La salida del CCAN de su histórico alojamiento en la buhardila de la casona de Puerta Castillo se retrasa hasta el día 23, el plazo para el desalojo que en un principio se había fijado en el día 1 y después se pospuso al 16, ha vuelto a prorrogarse hasta el lunes de la semana que viene.
En estos días que quedan, los miembros del club se dedicarán a preparar la mudanza y a decidir su nuevo destino. “Estamos entre tres o cuatro locales, y tenemos que decidir ya a cuál nos vamos definitivamente”, comenta el presidente del CCAN, Antonio Cid. “Estamos viendo la posibilidad de ampliarnos, la buhardilla tenía sus límites y ya que tenemos que irnos estamos analizando cómo abrirnos, y dar cabida incluso a otros colectivos”, explica Cid.
En cualquier caso, el presidente de esta asociación señala que continuarán “luchando” y “reivindicando” el edificio para que lo arreglen y le den un uso. En cuanto a la posibilidad de volver a la buhardilla una vez que concluyan las obras, Cid comenta que era algo que se había barajado con la antigua corporación municipal, pero que no se ha tratado con el PP, un equipo que se ha mostrado poco inclinado hacia el diálogo, según el presidente.
La posibilidad de que el CCAN tuviera que abandonar su histórica sede llevaba tiempo sobrevolando al club, pero no fue hasta el pasado mes de noviembre cuando el Ayuntamiento realizó el anuncio oficial de que no renovaría el contrato de alquiler que caducaba este mes de enero.
El Club Cultural de Amigos de la Naturaleza surgió en el año 72 de la “inquietud de un grupo heterogéneo de personas con la intención de configurar una plataforma ciudadana antifranquista que utilizó la cultura como arma y tomándose muy en serio la ecología”. Durante años han ofrecido una diversa y activa oferta cultural.