La Junta se 'olvida' de los fusilamientos en Villadangos del Páramo en el proyecto de ampliación del polígono industrial
La Junta de Castilla y León se 'olvida' de los fusilamientos del franquismo en Villadangos del Páramo en el 'Avance del Plan Regional Territorial' para la ampliación de su polígono industrial que acaba de salir a información pública. Está documentado que en esa zona fueron asesinadas decenas de personas durante la guerra civil, y parte de los restos reposan hoy en el cementerio de la localidad.
El documento de 191 páginas, anunciado a través del Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) y publicado en la web de Gobierno Abierto de la administración autonómica, no dedica una sola palabra a ese episodio de la historia del municipio, la provincia de León y España, ni siquiera en el epígrafe destinado específicamente para ello.
El punto 5.2 del documento, 'Historia', se retrotrae a que “Villadangos parece haber tenido su origen en un asentamiento Astur, conquistado por los romanos sin violencia”, dice textualmente. Salta a la época medieval en la que sufrió “sangrientas incursiones musulmanas”. Hace alusión a que permaneció siglo y medio sin habitar hasta la “repoblación” de los reyes de León, “a finales del siglo IX o principios de X”. Se detiene ampliamente en el enfrentamiento armado entre gallegos y partidarios de doña Urraca y aragoneses partidarios de Alfonso I El Batallador en el siglo XII, que se rememora cada año en la Fiesta-Mercado Medieval. Recuerda que fue Señorío Eclesiástico en 1112 y marquesado de 1788 a 1837 por Carlos III. Y desde ese momento hasta la actualidad, en la que Villadangos “es la sede del Ayuntamiento de su nombre”, nada.
Resalta que “dentro de los límites del propio municipio figura la construcción de una zona residencial denominada 'Urbanización Camino de Santiago'”, de la que da detalles como cuándo comenzó a edificarse, con qué fin y cómo ha ido creciendo. Y cierra el apartado la cuestión “destacable” de “la construcción, en la primera década de este siglo, del importante polígono industrial” que se quiere ampliar: por ser “un referente”, “que ha supuesto un gran impulso económico” y que la Junta pretende convertir en el más grande de toda la Comunidad.
Silencio absoluto sobre el golpe de estado de julio de 1936, sobre que el monte de Villadangos fuese el escenario de una de las peores represiones en León durante la guerra civil y sobre la consideración de que hubo más de cien 'paseados' en un periodo temporal de tres meses.
Año y medio de trabas para buscar a los represaliados
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) decidió apurar los trámites para buscar los restos humanos de las decenas de personas que se calcula que fueron asesinadas y hechas desaparecer en la localidad al conocer la intención de ampliar el polígono industrial, en septiembre de 2020. En ese momento, pidieron al alcalde, el 'popular' Alejandro Barrera, que pusiera especial atención en el desarrollo de cualquier obra que pudiera hacerse, por si aparecía alguna fosa y así evitar que los cuerpos quedasen sepultados para siempre bajo el hormigón.
Después de escuchar numerosos testimonios que aseguraban que un cura de la localidad, ayudado por vecinos, trasladaba de noche en un carro a los cuerpos hasta el cementerio para darles sepultura, la ARMH pidió permiso para hacer las exhumaciones en el camposanto. Allí empieza este jueves 24 de febrero la búsqueda de unos setenta cuerpos de represaliados, entre ellos una mujer, sin saber si todos los asesinados fueron trasladados al cementerio o alguno fue enterrado en el lugar donde acabaron con su vida. Es por eso que la asociación también ha solicitado “explorar” los terrenos industriales antes de edificar. Especial interés tiene la llamada 'Senda de la sortija', que se encuentra ya parcialmente ocupada por el actual polígono industrial y en la que reclaman una revisión del terreno.
El legítimo derecho de las familias de las víctimas del franquismo a recuperar los cuerpos de sus seres queridos lleva meses a la espera. El Consistorio decidió dejar en manos del concejo del pueblo, que tiene la titularidad del cementerio, la decisión de autorizar a la ARMH o no los trabajos en el camposanto. Tras un tenso debate y una polémica votación, fomentada por las dudas sembradas por miembros de la corporación municipal, 22 vecinos vetaron la búsqueda en agosto. El asunto llegó hasta la Junta de Castilla y León y el propio consejero responsable de la Memoria Histórica, Francisco Igea, se presentó en Villadangos para hacer cumplir la Ley de Memoria Histórica.
No obstante, los plazos que preveían iniciar los trabajos en el mes de septiembre del año pasado eran ya imposibles de cumplir y Rufino Juárez, el hijo de uno de los fusilados en Villadangos, falleció sin haber recuperado los restos de su padre. Las exhumaciones empezarán ya sin Igea en el ejecutivo autonómico, en un Gobierno en funciones del PP, a la espera de un nuevo Gobierno autonómico previsiblemente entre PP y Vox que ha puesto como una de las líneas rojas para su pacto con Alfonso Fernández Mañueco la derogación de la Ley de Memoria Histórica.
