La estación de autobuses de León será la ubicación elegida por la Junta de Castilla y León para el Centro de Control de Tecnología del Transporte Interurbano de Castilla y León, un centro de nueva creación que se prevé completar con el estudio de traslado a León del actual centro de control del transporte a la demanda, que hoy se sitúa en el Parque Tecnológico de Boecillo en la provincia de Valladolid.
Así lo anunció hoy el consejero de Fomento y Medio Ambiente en funciones, Juan Carlos Suárez-Quiñones, quien explicó que los fondos Next Generation de Europa por la crisis de la covid aprobaron la financiación de un proyecto de tecnificación y digitalización del transporte interurbano que, con un presupuesto de más de 25 millones de euros, permitirá “un control digital de todo el tráfico de autobuses interurbanos y parcialmente de los metropolitanos” y “darle un marchamo muy importante de modernidad”.
El titular del área de Fomento y Medio Ambiente hizo este anuncio en el marco de su visita a las obras de reforma integral de la estación de autobuses de León, presupuestada finalmente poco más de 5,5 millones de euros, con otros 600.000 euros para desarrollar la conexión de pasajeros entre esa estación de bus y la cercana de tren, pero que aún está por diseñarse, explicó. En total, 6,1 millones de una obra que en su día se llegó a mencionar con 8,5 millones, frente a los casi 70 de la reparación y modernización de la estación de autobus de Valladolid.
Ahora, con los trabajos en marcha en León, que han vaciado de momento toda la estructura central del edificio, se actúa en “estructura, estética y funcionalidad”, resaltó el consejero en funciones.
Las obras, que se iniciaron en el mes de septiembre y se prevé que concluyan en marzo de 2023, tras un periodo de ejecución de 18 meses, darán pie a “una estación moderna, de calidad y categoría”, que estará “orientada a la comodidad, la accesibilidad y la electrónica”, al tiempo que aportará “mayor seguridad a los viajeros” hará una apuesta por “la eficiencia energética” para combatir el cambio climático, para lo que contará con calefacción de biomasa.
También se pretende apostar por las infraestructuras de entretenimiento y comercio para “dar una nueva vida a la estación” y que “no sea un elemento aislado” en la ciudad.
Una vez concluidas las obras, la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl) se encargará de su gestión durante 20 años con un coste total de 8,5 millones para todo el periodo. No obstante el proyecto de la obra de intermodalidad, que cuenta con una partida de 600.000 euros del presupuesto total, todavía está en desarrollo.
De manera paralela al desarrollo de esta obra, la Consejería de Fomento y Medio Ambiente también trabaja en la gestión de los vehículos del transporte de viajeros por autobús, que en el caso concreto de la estación de autobuses mueven a 1,5 millones de personas al año en expediciones internacionales, interautonómicas e interprovinciales.
Para gestionar bien ese transporte, la Junta de Castilla y León “tiene en marcha varias fórmulas”. La primera de ellas pasa por unas nuevas licitaciones de las concesiones de todas las líneas de transporte interurbano de Castilla y León, para lo que se ultimará un mapa de ordenación del transporte que, junto con unos anteproyectos de explotación, “determinarán una nueva licitación” que permitirán unas nuevas licitaciones que “tendrán ventajas desde el punto de vista de la comodidad, la modernidad, la digitalización y la sostenibilidad”.
De este modo, tal y como apuntó Juan Carlos Suárez-Quiñones, “el panorama del transporte interurbano de Castilla y León cambiará por completo a lo largo de la nueva legislatura”.
13 millones para el transporte de León y sus alfoz
El consejero de Fomento y Medio Ambiente también puso de relieve que el Gobierno autonómico trabaja con el Ayuntamiento de León “en una mejora muy relevante del transporte metropolitano”, es decir, “la unión del transporte urbano, competencia del Consistorio, con el interurbano, competencia de la Junta” y que “cuenta con una interacción entre la ciudad y los municipios del alfoz”.
Para ello, la Junta de Castilla y León cederá las competencias del transporte a la Mancomunidad de Interés General que está ya constituida y en trámite de cambiar sus estatutos para asumir las competencias del transporte de viajeros a través de un convenio. Esta decisión supondrá una inversión de 13 millones de euros por parte del Gobierno autonómico para los próximos cuatro años para la gestión de este transporte, que se convertirá en “moderno y señero para España”.
A esta nueva gestión del transporte metropolitano de León a través de la MIG, que “será muy relevante y permitirá racionalizar el transporte”, se sumará una inversión europea de más de diez millones de euros para digitalizar y transformar este transporte en la ciudad y el alfoz, lo que supondrá que sea “sostenible, con un marchamo de lucha contra el cambio climático y otro de digitalización” y que “convertirá a León en el foco del nuevo transporte” en línea con los objetivos de la Unión Europea, que pasan por la sostenibilidad, la transformación digital y la mejor eficiencia para la cohesión territorial y social.