La Junta de Castilla y León ignora a la lengua leonesa en su web oficial pese a estar obligada a promocionarla

La página oficial administrativa de la Junta de Castilla y León (jcyl.es) no menciona la “lengua leonesa” ni la define, mientras sí lo hace con el castellano (sobre todo encumbrándolo como español) y se refiere al gallego y hasta el euskera. Esto, pese a que el artículo quinto del Estatuto de Autonomía deja claro que está obligada a proteger la lengua leonesa, amenazada según criterios de la Unesco, y a promocionarla.

Salvo una nota de prensa de este mes de julio, la llingua llionesa –una de las tres del ámbito lingüístico asturleonés junto con el asturianu y el Mirandés, lengua oficial del Estado en Portugal–, una búsqueda en la página web de la administración autonómica refleja directamente que en ningún lugar se explica que el llionés sea una lengua propia de la comunidad autónoma.

La Junta ignora este hecho de tal manera que incluso cuando se habla de Patrimonio Cultural Inmaterial el texto reza: “El patrimonio lingüístico de Castilla y León está integrado por las diferentes lenguas, hablas, variedades dialectales y modalidades lingüísticas que tradicionalmente se hayan venido utilizando en el territorio de la Comunidad de Castilla y León”. Tampoco hay referencia alguna a dialectos del llionés como el bercianu, el cabreirés o la palra d'El Rebollar en Salamanca.

Sin embargo, en el caso del castellano se apunta en varias páginas, asumiendo la definición de que es el español, en la página del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua (cuyo objetivo es promocionar la lengua española), y menciones al Camino de la Lengua Castellana y a que la Comunidad Autónoma “es el origen de la lengua castellana”. Ésta se usa, además, como atractivo turístico internacional.

Destaca sobremanera que sí se mencione al euskera en la web oficial de la administración autonómica, pese a que ni siquiera hay una sola referencia a esta lengua en el Estatuto de Autonomía. Lo hace junto al gallego, en el listado de las asignaturas que se pueden cursar en las Escuelas Oficiales de Idiomas al lado del inglés, francés, alemán y chino, entre otros.

Lo único que se le acerca es el enlace a un documental titulado El son de la Tsingua, que se puede ver en Youtube, pero sin mencionar en ningún momento qué lengua es (salvo que se visione el mismo). Tampoco se indica explícitamente que es patsuezu, dialecto del llionés en Laciana (Tsaciana en su habla).

Enlaces externos en Educacyl

Donde sí hay alguna referencia al leonés es en la página de recursos para los profesores de Educacyl. Pero muy por debajo de lo que es el castellano y el gallego, que tienen recursos y unidades didácticas completas. Incluso se llega a referir una página entera para el Museo Pedagógico Gallego, situado en Santiago de Compostela.

En todo caso, los recursos indicados en esta web sobre la lengua leonesa los han aportado profesores o asociaciones, como 'Corazón de León' que incluye un recurso educativo de un “documental de unos treinta minutos sobre el desarrollo y situación actual de la lengua leonesa” producido por Rici Comunicación, que es en esencia un enlace al blog del mismo nombre.

Otro recurso, enlazado, es el Curso Básico de Leonés de la Asociación Faceira con diez lecciones que remite a su propia página web. De este hay dos enlaces que llevan al mismo lugar, porque uno es para destacarlo como educación inclusiva.

En todo caso, estos elementos en Educacyl se han 'subido' a este repositorio de recursos educativos por personas individuales o asociaciones no gubernamentales, no oficialmente por la Administración autonómica pese a que ésta aloje esta web en sus servidores.

La 'protección' lingüística del Estatuto de Autonomía

La última revisión del Estatuto Autonómico, de 2007, indica como valor esencial “la lengua castellana”, junto “al patrimonio artístico y natural” en el artículo cuarto, que desarrolla más aún en el quinto: en el que se especifica que “el castellano forma parte del acervo histórico y cultural más valioso de la Comunidad. Aquí sí se menciona al leonés, indicando que ”será objeto de protección específica por parte de las instituciones por su particular valor dentro del patrimonio lingüístico de la Comunidad. Su protección, uso y promoción serán objeto de regulación“.

Además, en su punto tercero se determina que “gozará de respeto y protección la lengua gallega en los lugares en que habitualmente se utilice”. Para llegar a ver esta mención de la lengua leonesa se debe pinchar en el enlace del PDF de la norma que regula la Comunidad Autónoma de Castilla y León, pero no se vislumbra de forma directa en ninguna otra página del sitio oficial.

Sobre la regulación prometida para la lengua leonesa, ni está ni se la espera. La última polémica con ella se produjo la semana pasada cuando la Consejera de Educación aseguró, cuando la UPL preguntó en las Cortes “por qué no había una asignatura de llionés en los colegios” (como sí se hace con el gallego en León y Zamora y el euskera en el Condado de Treviño burgalés), que al carecer de regularización lingüística ve “imposible ofrecer leonés en todas las etapas educativas por falta de profesores titulados”. Sin embargo, es la propia Junta la que tiene la competencia de habilitar a estos docentes y podría aprovechar la legislación de la regulación indicada en el Estatuto. Pero nunca la ha llevado a cabo ni incluido en la agenda legislativa desde que se reformó.