La emblemática factoría de Antibióticos, una de las empresas enseña de León inmersa en los últimos años en una profunda crisis, pasará a manos del fondo de inversión Black Toro Capital (BTC). La decisión ya está tomada. El magistrado del Juzgado de lo Mercantil acaba de rubricar su determinación, según Diario de León. La inversión y el empleo ofertados por BTC han sido los factores cruciales en la comunicación del juez, añade el rotativo en su edición de hoy Diario de León. Con esta decisión, queda despejada la incógnita de la identidad del comprador de Antibióticos, en una pugna en la que también estaba presente el grupo Gadea. La determinación del magistrado coincide con el informe en la misma línea emitido, y remitido al juzgado, por los administradores concursales.
Black Toro Capital aportará nueve millones para la compra de los activos y absorberá 170 de los 250 trabajadores de la compañía. Los aproximadamente 70 que se quedarán fuera tendrán que enfrentarse a un expediente de extinción de empleo. Esta nueva fase que ahora abrirá la fábrica cerrará definitivamente el largo y conflictivo periodo que vivió en manos del empresario italiano Pucci. A partir de ahora, el fondo de inversión tiene por delante la ingente labor de volver a poner en marcha la factoría. El proceso requerirá importantes inversiones dado el deterioro de las instalaciones y sus equipamientos después del dilatado periodo sin actividad, prácticamente dos años.
El informe técnico no vinculante remitido al Juzgado de lo Mercantil por los administradores concursales constataba también las ventajas de la oferta de Black Toro sobre la planteada por Gadea, principalmente, por los dos aspectos ya señalados: inversión y empleo. El documento, además, remarcaba las alegaciones realizadas por el comité de empresa ante el proceso de liquidación de la compañía, que enfatizó en el Juzgado su interés por la oferta del fondo de inversión.
Los números planteados por BTC cifran en 34 millones la aportación en Antibióticos, tal y como comunicaron en su momento al comité de empresa: nueve por la compra de los activos y 25 en inversiones directas en la fábrica, siete de ellos tendrán como destino durante los primeros meses el coste de arranque y puesta en marcha de las instalaciones, renovación de licencias e inversiones en equipamientos adicionales. Para comprar materias primas empleará cinco millones del importe total y otros suministros necesarios para la producción. Los 13 restantes tendrán como fin la financiación de la fábrica hasta que se logren niveles estables de producción.
Por lo que respecta a los empleos, el fondo inversor sumará a su proyecto en León 170 de los 250 que integraban la plantilla, a través de la subrogación correspondiente. El resto, 80, serán incorporados a lo largo de los primeros 36 meses de actividad. Medio centenar de los 170 que se incorporarán estarán en régimen de suspensión temporal durante los meses precisos para que sus zonas de producción y sus puestos estén plenamente operativos.
Black Toro se ha mostrado convencido, como aseguró al comité, de que la factoría superará los niveles de la competitividad del mercado asiático. Sobre el plan industrial informaron del crecimiento que se prevé en todo el mundo en la fabricación de productos antibióticos, unas expectativas que avalan la inversión en la fábrica con viabilidad. También aportó cartas de compromiso de compradores internacionales para la producción que salga de la factoría de León.
El comité, además, tuvo conocimiento en ese mismo encuentro de los productos que tienen previsto elaborar en Antibióticos en el horizonte de los próximos años: penicilánicos de semi-síntesis, estériles y productos farmacéuticos para terceros. Igualmente, BTC hizo referencia a la constante inversión que realizará en proyectos de investigación I+D.