Caja Rural hace un balance positivo del año 2022, con un crecimiento superior a la media provincial
Caja Rural realiza un balance del año 2022 que resumen como muy positivo en todos los parámetros financieros, aunque reconocen que ha sido duro por las dificultades económicas nacionales e internacionales. Cierra el año con crecimientos superiores a la media de otras entidades provinciales y con importantes aumentos en todas las ratios de solvencia.
En 2022 la entidad alcanzó durante el pasado año 2022 un volumen de negocio de 1.177 millones de euros en la provincia de León, lo que supone un crecimiento del 14,7% respecto a 2021. La entidad “aumentó significativamente la concesión de nueva financiación a empresas y particulares”, de manera que en León ha concedido préstamos por importe de 263 millones de euros, con un volumen de 1.068 millones de euros en los últimos cinco años. Además, hasta el mes de noviembre se constituyeron nuevas hipotecas que supusieron el 18,5% del capital.
En un año de “dificultades, problemas y vicisitudes en el ámbito financiero con una subida de tipos de interés”, Caja Rural acreditó que “tiene recursos y fundamentos para acometer cualquier situación que se produzca en el ámbito social y económico”, al tiempo que consolidó “el modelo de éxito de banca de proximidad” con “crecimientos muy superiores a la media del sistema financiero” que “reportan fiabilidad y aumentos en todos los ratios de solvencia”.
Así lo señaló el director general de Caja Rural, Cipriano García, quien detalló que el crecimiento de los recursos gestionados por la entidad en la provincia cuenta con una tasa anual del 17%, con un incremento del 14,4% en depósitos y unos recursos fuera de balance un 35,4% superiores al año anterior. En cuanto a los recursos problemáticos, la tasa de morosidad se sitúa en un 2,8%, “muy por debajo de la media nacional”.
Caja Rural cuenta en este momento con un total de 38.500 clientes en la provincia de León, 1.500 de ellos incorporados durante 2021, repartidos en 22 oficinas, ocho de ellas urbanas en la capital, y a las que se sumará la número 23 con la próxima apertura de una oficia en Ponferrada. Todos ellos cuentan con “los mejores profesionales”, con “profesionalidad y entrega absoluta”, de los que “depende de la evolución de la entidad”.
La entidad bancaria obtuvo en 2022 un beneficio global de 30,4 millones de euros, lo que supone un incremento del 12,4% respecto al dato registrado en el año anterior, algo que para el director general de la entidad, Cipriano García, supone que la entidad “es una de las entidades más eficientes de España” con “una tasa de mora muy competitiva e inferior al resto de entidades financieras”.
Cipriano García, estuvo acompañado del jefe de zona de León, Alejandro Hidalgo, en la presentación de la entidad financiera en 2022, destacó que se trató de un ejercicio en el que el volumen de negocio total alcanzó los 5.708 millones de euros, un 14,2 % más que en 2021 en una entidad “razonablemente ambiciosa y eminentemente inversora” que lleva a cabo “un proyecto proactivo y necesario en la evolución económica y social allí donde se encuentra”. “Somos gente seria, de fiar y comprometida, que no dejamos a nuestros clientes nunca en la estacada, sino que queremos darle soluciones a cada problemática”, resaltó.
Próximo ejercicio
Sobre las previsiones para el ejercicio de 2023, el director general de Caja Rural avanzó que será “un año muy complejo”, debido a que “los tipos de interés están subiendo todos los días” en una evolución “anormal” que “nunca se ha producido a esta velocidad”, lo que “está distorsionando las economías, sobre todo las familiares, porque va a ser una subida muy alta en muy poco tiempo”.
Para Cipriano García, la “distorsión irracional de incremento de los tipo y el cambio de interés variable a fijo dará lugar a ”un pequeño maremágnum“ por su ”rápida evolución“, a lo que sumará ”la devolución de los fondos prestados por Europa en pandemia“, que a pesar de que ”deberían haberse devuelto en plazos más cómodos“, como consecuencia de la inflación ”se requiere se repongan antes de junio que es cuando vence“, por lo que el mercado financiero estará ”dislocado“.
