El Gobierno de la Generalitat Valenciana ha decidido cerrar su radio y televisión públicas -RTVV- conocido como 'Canal Nou' tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) que declaraba nulo el Expediente de Regulación de Empleo que afectaba a un millar de empleados.
La sentencia apreciaba “irregularidades importantes” en el ERE y por ello decretaba su nulidad, lo que suponía la vuelta de los trabajadores al ente público audiovisual valenciano. La reacción del Gobierno de Alberto Fraba (PP) ha sido anunciar el cierre de su radio y televisión públicas debido a la imposibilidad de costear su infraestructura por el delicado estado de las cuentas de la Comunidad Valenciana.
La presidenta de la Federación de Asociaciones de Prensa de España(FAPE), Elsa González, aseguró este martes que el cierre de la Radio Televisión Autonómica Valenciana, de confirmarse, sentará “un peligroso precedente para otros entes autonómicos que ya están en una situación similar y para lo que puede pasar en otros en el futuro”.
“El cierre de Canal Nou pone en evidencia las consecuencias de una mala gestión política y de la burbuja mediática, que, de nuevo, sufrirán los profesionales de la comunicación y los ciudadanos, que verán empobrecida su libertad de elección de medios con el adiós de un medio con un gran peso”.
A Canal Nou se le considera la televisión en la que nació el concepto actual de 'telebasura' con el mítico programa del corazón 'Tómbola', formula exportada y copiada una y mil veces hasta nuestros días.
La plantilla que se quedaría en el paro es de unos 1.700 trabajadores, inlcuyendo a los afectados por el ERE. La deuda que asumió la Generalitat Valenciana antes de la última reestructuración ascendía a unos 1.200 millones de euros.