 18 y 40 años, estar sano y no padecer ninguna enfermedad grave o transmisible, contactar con un centro de referencia, rellenar un formulario y firmar el consentimiento informado, hacerse una prueba de compatibilidad mediante análisis de sangre o muestra de saliva y una vez registrado, el potencial donante entra a formar parte del REDMO (Registro Español de Donantes de Médula Ósea).

Aunque todos podemos expresar el deseo de ser donantes, no todos los fallecimientos permiten la donación de órganos. Para ello, es necesario que el fallecimiento se produzca en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), donde se puedan preservar los órganos en condiciones óptimas. Sin embargo, en el caso de donación de tejidos, el margen es más amplio y puede realizarse hasta 72 horas después del fallecimiento, incluso si se produce fuera del hospital. Esto permite que muchas más personas puedan ser donantes.

Cada año, más de 5.000 personas en España reciben un trasplante de órgano o tejido gracias a la generosidad de otros. Pero aún hay muchas más esperando, muchas de ellas niños. Hay que recordar que un solo donante puede: salvar hasta 8 vidas con la donación de órganos, mejorar la calidad de vida de más de 100 personas con la donación de tejidos y dar una segunda oportunidad a pacientes con cáncer hematológico mediante la donación de médula.

En palabras de la ONT, la donación es libre, voluntaria, anónima y gratuita. No hay pagos, no hay contrapartidas. Solo el deseo de dar. Sé donante. Da vida.