La caída de cascotes del edificio neomudéjar de Alcázar de Toledo, BIC protegido, cortó el tráfico de madrugada

Redacción ILEÓN

4 de septiembre de 2023 11:17 h

Si no ves este contenido puede deberse a la carga en tu dispositivo móvil. Haz clic aquí para recargar la página.

Las inclemencias meteorológicas, aunque quizá no sólo el efecto del temporal de lluvia y viento, provocó a primera hora de esta mañana de lunes una peligrosa caída de cascotes del edificio neomudéjar situado en la céntrica calle de Alcázar de Toledo.

Así lo informa una nota de prensa remitida por el Ayuntamiento de León respecto a las actuaciones que tanto la Policía Local como los Bomberos de León tuvieron que realizar a causa de las intensas lluvias caídas durante la noche. La situación afectó al mencionado edificio, situado en el número 12 de la calle Alcázar de Toledo, lo que obligó en torno a las siete de la mañana, que fue cuando se avisó de los desprendimientos, a cortar el tráfico rodado por esa calzada. También se impidió el paso de peatones por esa acera y su desvío hacia de los números pares de la mencionada calle.

En estos momentos, el inmueble está siendo objeto de obras tras la adquisición del edificio, que ya acumulaba mal estado por el abandono de años, por parte del doctor José Manuel Valle Folgueral, con la idea de convertir el espacio en una nueva clínica de patologías de columna con alojamiento de pacientes.

El desprendimiento cobra especial interés, además, por el hecho de que el palacete, que está declarado como Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de 'Monumento' desde hace 25 años. Eso significa que la Junta de Castilla y León tendrá que tomar cartas en el asunto, ya que la vigilancia del patrimonio protegido es de su competencia.

Otras intervenciones

Como consecuencia de las abundantes lluvias registradas en las últimas horas, la Policía Local del Ayuntamiento de León también intervino en otros incidentes como el registrado en la confluencia de las calles Emilio Hurtado y Diario de León, en el acceso a la Universidad.

Mientras los agentes se encontraban realizando un servicio de patrulla observaron una gran cantidad de agua en la calzada, anegada con unos 15 centímetros de agua, por lo que avisaron al servicio de aguas para solventar el problema. Los agentes de la Policía Local también avisaron a este servicio tras ser requeridos en la calle San Pedro de Castro, por un atasco de las alcantarillas que provocó acumulación de agua en la vía.