Paponaci, la flagelación del postureo en la Semana Santa de León en las redes sociales

Imagen del perfil de @Paponaci en Twitter, su espacio natural.

C.J.D.

“Que si, joder. Que soy mujer. No me preguntéis más. Si no te gusta lo que escribo, NO ME SIGAS”. Con esta descripción, y cuatro años de vida, la cuenta en Twitter más controvertida y ácida de la Semana Santa de León se llama @Paponaci. Y no deja indiferente a casi nadie con sus pullas no tanto a los actos de la Pasión en sí sino a “esa gente que hace de la Semana Santa su especial teatrillo particular”, protagonistas de “ese postureo exacerbado que corre por la capital desde el Viernes de Dolores”.

Hasta ahora, poco o menos que poco se sabía de quién puede estar detrás de esta cuenta que supura tanta mordacidad y no pocas veces una mala leche que enerva al papón, al músico de banda o al abad más pintado.

Aunque a dios puso por testigo que sólo respondería preguntas de Diario, Crónica o El Hormiguero, en realidad es a iLeon.com a quien desvela algunos -pocos- de sus secretos mejor guardados, porque el anonimato es esencial: “Alguno no entiende la esencia de Paponaci y se siente molesto; y una todavía quiere conservar los dientes... Aunque últimamente tengo muchos seguidores afines alentándome para que sea más dura con determinados sectores, pero ya les he dicho que no soy Risto Mejide ni la mujer de Federico Jiménez Losantos”.

¿Y qué secretos son esos? “El único dato que puedo aportar es que este año saldré de manola en la Procesión de los Pasos (Viernes Santo); solía ir con 'la Verónica' pero tuve que cambiar porque un día lo publiqué en un tuit y casi me pillan”.

Pistas para desenmascararla y “el bigote sin depilar” para no destacar

Para quienes quieran estar atentos y desentrañar el misterio de bajo qué peineta se oculta la flageladora tuitera, más pistas: “Ese día la cara me va a oler a manzana, la piel a aceite de argán, el pelo a mascarilla de caléndula y el sobaco a desodorante de hombre... Vamos, que en vez de parecer una manola voy a parecer un travesti venezolano. Por cierto, llevo sin depilarme el bigote diez días, como muchas de ellas, para no destacar”, atiza, para ponerse luego un poco más seria: “Me gustaría hacer un llamamiento para que volviera la moda de la manola seria y elegante, porque... ¡joder!, alguna parece Cantinflas”.

Metidos en tema manolas, al hilo de la polémica de la portada de la revista municipal 'Pasión' con piernas de mujer, Paponaci no termina de entender el revuelo: “Si ponen las piernas de una manola, porque las ponen; si ponen al Nazareno, dirían que siempre ponen al mismo... El caso es protestar”.

Su apuesta habría sido sacar la foto del abad de alguna cofradía, “habría mejorado”. Pero por lo que jamás habría apostado ella es “ni una escultura de Melchor Gutiérrez ni una foto del sacristán de la iglesia del Mercado... Ya sabes, mis padres son mayores, la podrían ver y quiero disfrutar de ellos muchos años”.

“Jesucristo amaba a todos. ¿Quién cojones es el abad de Minerva o el Nazareno?”

Más pistas sobre la identidad secreta de @Paponaci: pertenece a la Cofradía María del Dulce Nombre. Es, sí, una de 'Las Marías'.

Y “aunque Paponaci no está para temas serios”, con el veto a las mujeres que mantienen las dos históricas cofradías de hombres tiene claro que “en el siglo XXI las mujeres debemos tener acceso a cualquier puesto con independencia del sexo u orientación sexual”. “¿Acaso Jesucristo no amaba a todo el mundo por igual? Entonces que me expliquen a mi quién cojones es el abad de Minerva o el Nazareno para decir lo contrario, o porqué no puedo tocar yo en cualquiera de sus bandas”, se indigna verazmente.

Pero, ¿cree justo, necesario y equiparable que Las Marías sean sólo de mujeres y veten a su vez a los hombres? “Las 'Marías' surgieron como una especie de mecanismo de defensa, algo teníamos que hacer... Aunque reconozco que en esta Cofradía, a la que pertenezco desde hace años, sí sería necesaria la presencia de hombres, al menos en la sección de montaje, porque yo desde aquel desgraciado accidente del año 2015, cada Jueves Santo, con lágrimas en los ojos y despreciando la vida, me despido de mi familia con un abrazo, como si fuera el último. Con ellas montando los pasos nunca se sabe... Mi madre me dice: ”Hija, ¿vas a una procesión?, porque llevas una cara que parece que te vas a montar en el helicóptero con Calleja“”.

Una cuenta plagiada

La cuenta @Paponaci nació hace cinco años pero ella -o él, o quien sea que esté detrás de ese capillo y esa pistola que ilustra su perfil-, la gestiona “desde hace cuatro”, porque no lo oculta: la plagió.

“Vi en Twitter una cuenta que se llamaba @paponaci1, me hizo gracia y contacté con su administrador” para después 'usurparla'. No tiene remordimiento alguno: “Vivimos en España la cuna de los plagios. Pedro Sánchez, Pablo Casado y Ana Rosa Quintana han sido acusados de ello... Paponaci no podía ser menos. Solo los mejores lo hacemos...”.

“Hay muchos capillitas”

En estas cuatro semanas santas troleando, ha pasado de un inicio en el que “me amenazaban bastante más” a “todo lo contrario ahora: incluso me pasan información por privado o me dan muchas ideas, hay más cabrones de los que pensaba... ¡como en la vida misma!”. Y aunque su cuenta apenas supera los 350 seguidores, “hay muchos capillitas que leen los tuits aunque no se atrevan a seguirme, y me asombro cuando veo que algunos tienen hasta 3.000 interacciones”.

Su lacerante batalla, dice, es no contra la Semana Santa leonesa ni contra León, “una ciudad espectacular, no sabemos la suerte que tenemos”. Pero le puede “la vergüenza ajena que siento cuando veo a todos esos personajillos que salen trajeados de su casa desde el Miércoles de Cenizo, que suele coincidir con lo más selecto y granado de la ciudad, gente que se cree que son la Generación del 27, aunque estoy segura de que les mandas poner una lavadora y no sabrían separar la ropa blanca de la de color”.

Primera cruz: las bandas de música... y el baño de La Bicha

Repasando su muro de Twitter, Paponaci parece tener algunas fijaciones. Primera cruz: Las bandas de música leonesas. ¿Todas son tal desastre como lo pinta?

“Yo no castigo a las bandas, sólo las intento hacer bajar de su ego, sobre todo a algunas, porque no puede ser que por ir a tocar a otras provincias se crean que son el centro del planeta”. Le sirve el ejemplo de “la Banda de las Bienaventuranzas, que dijo que era ”la Triana del Norte“. ”¡Flipa, la Triana del Norte! En ese momento me tuve que meter en el baño de La Bicha y vomitar“.

Pero otras agrupaciones musicales, defiende, merecen la pena. “Salvo a cualquier banda que se implique en la formación musical de los niños, a las que admiten mujeres y que no preguntan si eres gay o lesbiana, las que te tratan como eres, las que tienen buen ambiente... Pero no te voy a decir ningún nombre porque antes prefiero arrancarme la lengua”, se autoimpone para no parecer benevolente en exceso.

Segunda cruz: los 'cronistas' mediáticos

Segunda cruz: los cronistas de los medios de comunicación. Categórica Paponaci cuando afirma que “no salvo a ninguno”. Xuasús González (La Nueva Crónica) “probablemente sea de los que más trabajan por la Semana Santa, además de forma entusiasta y casi siempre altruista pero el problema que tiene es que ha coincidido en la dimensión espacio- tiempo con Paponaci, y eso es un gran hándicap”. Pero “si Belén Esteban escribió un libro y Kiko Ribera grabó un disco, el pregón de Xuasús está al caer, y ese día doce jinetes negros cabalgarán por León y habrá llegado el Apocalipsis”.

Por otro lado, “me gusta Susana Vergara” (Diario de León), “no sé por qué pero la he cogido cariño”. Y para compensar “no me gusta Luis Cañón (Onda Cero León), se esconde detrás del cargo y podría utilizar su talento para denunciar determinadas cosas que podrían cambiar, pero a ver si le van a mover la silla”.

¿Museo de Semana Santa o Conservatorio?

Tras la polémica de los 5 millones -la mitad públicos pero contratados 'a dedo' por el Obispado- que cuesta el Museo Diocesano y de la Semana Santa, ¿qué opina Paponaci de que por contra no haya todavía después de once años un nuevo Conservatorio de Música en León? Pues que al menos espera “que la gestión corriese a cargo de la Junta Mayor” porque “no están los tiempos para que los curas se acerquen a los niños”; y que “todo lo que se dedique a la música y la formación de jóvenes es buena inversión”.

Con todo esto, solo queda la duda de si Paponaci aspira a presidir la Junta Mayor alguna vez. Y cuál sería su 'programa electoral'. Claro sí lo tiene: “Una carrera oficial, como en Andalucía, pero mejorada, creo que lo podríamos hacer mucho mejor; ya sabes, ingenua se nace”.

Y una sugerencia final, látigo en mano: “Que quiten la procesión del Lunes Santo de La Sagrada Cena, algunas imágenes se parecen al que sale con la escoba en el tren de la bruja; fui a verla con mi sobrina y esa noche tuve que dormir con ella”. Es Paponaci. En estado puro para no dejar a nadie indiferente e irritar a todo el mundo. Incluso a un periodista.

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