La planta de reciclaje de palas eólicas proyectada por Endesa en el municipio berciano de Cubillos del Sil recibe una subvención de 3,2 millones de euros dentro del programa marco Horizonte Europa. Este proyecto forma parte del Plan Futur-e de la compañía eléctrica para los terrenos que ocupaba la central térmica de Compostilla II, actualmente en proceso de desmantelamiento. El organismo europeo que otorgó la subvención destacó esta iniciativa como “un proyecto innovador que permitirá aplicar realmente el concepto de economía circular, reciclando no solo los componentes sino dándoles una segunda vida útil”.
Al respecto, la iniciativa ‘Blades2Build’ pretende evaluar y demostrar a gran escala la posibilidad de reciclar, recuperar y reutilizar este tipo de elementos. El proyecto está integrado por un consorcio internacional formado por 14 empresas y centros de investigación europeos, con Endesa y la consultora PreZero liderarando la fase de demostración con la iniciativa de la planta de reciclaje en el Bierzo. El proyecto contará con un total de 12,3 millones de euros en ayudas, de los que 3,2 millones se destinarán directamente a la planta de reciclaje.
La nueva instalación, cuya primera piedra se pondrá a finales de 2023, pretende reciclar más de 2.000 unidades de palas eólicas al año, es decir, unas 6.000 toneladas anuales de ‘composite’ de fibra de vidrio y carbono de los aerogeneradores y dar una segunda vida a los materiales de las palas aplicando criterios de economía circular. Además, Endesa y PreZero trabajan para que esta nueva instalación sea “una opción de futuro para una zona muy representativa para la compañía energética”. Al respecto, se estima que una vez entre en funcionamiento se creen cerca de 30 puestos de trabajo directos y se genere adicionalmente empleo indirecto asociado a tareas logísticas.
Igualmente, la nueva planta dará más competitividad a la factoría de LM Wind Power en Ponferrada, así como a la que la misma empresa gestiona en Castellón, ya que ambas tienen residuos de fibra de vidrio generados durante sus procesos de fabricación. La fibra de vidrio recuperada podrá ser utilizada, entre otras aplicaciones, en sectores como el de la automoción, la construcción o el cerámico, creando de este modo una economía circular en el negocio eólico español.
En ese sentido, el responsable de innovación de Generación de Endesa, Andrés Sánchez-Biezma, subrayó que el reconocimiento europeo “refuerza el trabajo realizado conjuntamente entre Endesa y PreZero en la búsqueda de nuevos productos elaborados a partir de residuos de la industria eólica en la futura planta de reciclaje de Cubillos del Sil”. El representante de la compañía eléctrica valoró el apoyo de la Comisión Europea a “un proyecto altamente innovador para la gestión de este tipo de residuos, temática de alta prioridad a nivel europeo”.
Por su parte, la directora de Operaciones e Ingeniería de PreZero en España y Portugal, Mónica Ramos, remarcó que “esta nueva planta permitirá impulsar la innovación y renovación en los parques eólicos europeos y generar así un mayor volumen de energía verde conseguida de una forma mucho más sostenible”. Ramos indicó que “gracias a este proyecto se avanzará hacia la economía circular en el reciclaje de las palas, evitando así que lleguen a vertedero”.