León no confirmó ningún caso de acoso escolar el último curso pero sí 14 de ciberacoso, la mayor cifra de la Comunidad

Agencias —

El acoso y ciberacoso se redujo muy levemente, un 0,02% en las aulas de Castilla y León durante el pasado curso 2022-2023, el último del que la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León ha culminado datos oficiales y estadísticos, que ha dado hoy a conocer.

Concretamente, se detectaron 54 casos de acoso escolar confirmado y 35 de ciberacoso, por debajo de los 64 y 75 que se registraron el curso anterior, respectivamente. Unas cifras que difieren en el caso de la provincia de León, donde en el último curso no se confirmó ningún caso de acoso pero, en cambio, se detectaron 14 casos de acoso a través, por ejemplo, de redes sociales o mensajería, la cifra más alta en este apartado de todas las provincias de Castilla y León. Teniendo en cuenta que los episodios de ciberacoso autonómicos fueron 35 entre las nueve provincias, la de León albergó cuatro de cada diez casos ocurridos.

Con carácter autonómico, la mayoría se de las situaciones detectan en los tres primeros cursos de Educación Secundaria Obligatoria, como se puso de manifiesto este jueves en el noveno pleno de la Sección de Convivencia Escolar del Observatorio de Castilla y León. También destaca el hecho de que hay casi un 'empate' entre casos en centros públicos o privados concertados: de los 54 casos de acoso confirmado 26 fueron en centros públicos (44 en el curso anterior) y 25 en concertados (20), y de los 35 de ciberacoso 28 en centros públicos (63 el curso último) y 7 en concertados (35).

Además, por sexo, hubo 31 casos de acoso en hombres y 23 en mujeres, y 21 de ciberacoso en chicos y 14 en chicas.

Según informó la Consejería de Educación en un comunicado, estos datos confirman que las actuaciones en “ciberconvivencia” llevadas a cabo por los centros escolares han tenido un impacto positivo. En este sentido, destaca la labor del profesorado, en especial en la aplicación del programa P.A.R. (Parar el acoso, Apoyar a la víctima y Reeducar al agresor) donde el alumnado adquiere un mayor protagonismo en su cambio comportamental y relacional.

Incidencia en 743 centros, con el 4,03% del alumnado

En total, en el curso 2022-23 se han comunicado incidencias en 743 centros de la Comunidad (686 en el curso anterior), 581 en centros públicos (526) y 162 en concertados (160). Durante el curso 2022-2023, el alumnado con incidencias ha sido el 4,03 del total de la Comunidad (3,24 % en el curso anterior), con 13.954 de los 345.927 alumnos de todos los ciclos no universitarios de la Comunidad.

En cuanto a la distribución del alumnado con incidencias por sexos, aumenta ligeramente el porcentaje de mujeres con incidencias, aunque la relación se mantiene aproximadamente en 7 hombres cada 3 mujeres.

Un 0,57% multirreincidente y más incidencias con profesorado

 Respecto al total de alumnado de Castilla y León, el alumnado reincidente, 4.124 alumnos, supuso el pasado curso el 1,19 %, y el multirreincidente, con 1.981, el 0,57 %, manteniéndose en porcentajes muy similares respecto al curso anterior.

En el pasado curso escolar, se registraron 7.145 incidencias por relaciones directas entre profesores y alumnos, cuando el curso anterior fueron 5.479, que incluyen las agresiones al profesorado.

Destacan además otras 6.783 incidencias entre alumnos, sin ser acoso, frente a las 4.937 del curso anterior, y 29.116 en el desarrollo de las tareas académicas.

Además, se registraron 278 incidencias relacionadas con el origen o cultura del alumnado (163 el curso anterior), y otras 203 por el sexo o identidad sexual del alumnado (117).

Centros seguros

La Consejería ha sostenido que los datos del informe confirman que las actuaciones en ciberconvivencia llevadas a cabo por los centros escolares han tenido un impacto positivo. En ese sentido, las fuentes oficiales aseguran que es una “prioridad” eliminar el acoso y que los centros sean, cada vez más, lugares seguros para los alumnos. Por ello, seguirá actuando en la prevención del conflicto, la convivencia positiva y la mediación entre iguales. Además, recordó que ofrecen varias iniciativas en este sentido como el Programa Sociescuela, teatro para la sensibilización y el desarrollo de la empatía y formación en mediación escolar. 

También, cuentan con un coordinador de convivencia y con los programas de asistencia jurídica, mediante solicitud al 012, y de atención psicológica, en colaboración con el Colegio Oficial de Psicología de Castilla y León. Además, el pasado curso se introdujo, como novedad, el Test de detección de dificultades emocionales. Esta iniciativa que permite detectar 16 factores de riesgo referidos a problemas sobre internalización (desesperanza, ansiedad, depresión, autoestima…), externalización (impulsividad, conducta disocial, actitud desafiante), dificultades asociadas a la conducta alimentaria y uso problemático de nuevas tecnologías. Se trata de una prueba anónima que fue muy bien acogida por centros y comisiones provinciales de convivencia.

En cuanto a las incidencias registradas (actuaciones que nada tienen que ver con acoso, sino con comportamientos inapropiados por parte del alumnado), la Consejería de Educación busca emplear en mayor medida el procedimiento de acuerdo abreviado en vez de incoar un expediente disciplinario. De esta forma, los estudiantes y familias reconocen la falta cometida y aceptan la sanción, que en la mayoría de los casos pasa por las prácticas restaurativas.