La retirada de la basura del Páramo, en estampida

ileon.com

Por primera vez es posible que un trabajo se ejecute en menos de la mitad del tiempo previsto. Sería inaudito si no fuera porque hablamos de las casi 500.000 toneladas de basura que están siendo trasladados 'en estampida' desde la finca de El Busto de Santa María del Páramo hasta el vertedero provincial de San Román de la Vega, y si no hubiera órdenes de que esta complejísima y muy polémica operación, sobre la que pesa una amenaza judicial inminente, se acelere al máximo posible.

El plazo inicial estimado por el consorcio Gersul que preside la Diputación y por la empresa adjudicataria del servicio provincial de residuos (UTE Legio VII) era de cuatro meses. Sin embargo, las labores que comenzaron el 1 de septiembre han conseguido ya hoy, día 22, enviar al centro de tratamiento de residuos (CTR) de San Román más de un 30% del inmenso volumen de basura. Es algo que se puede apreciar en nuevas fotografías aéreas realizadas por el Club Aéreo Esparver y que ha colgado en su perfil de Facebook, realizadas el pasado día 20 de septiembre.

Aeroclub Esparver.

Esto es posible porque se han intensificado al máximo posible los turnos de trabajo de recogida de los fardos acumulados desde hace 12 años y los del traslado en camiones y por carretera de los mismos. Un traslado que ya ha recibido numerosas quejas por los olores que está provocando y por la peligrosidad del incremento en la afluencia de tráfico entre la finca cercana a Valdefuentes del Páramo y el emplazamiento de la planta provincial, a lo largo de más de 30 kilómetros de ida y otros tantos de vuelta. Incluso de noche y de madrugada se vienen realizando estos viajes de manera ininterrumpida.

La celeridad de las labores podría estar relacionada con la ofensiva judicial anunciada por todos los ayuntamientos, gran parte de ellos mancomunados, del entorno del vertedero de San Román de la Vega, destino de los fardos ya putrefactos, y que se niegan en bloque a que el traslado se produzca sin ningún tipo de tratamiento previo de la ingente cantidad de detritos, lo que no solo consideran un riesgo para el medio ambiente sino una ilegalidad, con las autorizaciones del CTR en la mano.

Así lo han avanzado ya en las alegaciones presentadas a este procedimiento y así lo preven argumentar además en el proceso Contencioso anunciado si el consorcio y la Junta de Castilla. y León, administración competente en materia de residuos y medio ambiente, no se avienen a dialogar con estos ayuntamientos, los cuales son tanto del PP como del PSOE.

Otra cuestión aparte es la contaminación que pueda quedar en la finca de El Busto, junto al municipio de Valdefuentes, durante estas labores y con carácter posterior. Preocupan ciertos detalles de las elocuentes imágenes tomadas desde el aire, como por ejemplo donde se observa que entre el 'mar' de fardos se han abierto canales para evacuar los líquidos que van quedando.

Se teme que, como parece lógico, gran parte de ellos pueden ser lixiviados, es decir, residuos líquidos contaminantes procedentes de las balas, que se evacúan hacia fincas aledañas al parecer sin control de ninguna clase. En el interior de la finca se aprecian abundante cantidad de lagunas de este líquido, quizá mezcladas con agua de la lluvia.

Las balsas que hay de lixiviados, que han sido durante estos años cuatro dentro del perímetro interior del recinto, se han ido vaciando estos años de manera periódica, además de que la tela asfáltica que cubría inferiormente el vertedero caducó hace tiempo, con lo que la protección del suelo brilla por su ausencia, según se ha denunciado reiteradamente desde la web www.vertederono.com.