Diputación de León: un gasto político disparado y casi 180 millones de dinero 'sobrante' en los cajones

Hace años que la Diputación de León saca pecho de unas cuentas que son la envidia de las administraciones públicas e incluso de alguna empresa privada. Datos como una gran solvencia inversora, que debe redundar en los pueblos de la provincia, presupuestos de cifras récord creciente o el hecho verdaderamente extraordinario de ser una institución con 'deuda cero' desde el 1 de octubre de 2018,.

En aquella fecha, hace ya cinco años y medio, se pagó el último céntimo de un crédito suscrito con un banco, culminando un proceso iniciado por la presidenta Isabel Carrasco (PP) y apuntalado a la fuerza con su asesinato y la posterior detención de su sucesor, Marcos Martínez Barazón, por corrupción, que mantuvo en gran medida paralizados despachos y arcas del Palacio de los Guzmanes.

Este nuevo mandato estrenado hace todavía menos de un año tras las elecciones municipales de mayo de 2023 se ha reeditado el pacto de gobernabilidad de PSOE y Unión del Pueblo Leonés (UPL) y fruto del mismo se acaba de aprobar su primer presupuesto para la Diputación. Y en él destacan numerosos récords más, entre otros el dinero público que se multiplica destinado a sueldos políticos y salarios de su personal de confianza.

En el primer caso, la comparativa entre 2023, último presupuesto de la anterior Corporación, y 2024, arroja un 25% de aumento de los salarios que se reparten los 25 diputados y diputadas provinciales, que lo son del PSOE, UPL, Partido Popular (PP) y por primera vez Vox, en vez de Ciudadanos, como en el mandato previo. El aumento, en euros, es muy abultado: ha pasado de 709.273 a 886.267 euros en apenas unos pocos meses. Son prácticamente 177.000 euros más en sueldos. Se sumarían otros casi 39.000 teniendo en cuenta que aumentan también los pagos a la Seguridad Social.

Casi el 100% más de personal eventual

Es cierto que, a cambio, otros conceptos como las dietas de miembros de la Corporación bajan un 77,32%, entre otras cosas al haber más sueldos completos como dedicación exclusiva, pero el recorte aquí es irrisorio: de 5.000 euros que se destinaban a 1.143.

La palma del aumento de este presupuesto recién estrenado, sin embargo, se la llevan los sueldos del personal eventual, aquellos trabajadores de confianza cuyo número, funciones y retribuciones deciden todos los grupos políticos para realizar labores para los cargos políticos y sus grupos institucionales. En este caso, el aumento es redondo: del 100% en un año. De sumar un coste de 102.598 euros ha pasado a 194.286. O lo que es lo mismo: 91.688 euros más entre un presupuesto y otro. También suman 28.231 euros más por costes a la Seguridad Social. Es más, incluso las retribuciones del personal eventual específicamente asignado a la Presidencia, que ahora ocupa Gerardo Álvarez Courel en sustitución de Eduardo Morán, crecen un 3,78%.

Tijera a los misteriosos “proyectos singulares”

Escudriñando la comparativa de las cuentas que esconde el presupuesto general de la Diputación para este año, se aprecia de dónde procede y con qué se compensa en gran medida todo este aumento del coste salarial de políticos y su personal no de plantilla. Básicamente hay un ahorro inicial de 400.000 euros que hasta ahora solían aparecer en una partida llamada “Proyectos singulares”, de incierto uso discrecional sobre todo por parte de la Presidencia. Esa partida no desaparece, sino que queda ahora con 100 euros, de modo que se transforma en lo que se suele denominar “partida abierta”, susceptible de recibir fondos nuevos. Eso está por ver.

Y es que el presupuesto 2024 espera todavía, como agua de abril, la liquidación, los remanentes: el dinero sobrante, no invertido, gastado ni ejecutado, en años anteriores. Es un momento en el que el presupuesto, nunca jamás tan elevado, y que se cifra para este año en 214,6 millones aún está pendiente de enriquecerse con una cifra de remanentes que cada año deja más dinero en la caja provincial por falta de ejecución presupuestaria y acaba, sólo en parte, suplementando diferentes áreas y planes de obras de la institución.

La cifra de ese dinero sobrante también alcanza una cuantía récord, casi inaudita. El estado de la liquidación del presupuesto de gastos a mediados de enero la situaba en casi 179 millones de remanentes, en concreto 178.844.030 euros, que tendrán poca variación cuando en cuestión de días se den por zanjados y el equipo de Gobierno provincial comience a negociar con la oposición la incorporación de una parte de ellos a ciertas partidas presupuestarias, como hace casi todos los años, en busca del consenso.