Alberto Jiménez Monteagudo ha sido el entrenador de la Cultural y Deportiva Leonesa en la temporada, seguramente, más difícil de la entidad en sus 87 años de existencia. Compartió con ileon.com unos minutos de reflexión antes de partir rumbo a Albacete, su ciudad natal, con ganas de recibir pronto la llamada que le confirme que puede empezar a preparar la siguiente temporada de la Cultural.
¿Qué valoración hace de la temporada?
Muy positiva sobre todo en el aspecto de sobreponerse a los tremendos problemas. Hemos terminado con siete partidos sin perder y salvando la categoría dos semanas antes de acabar la liga, después de que en algún momento de la temporada el club casi desaparece. Creo que es una temporada para que la gente piense lo que es la Cultural y lo que estamos viviendo, e intenten darle un giro radical a lo que es la estructura del club y las aportaciones. O a la cantidad de gente que puede haber detrás. También creo que debe haber un apoyo más claro de entidades públicas y privadas. Creo que se han aprendido muchas cosas, tanto dentro como fuera del club.
Deduzco que considera que la estructura del club no es la correcta. ¿Qué cambiaría?
Creo que hay que tener muchísimo más atadas las cosas y los presupuestos. Es cierto que desde el club se comenta que las subvenciones no han llegado y se ha producido un desfase presupuestario en años anteriores. En estos momento los equipos dependen mucho de la gente que vaya al campo, de las entidades públicas. Todo el mundo sabe la crisis que hay. Yo creo que se deben hacer presupuestos muy muy bajos sabiendo que se puede descender cualquier año y estudiar muy muy bien el mercado de fichajes y de jugadores de la provincia. Es difícil con un presupuesto tan bajo conseguir ascender, pero no veo otra posibilidad. Porque si no mira como están los equipos. A nosotros nos deben 7 meses, y es difícil. Hay que plantearse la forma de trabjar y buscar alternativas.
De hecho, éste es su segundo año sin cobrar ¿no?
Sí. El año pasado estuve 10 meses sin cobrar y este año 7.
¿Fue lo mismo? o ¿distinto?
Ha sido diferente. Allí había cinco o seis veteranos en el vestuario. En un momento dado fueron la voz cantante. Tuve reuniones con ellos y entendieron que había que intentar salvar la categoría, como lo han entendido aquí. Aunque este año hubo un momento distante, en el que parecía que íbamos a la huelga y que se rompía el vestuario, al final no se rompió. Son situaciones malas, difíciles. Es cierto que allí había siete u ocho jugadores de Córdoba, cerquita, aquí hay jugadores a 800 kilómetros de su casa. Por lo que la situación aquí ha sido un poco peor.
Este club lleva muchos años sin ideas
Desde el puesto de entrenador ¿cómo has visto a los posibles inversores?
Tengo el problema de que me lo creo todo de todo el mundo hasta que me demuestren lo contrario. Le doy credibilidad a todo el que viene a intentar ayudar. Tamargo pensábamos que venía de verdad. Al venir con el presidente uno le da credibilidad. Si el presidente está con una persona, te la presenta, te llevan a cenar...uno entiende que habrá tenido los suficientes contactos con esa persona, con la empresa que tiene y con gente de su alrededor. Yo le doy credibilidad porque viene con mi presidente. Luego por una cosa o por otra, no entró. Después hubo noticias de otros grupos que tampoco entraron. Ahora es Baena que parecer ser que sí, por lo que hemos escuchado y por lo que yo he hablado con él. Se está alargando un poco la solución, pero parece que está cerca, por lo menos lo que él comenta.
Ahora mismo, ¿confía en la salvación de la Cultural con esa estructura de la que hablábamos y con los 3 millones y medio de euros de deuda?
Yo estoy convencido. Es esencial primero buscar alguien que ponga dinero para salvar el primer matchball, que es la deuda con los jugadores. Después llegar a acuerdos para hacer pagos a seis, ocho o diez años, a los que se hayan llegado con la concursal y a partir de ahí gestionar el club, buscar socios. Creo que las campañas de abonados no son masivas. Hay que hacerle ver al aficionado que con su abono puede hacer que la Cultural viva. A lo mejor así, tirándose a la calle, yendo a los centros comerciales y demás, consigues hacer una cantidad de socios que igual es el presupuesto de un año. Pedes conseguir 600.000 euros, por ejemplo. Consigues hacer 5.000 abonados, que se puede hacer porque León tiene capacidad para ello. A nivel económico, haces un abono medio. No voy a decir ahora una cifra, pero que una persona diga “no vale mucho el fútbol en León”. Con esto se puede hacer un proyecto, ir consolidando el equipo y a ver si un año suena la flauta y se consigue ascender, que 38 años sin ascender es mucho tiempo.
Es posible que la gente no apoye al equipo por la gestión del club estos últimos años, ¿cómo ve la posibilidad de una disolución y refundación de la Cultural con otro nombre? Habría que comenzar en tercera pero sin arrastrar tres millones y medio de euros de deuda.
No es fácil porque es un dinero. No es mucho comparado con otros clubs, el Albacete, por ejemplo, tiene 13 millones de deuda, se han ido a la quita de concurso de acreedores y se han quedado en 7 millones de deuda en Segunda B, claro, el objetivo del Albacete es subir, en dos o tres años, pero subir. El problema de la Cultural es que llevan muchos años sin subir, no ha habido ese sentimiento en la ciudad de decir “hoy viene el Betis”, por ejemplo, y eso se nota, la gente se quema. Es un problema de hacer las cosas bien y algo más, porque ha habido buenos entrenadores, buenos jugadores, pero no sé si en algún momento dado no ha habido buenos gestores. Creo que tenemos que ir todos de la mano, comenzar con una buena base, con un buen coordinador del fútbol base, dándole preferencia a jugadores que puedan llegar a subir. A partir de ahí, poner un entrenador, poner un director deportivo que esté en consonancia con el entrenador y con las ideas del club, conocer toda la cantera, conocer el Astorga, el Puente Castro, todo el fútbol de la región e ir sumando. Al final seguro que suena la flauta.
Hablaba del fútbol base, ¿cuánto ha hablado con Ballesteros? ¿Qué le parece su incorporación al club?
Baena dijo antes de las elecciones que se quitaba de en medio, que no seguía y Ballesteros dijo que iba con él. Ahora mismo no sé cómo está el tema. Yo a Luís (Ballesteros) lo conozco por el año, nos hemos enfrentado. Pero no sé si él tiene la idea de seguir perteneciendo al club, ahora mismo creo está en stand by.
¿Está dispuesto a seguir?
Sí, pero no por cómo está la vida y el fútbol, no solo porque es un puesto de trabajo. Quiero seguir porque tengo la ilusión de intentar aportar desde mi visión un club organizado y que no hablen mal de la Cultural los veteranos. Todo lo contrario, que hablen bien. Y no es tan difícil, eso es estar cercanos, hablar con ellos, tener reuniones cada cierto tiempo con el presidente, con el entrenador... Hay que mirar a ver de qué manera podemos ayudar e involucrarnos todos, no sólo los jugadores, sino también los clubes cercanos. Eso es un tema de cercanía y de dinero. ¿Por qué no puede haber una relación exquisita con el Puente Castro que está aquí al lado y tiene juveniles de División de Honor? Deberían tenerla, porque seguramente tengan un par de jugadores o tres que pudieran venir a la Cultural al primer equipo. Si estuviéramos en primera división no, pero en Segunda B sí. Es cuestión de relaciones personales, de detalles. Quiero seguir porque creo que este club lleva muchos años sin ideas.
¿Le ha dicho alguien que empiece a preparar la próxima temporada?
Estamos un poco parados por esa persona que puede llegar y poner algo de dinero. Parece ser que hay dos o tres grupos y vamos a ver quién soluciona la papeleta. Yo tengo hechos los informes de los jugadores que tenemos, dónde estamos debilitados, los jugadores que pueden seguir o no dependiendo del mercado. Cuando me digan, podremos hablar primero de lo nuestro, de lo mío, porque yo acabo contrato, del cuerpo técnico y luego ya de los jugadores.
Hablando de jugadores, ¿quién le ha sorprendido más?
Por ejemplo, me ha sorprendido la capacidad de mejora de Rubén Rivera. En diciembre estaba en duda porque yo no le di muchas posibilidades. Sin embargo, le puse un partido, funcionó, le puse el siguiente y funcionó, y ha acabado siendo de lo mejor del equipo.
¿De alguno esperabas un poco más? ¿O ha sido todo producto de la situación que se ha vivido?
No ha habido nadie. Por ejemplo, Marín, que es un jugador que traje yo, empezó mal con los tres penaltis famosos y al final ha acabado bien. Es un jugador que sabe que es irregular y que tendría que mejorar eso, si lo consigue no estaría en Segunda B, todo el mundo sabe la calidad que tiene. En líneas generales me ha gustado la capacidad del equipo de unirse. Decidieron que lo mejor era jugar y hacerlo bien, porque si no sus contratos no iban a estar asegurados por nadie, y dejar a la Cultural en Segunda B. Yo creo que ha sido el año que menos presupuesto ha tenido la Cultural en su historia, 600.000 euros. Este grupo de jugadores creo que se merece un reconocimiento, sobre todo, por el esfuerzo que hizo estos siete meses.
¿Por qué no puede haber una relación exquisita con el Puente Castro que está aquí al lado y tiene juveniles de División de Honor?
Haciendo un balance más deportivo, el equipo hizo buen fútbol pero faltó un poco de gol ¿no?
Está claro que ha habido carencias en momentos puntuales de la temporada. Al principio nos pillaban la espalda porque me gusta jugar con los dos centrales adelantados y no estaban acostumbrados, no es normal arriesgar tanto y sentían cierta desconfianza. Que sí el primer partido al Eibar le ganamos 3-0, yo como central con el culo adelante, al final estoy convencido de que esto funciona, es tan sencillo como eso. Le ha pasado a Pacheta en el Oviedo, si en vez de ganar ocho partidos como ha ganado, en cinco o seis le meten cuatro goles como le metimos nosotros aquí, su defensa piensa “pero que quiere este tío con la defensa adelante” y aquí paso eso. Empezamos la liga con la defensa tirada adelante e hicimos un partidazo contra el Eibar, que ha quedado campeón, le pudimos meter tres pero en el minuto 88 un gol en un despiste y perdimos 0-1. Luego también fuimos a Logroño y pudimos ganar 2-5 y perdimos 2-0. Al final eso crea incertidumbre, la gente solo quiere ganar y cree que el equipo no juega bien cuando eso no era verdad. Se jugaba bien, se llegaba a puerta pero si no tienes gente que haga gol puedes jugar bien pero no ganar. Yagüe, por ejemplo, al principio no tuvo fortuna y al final ha acabado haciendo muchos goles seguidos. Pagamos el no tener a un Jito que te meta 23 goles, tampoco hace falta tanto, con tener un jugador que te meta 15, más Mena que te metió 11, al final consigues 12 o 14 puntos que te hace estar salvado ocho jornadas antes.
Entonces, tener un goleador en el equipo, ¿debe ser el objetivo de cara a la próxima temporada?
Yo creo que sí, con la plantilla que tenemos actualmente debe ser el objetivo número uno, pero todavía no sabemos cuántos van a seguir porque igual se van 10.
¿Qué le parecen los aficionados de la Cultural? ¿Qué imagen tiene de ellos?
La sensación que tengo es que es una afición inteligente. Es cierto que al fútbol no va mucho, pero en la ciudad al equipo se le sigue mucho por la radio, los periódicos, etc. Creo que en León todo el mundo es de la Cultural, de hecho, pienso que tiene mucho más seguimiento que cualquier otro deporte de la ciudad. A pesar de que están en la elite como es el caso del Ademar, un equipo para quitarse el sombrero por mantenerse ahí en lo alto del balonmano. Pero la Cultural es el fútbol, el club más antiguo de Castilla y León, 87 años. Creo que son inteligentes, porque en el campo no he sentido que la gente esté con el cuchillo preparado porque no les guste lo que ven. Tengo amigos fuera del fútbol y me decían que les gustaba lo que veían y sabían que al equipo le faltaba lo que en su día pedí, un delantero y dos cositas. La lástima es que no les hemos podido dar lo que querían, pero sé que la afición está ahí, esperando que les den algo para ilusionarse. Hay que dárselo cuanto antes, porque este equipo jugando un play-off de ascenso o intentando meterse en él, llevaría 8.000 o 10.000 personas al campo, seguro.
¿Y León como ciudad? ¿Le gusta?
Me encanta. Yo la ciudad la conocía porque soy amigo íntimo de Paulino, el delantero centro que tuvo hace años la Cultu. Él siempre me hablaba de León, de hecho, tiene un piso aquí y siempre que puede viene desde Palencia. León es impresionante, a mí me gusta mucho porque es muy parecida a Albacete y además tiene una Catedral que no hay allí, un San Marcos que tampoco lo hay, un San Isidoro… Es una ciudad que está muy bien, con gente joven, con muchísimas posibilidades. Creo que se merece algún día vivir otro fútbol y si Dios quiere tener fútbol profesional que es donde debería estar, como el Numancia o el Albacete durante 20 años.