El Colegio de Ópticos Optometristas exige a la Junta una atención pública para la salud visual de los pacientes
El Colegio de Ópticos Optometristas de Castilla y León (Coocyl) tiene en marcha una campaña de concienciación para reivindicar la importancia de su papel en la calidad asistencial de la salud visual de los pacientes, la necesidad de dotar a la sanidad pública de este servicio hasta ahora únicamente privado y la reducción de las listas de espera que supondría su incorporación a la Atención Primaria del Sacyl.
La delegada de Coocyl en León, Amaia Villena, defiende que la inclusión del óptico optometrista en la Atención Primaria no solo mejoraría la atención asistencial del paciente sino que, además, “supondría un ahorro económico para el Sacyl”.
La incidencia y prevalencia de los problemas oculares aumentan con la edad y la población de la provincia de León está en un claro proceso de envejecimiento, aproximadamente unos 50 años de media. Teniendo en cuenta que el 80% de la información se obtiene mediante la vía visual, “cualquier problema ocular causa un fuerte impacto en la vida del paciente” y la detección precoz de cualquier patología “mejora la posibilidad de recuperación de muchos problemas de salud ocular y disminuye el gasto de su tratamiento”, añade.
Actualmente, el servicio de Oftalmología en la provincia de León tiene una lista de espera de unos 80 días de media y la inclusión del optometrista permitiría reducir el tiempo de espera y realizar visitas regulares de prevención y control para aquellas personas que lo necesiten. “Podrían realizarse revisiones visuales con mayor frecuencia para determinar la evolución de un problema visual que lo requiera o realizar funciones específicas de los optometristas, como la terapia visual, que requiere varias visitas a la consulta”, subraya.
La inclusión de los ópticos optometristas de la Sanidad pública permitiría ofrecer nuevas prestaciones a los pacientes, como la terapia visual, que actualmente no pueden tratarse en la Seguridad Social y solo puede realizarse de manera privada.
Por otro lado, hay enfermedades sistémicas, como la diabetes y la hipertensión, que pueden presentar signos oculares, detectables mediante una revisión visual. Por tanto, “la revisión de la vista permitiría, posteriormente, diagnosticar estos problemas de salud por parte de especialista oftalmólogo, lo cual sería muy beneficioso para el paciente”.
“Creo que todos deberíamos tener derecho a una atención visual de calidad de forma pública”, enfatiza para defender el principal objetivo de la campaña del Colegio. Toda la información sobre las ventajas de la inclusión de los ópticos optometristas en el Sacyl se puede consultar en su página web, además de en las redes sociales a través del hashtag #ÓpticosEnSacyl.
Salidas profesionales públicas para una titulación también pública
Castilla y León es una de las pocas comunidades autónomas españolas con estudios de Grado en Óptica y Optometría, totalmente consolidados y con una alta empleabilidad, tras una trayectoria de 27 años en la Universidad de Valladolid (UVa).
Además, los ópticos optometristas afianzan cada día su papel en la sociedad como profesionales sanitarios en la atención primaria de la salud visual. De hecho, como se recoge en la última edición del ‘Libro Blanco de la Salud Visual en España’, del 70% de ciudadanos que se revisan la vista periódicamente, la mayoría (47%) lo hace en establecimientos sanitarios de óptica, siete puntos más que en 2017.
Representantes de Coocyl esperan una nueva reunión con la Consejería de Sanidad para seguir avanzando en este proceso de incorporación, que ha sido bien acogido en encuentros previos, tanto con la anterior consejera de Ciudadanos Verónica Casado, como por el que fuera director general de Asistencia Sanitaria a inicios de esta nueva legislatura, Francisco Javier Vadillo, al que posteriormente sustituyó en el cargo Silvia Fernández.
