La Junta recuperará las Patrullas Oso cuando mejore la situación económica

Patricia F.S./Infobierzo.com

La decisión de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de derivar, a partir de 2014,el trabajo que desempeñan los empleados de las Patrullas Oso a los agentes medioambientales del Gobierno autonómico ha causado el malestar entre algunos colectivos defensores de esta especie en peligro de extinción. Consideran que esta medida repercutirá negativamente en la conservación del número de ejemplares del oso pardo que desde 1995, ha conseguido alcanzar más de 200 en la Cordillera Cantábrica, en uno de los 'corredores' más estables para la pervivencia de esta especie.

El director general de Medio Natural de la Junta de Castilla y León, José Ángel Arranz, precisaba que sigue operativa la Patrulla Oso del Alto Sil, mientras que las otras dos destinadas a las zonas de Riaño y Fuentes Carrionas (Palencia), han dejado de prestar este servicio debido al alto coste para mantener estos recursos. Añadía que los agentes medioambientales de la Junta tendrán que compatibilizar el trabajo de conservación del oso pardo con el de mantenimiento del urogallo.

No obstante, Arranz avanzó que en el momento en que la coyuntura económica lo permita, se volverá a contar con el servicio que prestaban las Patrullas Oso, al menos, con dos grupos permanentes en la zona oriental y la zona occidental, además de una que reforzará su trabajo en las zonas donde su trabajo sea necesario.

Para casos puntuales, el director general de Medio Natural de la Junta ha señalado que se sigue trabajando de forma intensa con la Fundación Oso Pardo (FOP), que en 1995 ponía en marcha las Patrullas Oso, formadas por profesionales con alta cualificación. En 2010, la Junta se hizo cargo de estas patrullas y ahora, por falta de financiación, se han suprimido dos de ellas y a partir de ahora, serán los agentes medioambientales del Gobierno regional quienes asuman esta labor de conservación del oso pardo.